Personajes infinitos

El teatro: levantar desde un texto unidimensional (una hilera de letras desnudas que forman palabras y frases) una contundente realidad en tres dimensiones. Pero esta extra?a metamorfosis est¨¢ llena de posibilidades,de variaciones casi infinitas. ¡°?D¨ªselo m¨¢s alocada!¡±, ¡°?M¨¢s suave, no le sigas a ella!¡±, ¡°?Hazlo de otra manera!¡±, ¡°?De otra!¡±, ¡°?De otra!¡±¡­ Al ritmo de las palmadas e indicaciones del maestro Juan Carlos Corazza, algo as¨ª como un demiurgo en escena, la realidad teatral que estamos observando va cambiando sobre la marcha y sin que se pare la funci¨®n.

Porque esto no es una clase de interpretaci¨®n, ni una representaci¨®n al uso, sino una especie de h¨ªbrido entre ambas. Un taller-montaje: aqu¨ª se representa una obra entera y con p¨²blico, en este caso Los criminales de Ferdinand Bruckner, con la particularidad de que el maestro Corazza va pulsando los mimbres en tiempo real, interaccionado con sus alumnos m¨¢s avanzados (hay 25 en escena y algunas veces varios representan un mismo papel, creando un efecto caleidosc¨®pico) para llevar la obra a buen puerto.

¡°El p¨²blico se siente, m¨¢s que entretenido, curioso e interesado¡±, dice Corazza. ¡°Hay gente que no se ha imaginado en su vida que detr¨¢s de la creaci¨®n de un personaje hay un ensayo, un probar de una manera y otra, hasta encontrar la mejor opci¨®n o de qu¨¦ forma haces mejor el gol¡±.

Este tipo de proyectos son una iniciativa de Teatro de la Reuni¨®n, la compa?¨ªa del c¨¦lebre Estudio Corazza para el actor. Las otras patas de la compa?¨ªa son las obras profesionales (acaban de llevar a Chile y a Rusia el montaje Comedia y sue?o en coproducci¨®n con la Fundaci¨®n Garc¨ªa Lorca) y otros espect¨¢culos consistentes en escenas de obras representadas por alumnos con menos experiencia y tambi¨¦n asistidos por profesores. Los criminales entra hoy en su recta final: puede verse esta noche y los d¨ªas 20 y 21 en el Centro Cultural Conde Duque, que mantiene estrecha colaboraci¨®n con estas actividades y las hace posibles, en palabras de Corazza.

Durante el resto del mes se celebrar¨¢n otros pr¨¢cticas esc¨¦nicas abiertas al p¨²blico, como Amor y locura (escenas del Platonov, de Ch¨¨jov, el 23), Querer y necesitar (escenas de John Osborne, David Hare y Beth Henley, del 25 al 27) o Coraje y expresi¨®n (con escenas de Tennessee Williams, Elmer Rice y William Inge, del 23 al 26).

Despu¨¦s de cada funci¨®n-taller de Los criminales hay un breve coloquio con el p¨²blico para poner en com¨²n opiniones. En una de las representaciones de la semana pasada, Javier Bardem, entre el p¨²blico, uno de los m¨¢s c¨¦lebres ex alumnos de Corazza, alab¨® la ¡°valent¨ªa¡±" del proyecto. No en vano, durante un breve espacio de tiempo estos aprendices de actores tienen que montar su peque?a compa?¨ªa y ocuparse no solo de actuar, sino de la iluminaci¨®n, la m¨²sica y el vestuario.

¡°Es una compa?¨ªa que se hace muy r¨¢pido y en la que cada uno aporta sus mejores talentos, ya sea para la producci¨®n, la m¨²sica o el vestuario¡±, explica el director, ¡°adem¨¢s, entrenarse en el terreno de juego les fortalecen para el futuro¡±. Por seguir con los s¨ªmiles futbol¨ªsticos, uno de los actores declara: ¡°Juan Carlos es como nuestro Vicente del Bosque que, en mitad del partido, nos dice c¨®mo tenemos que movernos hacia la banda¡±.

Con la elecci¨®n del texto de Br¨¹ckner, el teatro vuelve a recordarnos que vivimos en un mundo gatopardista en el que todo cambia constantemente para que todo siga igual (de mal). ¡°Los criminales tiene mucha actualidad¡±, dice Corazza, ¡°Bruckner es un autor poco hecho en el mundo y en Espa?a, y aqu¨ª trata como el aborto, la homosexualidad, la justicia o la corrupci¨®n¡±. Ambientada en 1926, durante la gran crisis alemana de entreguerras, el pa¨ªs se encuentra sumido en un grave combate social, la pobreza y el vicio. ¡°Se ve c¨®mo hay j¨®venes desesperados por un futuro incierto luchando por salir adelante¡±, dice Corazza. Un trasunto, podr¨ªa ser, de los j¨®venes de nuestra generaci¨®n y de los j¨®venes actores que hay sobre el escenario.

?Qu¨¦ futuro tiene esta profesi¨®n, ya de por si inestable? ¡°Es cierto que la vida del actor nunca es estable, por la propia naturaleza de la profesi¨®n, y en estos tiempos lo estamos pasando muy mal¡±, dice el maestro, ¡°el actor debe tener un fuerte compromiso con su profesi¨®n para afrontar las distintas tempestades que enfrentar¨¢ durante su carrera¡±.

Juan Carlos Corazza es bonaerense y, precisamente, la escena teatral de esa ciudad es famosa por la efervescencia de su escena off, a la que se puede buscar un paralelismo en la ebullici¨®n de salas alternativas que sucede actualmente en Madrid, una eclosi¨®n creativa que no evita la precaria situaci¨®n laboral de los artistas. ¡°En las ¨¦pocas de crisis y dificultades es interesante la gran cantidad de espect¨¢culos que surgen, pero hay un peligro de que no se profundice. La cantidad no tiene que ver necesariamente con la calidad: esta ¨¦poca tiende a lo light, y valora mucho el gran impacto cultural. Y a veces no es una cultura verdadera aut¨¦ntica¡±.