Las 10 mejores exposiciones de 2024
En el centenario del surrealismo, locos y marginados se van convirtiendo en personajes at¨ªpicos ante la llegada de los nuevos totalitarismos. En Espa?a, el mundo del arte avanz¨® en su revisi¨®n del legado colonial
Surrealismo y ardua realidad, o principio de realidad, como la denominaba Freud, son los dos polos que han hecho bascular el arte nacional e internacional a lo largo de estos doce meses. Del primero deja constancia la conmemoraci¨®n de los 100 a?os de la publicaci¨®n del manifiesto fundacional de Andr¨¦ Breton, cuya actividad principal ha sido la desigual y caprichosa exposici¨®n Surr¨¦alisme en el Centro Pompidou (hasta el 13 de enero), con la secuela oficiosa Otros surrealismos (2025) en la sede madrile?a de la Fundaci¨®n Mapfre, que abordar¨¢ la contribuci¨®n espa?ola y latinoamericana a esta corriente art¨ªstica y literaria que, de tan larga vida, parece que definitivamente fallecer¨¢ en la cruda realidad y en la religi¨®n, como le pas¨® al loco Don Quijote.
No por finiquitado pasaremos por alto una excepcional muestra que comparte insensatez y disparate con el surrealismo. Figuras de la locura, en el Museo del Louvre (hasta el 13 de enero), responde a la cuesti¨®n de qu¨¦ significan esos locos y bufones que tuvieron un papel sustancial en el tr¨¢nsito a los tiempos modernos. Asistiremos a la desaparici¨®n de la figura del outsider, al menos por un largo tiempo, con la transformaci¨®n radical de las democracias hacia los nuevos totalitarismos.
Volver a la ardua realidad, esa alegor¨ªa infinita que atraviesa la historia del arte y que, dicho de paso, lo convirti¨® en verdad. Es precisamente el legado de Robert Frank, cuya integridad estaba en la convicci¨®n de mostrar sin retoques la vida de las gentes del territorio americano, olvidados y marginados a los que retrat¨® con aguda inmediatez, captando sus miradas, casi siempre reconocidas o devueltas. Sus collages fotogr¨¢ficos y diarios cinematogr¨¢ficos no son tanto una arqueolog¨ªa cultural como una cr¨®nica de lo que hoy todav¨ªa permanece a la vista de todos, una revelaci¨®n del MoMA de Nueva York en Live dances on: Robert Frank in Dialogue, que se clausura el 11 de enero, d¨ªas antes de la toma de posesi¨®n de Donald Trump como nuevo presidente de los Estados Unidos.
La realidad ha sido, en contraste, un impedimento para el brasile?o Adriano Pedrosa, que comand¨® la 60? edici¨®n de la Bienal de Venecia con obras de artistas tradicionalmente apartados de estos eventos, en l¨ªnea con los debates decoloniales que han impregnado las citas y exposiciones de los dos ¨²ltimos a?os. Su mirada fue la de un comisario-gabinetista de curiosidades que destila un tipo de ¡°encantamiento¡± por el otro aislado de los marcos reales y sitios sociales (el dichoso ¡°contexto¡±). Meses antes, el ministro de Cultura Ernest Urtasun expres¨® la urgencia de revisar los contenidos de los museos estatales para ¡°superar el marco colonial¡±. Un dicho que fue un hecho en el aplaudido pabell¨®n espa?ol de Venecia, donde la peruana Sandra Gamarra defendi¨® su trabajada reinterpretaci¨®n del patrimonio pict¨®rico espa?ol: Pinacoteca migrante. Siempre un paso m¨¢s all¨¢, Manuel Borja-Villel ha iniciado este a?o su revisi¨®n de las colecciones de la Generalitat de Catalunya en su proyecto Museo habitado, donde sostiene que lo importante no es tanto la restituci¨®n de obras como la discrepancia del sentido de propiedad cultural, que nos lleva a replantearnos la instituci¨®n misma.
