La ¡®¨²ltima¡¯ carta de Villalonga
El heredero del autor de ¡®Bearn¡¯ exige a Edicions 62 que retire el libro de la correspondencia del escritor con Porcel
Las cartas que se cruzaron Lloren? Villalonga y Baltasar Porcel tienen un ep¨ªlogo hasta ahora in¨¦dito. El abogado Jos¨¦ Zaforteza Calvet, de 84 a?os, titular por herencia desde 1986 de los derechos de autor de la obra literaria de Villalonga, requiri¨® notarialmente el pasado mes de febrero a Edicions 62 para que retirara del mercado los ejemplares del libro con las casi 500 misivas que mantuvieron ambos escritores: Les passions ocultes. Correspond¨¨ncia i vida. (Epistolari complet, 1957-1976). El motivo: que Zaforteza, propietario de los derechos de un tercio del texto madre de la obra (las 357 cartas de Villalonga), no fue consultado sobre este proyecto concreto, no lo autoriz¨® y tampoco recibi¨® compensaci¨®n econ¨®mica.
¡°No he dado el consentimiento¡±, dict¨® Zaforteza en un requerimiento notarial en el que recuerda tambi¨¦n que el editor recibi¨® ayudas p¨²blicas para esa obra y que pag¨® algunos derechos de autor pero omiti¨® ¡°otros tan leg¨ªtimos¡±.
En el libro se atribuye el copyright a los herederos de Porcel, a la ant¨®loga Rosa Cabr¨¦ y a la propia editorial. En la contraportada se asegura que Porcel ¡°obtuvo el permiso de la viuda de Villalonga para publicar ¨ªntegra esta correspondencia¡±. Zaforteza, magistrado retirado y patriarca de una estirpe de juristas en ejercicio, rememora que suscribi¨® en el pasado convenios de cesi¨®n de derechos con Edicions 62, pero que solo tuvo noticias por la prensa de la aparici¨®n de la gruesa obra de la relaci¨®n Villalonga-Porcel. En su opini¨®n, no fue un error involuntario, sino que en el acta notarial afirma: ¡°Estamos ante una omisi¨®n perfectamente tramada¡±.
Jos¨¦ Zaforteza asegura que los editores no le pidieron permiso
Zaforteza hace constar tambi¨¦n que en el volumen exist¨ªan ¡°desatenciones¡± hacia ¨¦l y el literato. En su caso, se siente v¨ªctima de los errores de la ant¨®loga al confundir su personalidad ¡°con la de un pariente colateral fallecido hace m¨¢s de 150 a?os¡±.
A pesar de todo ello, el libro (de 831 p¨¢ginas) sigue a la venta porque Edicions 62 actu¨® de inmediato anunciando una propuesta de liquidaci¨®n econ¨®mica de compensaci¨®n, si bien los editores defienden que nunca actuaron ilegalmente. ¡°Tanto en 1999 como en 2005 los herederos de Villalonga cedieron los derechos a cambio de nada¡±, dice Jordi Cornudella, editor de Edicions 62; situaci¨®n que en parte se dio, en su opini¨®n, porque ¡°se hab¨ªa considerado que fuera un libro institucional¡±. En cualquier caso, seg¨²n Cornudella, se ha llegado a un acuerdo entre ambas partes que se firmar¨¢ ¡°a finales de este mismo mes¡±. Para subrayar la conformidad, el editor avanza que Edicions 62 y el heredero han pactado la preparaci¨®n de una edici¨®n ¨®mnibus con las dos novelas m¨¢s importantes de Villalonga: Bearn y Mort de dama.
En el memor¨¢ndum, Zaforteza ya recoge que Porcel ¡°en reiteradas ocasiones" requiri¨® su "asentimiento¡± para imprimir las cartas a cargo de instituciones culturales de Baleares o Catalu?a, pero matiza: ¡°Con fines estrictamente docentes, a lo que siempre me avine¡±. Proyectos siempre nonatos. La ¨²ltima petici¨®n, precisa, fue en marzo de 2005, cuando la edici¨®n estaba en manos del Departamento de Cultura balear, pero ¡°parece que faltaban fondos¡±, seg¨²n otra carta, esta de la secretar¨ªa del escritor de Andratx al albacea y heredero.
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