El CAREC y el pacto fiscal

El pasado viernes el Consejo Asesor para la Reactivaci¨®n Econ¨®mica y el Crecimiento (CAREC) entreg¨® al presidente Mas un informe sobre el pacto fiscal, solicitado tras la publicaci¨®n del resultado de los trabajos del Parlament, aprobados en la comisi¨®n parlamentaria por mayor¨ªa simple, y que se est¨¢ tramitando para un pr¨®ximo debate en pleno. El documento del CAREC merece atenci¨®n por varias razones, una metodol¨®gica y otras de contenido.

1. En primer lugar, por su naturaleza. El CAREC est¨¢ formado por 15 miembros, mitad profesores universitarios y mitad personas procedentes de varios sectores, con experiencias acad¨¦micas, profesionales y pol¨ªticas diversas. La elaboraci¨®n del informe ha durado varios meses y el texto final es valioso porque, sin necesidad de ser ambiguo, ha sido aceptado por todos sus miembros. Ello se ha debido a la actitud constructiva de todos, a la habilidad de su presidente y al acuerdo de que todos lo suscribimos y, al mismo tiempo, todos conservamos plena libertad para hacer en p¨²blico acotaciones y comentarios personales sobre el tema.

2. En cuanto al contenido, el CAREC es contundente en su enfoque. Catalu?a necesita una mejora de su modelo fiscal. La crisis ha puesto en evidencia graves dificultades en cuanto a la financiaci¨®n de los servicios p¨²blicos y de las infraestructuras, y ha hecho patentes muchas ineficiencias en la utilizaci¨®n de los recursos en el conjunto de Espa?a. Ambos problemas van unidos, ya que, por la naturaleza de sus actividades, la catalana es una de las econom¨ªas espa?olas que m¨¢s podr¨ªan contribuir a la reactivaci¨®n. La actual debilidad catalana, causada por esta situaci¨®n, est¨¢ lastrando todo el esfuerzo de salida espa?ola de la crisis. Es necesario un nuevo modelo que mejore las relaciones fiscales entre Catalu?a y el resto de Espa?a. La gran mejora que se pact¨® en 2007 ha resultado insuficiente y, sobre todo, se ha incumplido. La posibilidad de un nuevo modelo, adem¨¢s de una reivindicaci¨®n nacional, representar¨ªa conseguir mayor eficiencia econ¨®mica en Catalu?a y en todo el Estado. El CAREC quiere contribuir a divulgar esta evidencia.

3. El informe analiza c¨®mo el modelo del concierto que contiene la propuesta de la comisi¨®n parlamentaria ayudar¨ªa a resolver muchos de los problemas actuales y hace una evaluaci¨®n muy positiva del mismo. Incluye adem¨¢s, en anexo, un an¨¢lisis de la experiencia internacional en la descentralizaci¨®n fiscal, sobre todo en pa¨ªses federales, que indica que el concierto no es el ¨²nico modelo para conseguir el objetivo, ya que hay una diversidad de sistemas seg¨²n circunstancias hist¨®ricas o pol¨ªticas de cada pa¨ªs.

4. Aunque tal vez queda fuere del ¨¢mbito de un consejo t¨¦cnico, el CAREC dice, en la introducci¨®n, que la fuerza moral para la negociaci¨®n del pacto depender¨¢ del grado de consenso que se obtenga primero en Catalu?a y pide en sus recomendaciones finales que se intente conseguirlo al m¨¢ximo, tanto en el ¨¢mbito parlamentario como en el social.

Una consideraci¨®n personal respecto a este ¨²ltimo punto. Creo que ser¨¢ muy dif¨ªcil obtener un amplio consenso popular si no se consigue antes una propuesta con gran mayor¨ªa parlamentaria. Con este objetivo recuerdo, como dijo hace unos d¨ªas el profesor L¨®pez Casasnovas, que la mayor¨ªa m¨¢s importante nunca conseguida en Catalu?a sobre este tema se obtuvo en la redacci¨®n de los art¨ªculos referidos al Finan?ament de la Generalitat en la propuesta que en septiembre de 2005 el Parlament aprob¨® con el voto de m¨¢s del 90% de sus miembros. Me parece que ser¨ªa inteligente que ahora la tramitaci¨®n de la propuesta final se hiciera a partir del texto de la comisi¨®n, pero contemplando tambi¨¦n el que permiti¨® este gran consenso, texto que contiene muchos elementos coincidentes y genera muchas menos dudas de tipo constitucional. Este camino deber¨ªa facilitar la negociaci¨®n parlamentaria y ayudar¨ªa a crear un fuerte respaldo popular, imprescindible para el ¨¦xito, ya que la mayor¨ªa absoluta del PP en el Congreso ha eliminado otras armas negociadoras.

Expreso, claro, mi pensamiento: Estoy a favor del pacto fiscal, pero que sea un pacto, o mejor dicho, dos: un pacto en Catalu?a y un pacto en Madrid. Sin pacto previo aqu¨ª, ser¨¢ muy dif¨ªcil (o imposible) un pacto all¨¢. No me sorprende que algunos ya hablen de planes B, aunque las perspectivas que estos planes ofrecen no sean nada tranquilizantes¡­ Y ya tenemos bastantes problemas urgentes como para buscar m¨¢s.