Los mejores c��mics de 2024

De la innovaci��n formal de Olivier Schrauwen a la radicalidad gr��fica de Martin Panchaud, el a?o ha dejado grandes descubrimientos en forma de vi?etas

14 dic 2024 - 05:30CET

Siempre resulta dif��cil se?alar las mejores obras publicadas durante un a?o: cualquier lista es incompleta por su propia naturaleza, pero debe entenderse no como un canon, sino como una sugerencia de descubrimientos. Como la sorpresa que produjo Domingo flamenco, de Olivier Schrauwen (Fulgencio Pimentel), que refleja en vi?etas ese hilo de conciencia que Joyce plasma en su Ulises, reescrito ahora desde el tedio dominical que impregna cada acci��n desarrollada en un d��a en la vida de su protagonista. La innovaci��n formal permite descubrir un reguero de tramas para seguir y disfrutar en cada detalle de ese aburrimiento cotidiano, reconvertido en un fest��n de narrativa visual. Experimentaci��n en la forma de contar historias que resulta clave en El color de las cosas, de Mart��n Panchaud (Reservoir Books), que parte de la estructura can��nica del thriller y la road movie con tintes de denuncia social para dinamitarlos a trav��s de una radicalidad gr��fica que toma elementos de la diagram��tica, la infograf��a o los videojuegos de 8 bits para componer una propuesta rompedora para el lector.

Ilustraci��n del interior del libro 'El miedo' (Lumen), de Mar��a Hesse.MAR?A HESSE (LUMEN)

Sin embargo, no es necesario recorrer caminos inexplorados: la edici��n por fin en Espa?a de la obra de Yamada Murasaki, referente del manga del siglo XX, nos recuerda que la discreta narraci��n de Una mujer de espaldas (Salamandra Graphic) constituye una poderosa herramienta de renovadora fuerza tem��tica desde la introducci��n de la perspectiva feminista. Una mirada que comparte con Ma?ana ser�� otro d��a (Reservoir Books), donde la coreana Keum Suk Gendry-Kim aborda la construcci��n de la maternidad y la familia como ��nico destino posible de las mujeres en la sociedad, en un retrato que rompe fronteras para mostrar c��mo la presi��n social sobre la ausencia de hijos es universal. Ha sido el a?o de la esperad��sima segunda parte de Lo que m��s me gusta son los monstruos (Reservoir Books), con la que Emil Ferris concluye un inmenso relato gestado al son de una concepci��n pan��ptica de la historia, de la Europa del Holocausto al Chicago de los sesenta, entrelazado con la maduraci��n personal en una ferviente declaraci��n de amor por el arte como mecanismo de supervivencia. Un conjunto que marca un hito en la historia del c��mic, rompiendo todas las convenciones gr��ficas desde un barroquismo en el que perderse.

Desde un estilo diametralmente opuesto, tambi��n es posible extraviarse en el minimalismo gr��fico de Laura P��rez en Nocturnos (Astiberri), donde la noche se convierte en foco de confluencia de personajes que convergen en esa oscuridad acogedora, gracias al trazo de la autora con su creaci��n de una sugerente atm��sfera de caminos y lecturas que transitan entre lo real y lo imaginado. Una capacidad evocadora que Mar��a Hesse lleva al extremo en El miedo (Lumen), uniendo relato, ilustraci��n y c��mic para moldear la experiencia del maltrato psicol��gico y sus consecuencias mediante una fusi��n de referencias visuales y culturales que contornean con precisi��n esa sensaci��n inasible, pero presente, que supone vivir con miedo. Ese horror que es capaz de producir la tinta en la vi?eta constituye la herramienta fundamental de La Carretera (Norma), adaptaci��n al c��mic de Manu Larcenet cuya expresividad desbordante se nutre de un trazo org��nico y visceral, que potencia el mensaje de la obra de Cormac McCarthy para reproducir ese devastado mundo sin esperanza en unas vi?etas que se quedan clavadas en la retina.

Ilustraci��n de interior del libro 'Cosmo en el espacio' (Astiberri), de Javi de Castro.Javi de Castro (ASTIBERRI)

Ha sido a?o tambi��n de grandes obras de c��mic infantil y juvenil, como la chispeante Cosmo, de Javi de Castro (Astiberri), que transforma descubrimiento y exploraci��n formal en un reto tan divertido como apasionante para los m��s peque?os, o la reescritura transgresora del mito art��rico en clave feminista que plantean Geoffroy Monde y Mathieu Burniat en Furiosa (Norma Editorial), sin renunciar al humor y la modernidad en lo gr��fico.

Sin olvidar las interesantes recuperaciones y reediciones fundamentales para entender la historia del c��mic, desde la apuesta tradicional por los cl��sicos de prensa americanos, como Li��l Abner, de Al Capp (Di��bolo), a la vuelta de c��mics que a finales del siglo XX transformaron la concepci��n de la historieta desde planteamientos alternativos Palomar, de Beto Hern��ndez (La C��pula), Bola Ocho, de Daniel Clowes (Fulgencio Pimentel), o Moebius Obra Herm��tica (Reservoir Books). Sin olvidar la necesaria reivindicaci��n de obras ya cl��sicas de nuestro c��mic como Frank Cappa, de Manfred Sommer (Cartem) o Las aventuras del Capit��n Torrezno, de Santiago Valenzuela (Astiberri).