El Museo del Prado no se quiere quedar atr¨¢s en el cometido de deconstruir el museo euroc¨¦ntrico ¡ªaunque no el de Madrid, sino el de Par¨ªs¡ª y ha propuesto este oto?o una c¨¢tedra sobre la recuperaci¨®n del patrimonio saqueado y el desmantelamiento del Louvre en 1815, dirigida por la historiadora B¨¦n¨¦dicte Savoy, autora, junto al senegal¨¦s Felwine Sarr, del informe encargado por Emmanuel Macron sobre la restituci¨®n del patrimonio cultural africano. Estos mismos desaf¨ªos inspiraron una de las l¨ªneas de trabajo de los comisarios de la bienal Manifesta15, clausurada en noviembre con casi 300.000 visitantes, donde sobresali¨®, entre las obras repartidas por las 12 sedes de Barcelona y su ¨¢rea metropolitana, el archivo de Tania Adam, Espa?a negra, sobre la historia invisibilizada de las comunidades africanas en Catalu?a.
M¨¢s a¨²n, los debates sobre c¨®mo repensar el futuro desde los par¨¢metros de la diversidad cultural son atravesados por la guerra en Gaza y las acusaciones de antisemitismo en las manifestaciones art¨ªsticas de museos y universidades de todo el mundo. Dentro de pocos d¨ªas, se anunciar¨¢ el curador de la Documenta 16, prevista para 2027 en Kassel. Lo que hasta hace poco era el trabajo so?ado de cualquier comisario hoy es un encargo envenenado, no solo porque habr¨¢ de ejecutarlo en el tiempo escaso de dos a?os, sino tambi¨¦n por el condicionamiento que supondr¨¢ para esta prestigiosa cita quinquenal la nueva resoluci¨®n contra el antisemitismo del Bundestag, del pasado 7 de noviembre, que proclama que ¡°la seguridad de Israel es raz¨®n de Estado para Alemania¡±. Esto ocurre despu¨¦s de que, en enero, el senado de Berl¨ªn decidiera becar s¨®lo aquellos artistas que firmen una declaraci¨®n contra el antisemitismo. Se cre¨ªa que la guerra contra el nazismo traer¨ªa libertades para la humanidad, pero ahora no podremos representarlas.
Las mejores exposiciones de 2024 seg¨²n los cr¨ªticos de EL PA?S
Una selecci¨®n de Enrique Andre?s Ruiz, Estrella de Diego, Bea Espejo, Juan Gallego Benot, A?ngeles Garci?a, Juan Jose? Mateo, A?ngela Molina, Javier Montes y A?lex Vicente.
Esperpento. Arte popular y revoluci¨®n est¨¦tica. Museo Reina Sof¨ªa (Madrid)
Esta vasta historia visual de la noci¨®n teorizada por Valle-Incl¨¢n ha sido la gran exposici¨®n del oto?o madrile?o y, sin duda, una de las imprescindibles de 2024. Condensa una inabarcable selecci¨®n de pinturas, caricaturas y otros documentos que, en conjunto, funcionan como el reflejo grotesco de la realidad social de un pa¨ªs perjudicado por un retraso cultural de dos siglos.
Antoni T¨¤pies. La pr¨¢ctica del arte. Museo Reina Sof¨ªa (Madrid) y Fundaci¨® T¨¤pies (Barcelona)
Desde sus primeras obras surrealistas hasta sus piezas de madurez inspiradas en los horrores de la guerra, pasando por su sentimiento catalanista y su activismo antifranquista, la excelente monogr¨¢fica dedicada al pintor en el centenario de su nacimiento, comisariada por Manuel Borja-Villel, puso al d¨ªa la lectura cr¨ªtica del legado de un artista que quiso transformar la sociedad con su obra.
