?Que los gimnasios han abierto y no quieres volver? Estas son tus opciones para seguir desde casa
En esta tercera y ¨²ltima entrega de la trilog¨ªa sobre la nueva realidad de los centros deportivos te contamos c¨®mo montar tu sala de m¨¢quinas en casa
Los meses de confinamiento sirvieron para que muchos se dieran cuenta de lo bueno, bonito y gratuito que es hacer ejercicio con un tutorial de YouTube. Con la desescalada, los gimnasios por fin se pudieron poner manos a la obra para dejar sus instalaciones listas para recibir de nuevo a sus clientes. Eso s¨ª, con cambios: extremas medidas de higiene y tecnolog¨ªa punta para evitar cualquier rebrote (sensores para abrir las puertas sin tocar un picaporte o controles de temperatura son solo un par de ejemplos). Pero, ?qu¨¦ pasa con aquellas personas que no quieren volver?
En estos meses se han disparado las ventas de mancuernas, cintas el¨¢sticas, el¨ªpticas, m¨¢quinas de correr y TRX (una suerte de correas de las que colgarse para trabajar con el peso muerto de uno mismo). El entrenamiento en casa ha llegado para quedarse, y no como una condena. Expertos del triatl¨®n y los Iroman (una de las competiciones m¨¢s duras que hay), como Men¨¦ndez de Luarca, lo ven como un nivel m¨¢s. ¡°Al hacer buen tiempo en Espa?a casi todo el a?o, solo unos pocos ten¨ªan rodillo para entrenar con la bicicleta [sin moverse]. Muchos han descubierto que les ofrece la posibilidad de hacer sesiones m¨¢s largas o espec¨ªficas, cualquier d¨ªa de la semana, algo impensable si no vives cerca de la monta?a. Y puedes adaptarlo a tu horario. Yo tambi¨¦n me he tenido que familiarizar con las sesiones colectivas en streaming con Zoom¡±.
La empresa Peloton ya hab¨ªa desarrollado modelos futuristas que permiten asistir a clases colectivas bajo demanda desde casa. Los interioristas ya hablan del wellness real estate: dise?ar el interior de las casas para incorporar las m¨¢quinas de entrenamiento en cualquier espacio. Technogym confi¨® el dise?o de su l¨ªnea Personal al famoso arquitecto Antonio Citterio. Sus m¨¢quinas de cardio se pueden comprar o alquilar, incluyen pantalla para acceder a un servicio exclusivo de entrenamientos en directo o cuando quieras, en varios idiomas, y la empresa se encarga de llevarla a su segunda residencia o al yate de verano. S¨ª, son soluciones que implican poder hacer un alto desembolso y tener una vivienda amplia.
Quienes no est¨¢n en esta situaci¨®n, tendr¨¢ que conformarse con instalarlas donde buenamente quepan o pelear en la junta de vecinos por montar un gimnasio colectivo en las zonas comunes. Desde la patronal del fitness, englobada bajo el amparo de la Federaci¨®n de Empresarios de Instalaciones Deportivas, no ven rivalidad en los entrenamientos dom¨¦sticos. Saben que cada vez habr¨¢ m¨¢s teletrabajo. Para quien no tenga una casa enorme, salir a hacer deporte fuera, ya sea a la calle o a un gimnasio, ser¨¢ una v¨¢lvula de escape y un punto de encuentro social. ?No eran los gimnasios las discotecas del siglo XXI?
Lee este y otros reportajes en el ¨²ltimo n¨²mero de BUENAVIDA, descargable, gratis, en este enlace.
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