?D¨®nde est¨¢ el PSOE?
Excepto el PSOE que se debate entre el pret¨¦rito perfecto y el imperfecto, sin darse cuenta de la urgente llamada del presente
?Se puede mantener un espacio pol¨ªtico a la pata coja? ?Es l¨®gico simpatizar con las movilizaciones ciudadanas de protesta, pero ejercer de puros cronistas parlamentarios? ?Es coherente mantener dos discursos sobre la crisis: uno de infinita comprensi¨®n con los objetivos de d¨¦ficit y otro de cr¨ªtica por los recortes que lo acompa?an? ?Est¨¢ el PSOE en un limbo pol¨ªtico, a la espera de que la herencia recibida se diluya y que el pueblo pida su vuelta al poder por el simple desgaste del Gobierno del PP?
Los que creen que todos los tiempos tienen la misma sustancia, deber¨ªan leer m¨¢s literatura. El tiempo externo se divide en horas, d¨ªas y a?os de igual duraci¨®n pero el tiempo interno, el que realmente vivimos, es de un material moldeable. La consistencia de este ¨²ltimo a?o ha sido lenta y espesa, como andar por un cenagal de pesadilla. Han ca¨ªdo viejas certezas; se ha dinamitado la seguridad de nuestras vidas. Esta crisis ya no dispara con p¨®lvora ajena, sino con el dolor de nuestros amigos, hermanos e hijos. Como dijo Neruda: ¡°Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos¡±. Excepto el PSOE que se debate entre el pret¨¦rito perfecto y el imperfecto, sin darse cuenta de la urgente llamada del presente.
El bipartidismo que garantizaba la permanencia de dos grandes bloques conservador y progresista, est¨¢ a punto de estallar y es posible que la distancia entre el poder y la irrelevancia pol¨ªtica sea tan breve como un suspiro. Los resultados en el Pa¨ªs Vasco y en Galicia solo son la consecuencia previsible de esta situaci¨®n. Hubo un momento revelador del absurdo en el que naufraga la actual direcci¨®n del PSOE: el d¨ªa que estall¨® la crisis de Bankia y sus dirigentes ni siquiera supieron qu¨¦ actitud tomar al respecto.
Mientras que en Catalu?a el PSC se desangra por la herida independentista, por la impregnaci¨®n de las teor¨ªas de las balanzas fiscales y la ambig¨¹edad de sus posiciones; mientras que en el Pa¨ªs Vasco se preguntan por la derrota sin caer en la cuenta de que estuvieron gobernando con el PP hasta hace 15 minutos o en Madrid se acumulan los fracasos pol¨ªticos institucionales; Andaluc¨ªa es la ¨²nica comunidad que puede irrumpir en el debate territorial sin estar impregnada de centralismo o de independentismo, la s¨ªntesis de una propuesta federal, solidaria pero avanzada. Por eso resulta especialmente molesta su voz a los que se empe?an en mantener el eje Madrid-Catalu?a como ¨²nica referencia en el debate del modelo de Estado. Ni a?ejo espa?olismo unificador, ni disgregaci¨®n territorial ni asimetr¨ªas que no esconden m¨¢s que desigualdades de trato a favor de las rentas m¨¢s elevadas.
El hecho de que Andaluc¨ªa salga con fuerza en el debate territorial es una necesidad para que no quede postergada pero tambi¨¦n es la ¨²nica posibilidad de que los valores de solidaridad, pluralidad y federalismo tengan alg¨²n futuro. No se trata de convertir Andaluc¨ªa en un fort¨ªn anti-PP, ni de aupar al presidente de la comunidad al liderazgo del PSOE. Es que si el PSOE quiere seguir existiendo necesita un discurso pol¨ªtico empoderado, pedag¨®gico y comprometido con los de abajo. Ni siquiera es posible afirmar que en Andaluc¨ªa el Gobierno est¨¦ llevando a cabo una pr¨¢ctica que se pueda calificar con estos cuatro adjetivos, pero es la ¨²nica comunidad, el ¨²nico liderazgo que en el espacio pol¨ªtico del PSOE y en los tiempos presentes puede jugar este papel. En este sentido, cobra valor el discurso del presidente de la Junta que ¨¦l llama de una socialdemocracia fuerte, opuesto a que los poderes econ¨®micos determinen las pol¨ªticas p¨²blicas y ninguneen la democracia. Puede, adem¨¢s, desde el Gobierno de coalici¨®n con IU, no solo predicar valores, sino ejercerlos y demostrar ¡ªde forma mucho m¨¢s contundente que hasta ahora¡ª, que las crisis pueden ser gobernadas de otra manera. Catalu?a reclama decidir sobre su propio futuro pero Andaluc¨ªa reclama decidir sobre el futuro en com¨²n de todos los espa?oles. Por eso su voz es tan importante y molesta para los que buscan que nada cambie.
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