Arte y transformaciones sociales en Espa?a (1885-1910). Museo del Prado (Madrid)
El tema hab¨ªa estado ausente, hasta la fecha, de los museos hist¨®ricos: la relaci¨®n entre arte y estructura social en Espa?a. Comisariada por Javier Bar¨®n, la exposici¨®n abord¨® tensiones propias del paso a la modernidad, con temas como trabajo, educaci¨®n, religi¨®n y pobreza, a trav¨¦s de m¨¢s de 300 obras. E incorpor¨® un gesto que se?ala un cambio de paradigma: la inclusi¨®n de artistas de las antiguas colonias, como Cuba y Filipinas.
Suzanne Valadon. Una epopeya moderna. MNAC (Barcelona)
La trayectoria de Valadon, marcada por cierto olvido a lo largo del siglo XX, fue el objeto de esta monogr¨¢fica comisariada por Eduard Vall¨¨s y Phillip Dennis Cate. Reuni¨® las obras m¨¢s representativas de la artista, madre de Maurice Utrillo, algunas de las cuales nunca antes se hab¨ªan expuesto en Espa?a.
Sol Calero. Buscando guan¨¢bana ando yo. CA2M (M¨®stoles)
A trav¨¦s de instalaciones que remiten a la est¨¦tica tropical, la artista venezolana, que tambi¨¦n particip¨® en la Bienal de Venecia, indag¨® en las contradicciones de la condici¨®n del exiliado, a la vez que criticaba con mordacidad la representaci¨®n estereotipada (y siempre vecina de lo kitsch) de Latinoam¨¦rica en Europa.
Teresa Solar Abboud. P¨¢jaro sue?o de m¨¢quina. CA2M (M¨®stoles) y Macba (Barcelona)
La muestra, comisariada por Tania Pardo y Claudia Segura, abarc¨® desde sus primeras obras hasta las cris¨¢lidas gigantes que la artista llev¨® a Venecia en 2022 y, este a?o, a la secci¨®n Unlimited de Art Basel. Junto a nombres como June Crespo, Leonor Serrano Rivas o Eva F¨¤bregas, Solar es una de las mejores representantes de esa generaci¨®n nacida en los ochenta que en los ¨²ltimos meses ha accedido, por fin, a papeles protagonistas en los museos espa?oles.
Lo animal en Espa?a, 1920-1964. Fundaci¨®n Cerezales. (Cerezales del Condado, Le¨®n)
El ins¨®lito proyecto del comisario Llu¨ªs Alexandre Casanovas analiz¨® la construcci¨®n cultural de las relaciones entre humanos y animales en Espa?a, a lo largo del arco temporal que va de la emergencia del darwinismo a la desaparici¨®n de los animales de la vida diaria de los humanos.
Life Dances On: Robert Frank in Dialogue. MoMA (Nueva York)
Como fot¨®grafo, pas¨® a la historia por The Americans, m¨ªtica serie en blanco y negro recogida durante un periplo por el vasto territorio norteamericano. La muestra del MoMA recorre las seis d¨¦cadas que siguieron a su publicaci¨®n, a trav¨¦s de unas 200 obras que contienen el reflejo de una sociedad enferma que no difiere mucho de la actual.
Magdalena Su¨¢rez Frimkess. The Finest Disregard. LACMA (Los ?ngeles)
Primera exposici¨®n muse¨ªstica de la artista de 95 a?os, nacida en Venezuela y residente en California desde 1958, esta modesta retrospectiva pasa revista a una obra apasionante que, lejos de su vinculaci¨®n habitual al folk art, incluye continuas referencias a la historia del arte y ofrece una mirada c¨¢ustica a la cultura pop de su pa¨ªs de adopci¨®n.
Arte povera. Bourse du Commerce (Par¨ªs)
El corriente de vanguardia de los sesenta fue reivindicado nada menos que en la fundaci¨®n parisiense de Fran?ois Pinault. ?Arte pobre en el templo de un multimillonario? Esta parad¨®jica iniciativa parec¨ªa volcado al fracaso, pero la comisaria Carolyn Christov-Bakargiev se mantiene fiel a su esencia austera y nunca convierte las 250 obras expuestas en productos de lujo. Y genera, adem¨¢s, una estimulante reflexi¨®n sobre la relaci¨®n entre arte y poder.