Y lleg¨® la bruma
Jos¨¦ Ignacio Carnero retoma la senda de la autoficci¨®n en su nueva novela, ¡®Hombres que caminan solos¡¯, una narraci¨®n a modo de confesi¨®n sobre la depresi¨®n
En Hombres que caminan solos, Jos¨¦ Ignacio Carnero (Bilbao, 1986) retoma la senda de la autoficci¨®n recorrida en Ama (2019) ¡ªlibro que trataba sobre la enfermedad y muerte de la madre¡ª y al que en ocasiones se alude en esta segunda novela porque Jose, el narrador y personaje central, es a todas luces una figura de marcado sesgo autobiogr¨¢fico, uno de cuyos rasgos es esa reci¨¦n estrenada condici¨®n de escritor. Y as¨ª, conforme escribe su cr¨®nica del a?o que vivi¨® bajo la bruma, manifiesta unas cuantas convicciones (y tambi¨¦n dudas) que apuntalan y en gran medida explican el nuevo libro.
La principal certeza ata?e a la propia figura del escritor: ¡°La ¨²nica diferencia entre los escritores y los dem¨¢s no se encuentra en la presunta genialidad de los primeros, sino, si acaso, en la marginalidad, la frustraci¨®n vital y la incomunicaci¨®n que ¨¦stos arrastran y que tratan de superar a trav¨¦s de su trabajo¡±. De ah¨ª que, siendo estos tipos tan ordinarios y corrientes como cualquier otro, en la novela tengan cabida un buen n¨²mero de hechos cotidianos, aparentemente insignificantes pero que, sometidos a un examen implacable, revelan unas formas de vida, una mentalidad o una posici¨®n ante el mundo ¡ªa menudo extrapolables a la generaci¨®n del autor¡ª como sucede con los modos de relacionarse o ¡°la deshumanizaci¨®n a la que nos ha llevado el mundo digital¡±. Y si ¡°hablar de uno mismo no resulta demasiado interesante porque no hay muchos misterios m¨¢s en la historia individual de cada uno¡±, otra cosa es cuando alguien se hunde en una depresi¨®n. La parte central de Hombres que caminan solos narra esa experiencia, al modo de confesi¨®n o dietario de un hombre perdido. Dicha experiencia se articula como un viaje al fondo de s¨ª mismo ¡ªun viaje est¨¢tico, en soledad y de un encierro casi absoluto¡ª que se contrapuntea con el recuerdo de otros viajes y con la narraci¨®n del que necesita emprender a Buenos Aires para romper el maleficio, junto con los que le siguieron al regreso, estos ya surgidos del prosa¨ªsmo de la vida o del azar.
Es imposible detallar aqu¨ª el fino engranaje con que se traman todos estos elementos y materiales, que establecen entre s¨ª afinidades o ant¨ªtesis, en un juego perteneciente ya al plano exclusivo de la ficci¨®n m¨¢s exigente. Y tambi¨¦n es notable la singular extra?eza de los personajes femeninos ¡ªLaia o Paula-Malena¡ª frente a la peculiar simpleza o normalidad de otros como el padre del narrador o Mario, cuyas vidas por momentos rozan el absurdo o al menos el nonsense. Y es que m¨¢s de una vez afloran en esta novela una iron¨ªa y un humor muy medidos, adem¨¢s de una serie de referencias ¡ªlecturas, pel¨ªculas y canciones¡ª que apelan a un lector c¨®mplice capaz de poner la oreja y escuchar, como se hac¨ªa de ni?o con lo que contaban los mayores. Sobre todo las madres y los corros de amigas y mujeres del barrio: ¡°Narraciones aparentemente improvisadas que describ¨ªan sucesos, uno tras otro, episodios que parec¨ªan desconectados entre s¨ª, que se acumulaban, avanzaban, retroced¨ªan y hac¨ªan perder el hilo de la conversaci¨®n, pero que esas mujeres, cuando llegaban al final de su relato, encajaban y daban sentido como s¨®lo el mejor de los novelistas ser¨ªa capaz de hacer. Era una ¨²ltima pirueta, un triple salto mortal, que repet¨ªan una y otra vez y que siempre ejecutaban con destreza¡±.
As¨ª Jos¨¦ Ignacio Carnero, en Hombres que caminan solos.
HOMBRES QUE CAMINAN SOLOS
Autor: Jos¨¦ Ignacio Carnero?.
Editorial: Literatura Random House, 2021.
Formato: tapa blanda (192 p¨¢ginas, 17,90 euros) y e-book (8,99 euros).
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