Puigdemont y ERC desaf¨ªan a Rajoy

El tono se ha rebajado y la v¨ªa unilateral se deja de momento a un lado, pero el desaf¨ªo sigue ah¨ª. Junts per Catalunya y ERC, enzarzadas en la lucha por la hegemon¨ªa del independentismo hasta la misma noche del jueves, hicieron ayer an¨¢lisis y peticiones id¨¦nticos a m¨¢s de 1.000 kil¨®metros de distancia. La lectura del 21-D de Puigdemont, desde Bruselas, es rotunda: las elecciones ¡°convocadas por el Estado espa?ol¡± son una especie de segunda vuelta que refuerza los resultados del refer¨¦ndum ilegal del 1 de octubre.

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¡°Los votos independentistas suben elecci¨®n tras elecci¨®n. Los partidarios de un refer¨¦ndum suman m¨¢s del 55% de los sufragios¡±, dijo el expresident, incluyendo en esa cuenta a Catalunya En Com¨²-Podem, que defiende un refer¨¦ndum pero legal y pactado. El siguiente paso es sentarse a negociar¡±, afirm¨®. Rovira, desde la sede de los republicanos en Barcelona, insisti¨® en que Rajoy no puede obviar ¡°el mandato democr¨¢tico¡±. ¡°Lo m¨¢s importante para ERC no es el resultado de ERC, es que tenemos un mandato para construir rep¨²blica¡±, remarc¨®.

Ambos partidos obviaron el hecho de que Ciudadanos gan¨® en votos y esca?os el 21-D, y se centraron en que el independentismo suma una mayor¨ªa suficiente como para formar Gobierno.

El camino a seguir a partir de ahora tambi¨¦n es compartido por ambas candidaturas. Puigdemont ret¨® a Rajoy a una reuni¨®n ¡°sin condiciones¡± para ¡°empezar a encontrar soluciones pol¨ªticas a un problema eminentemente pol¨ªtico¡±. Ese encuentro, seg¨²n el expresidente, solo exigir¨ªa como primer paso ¡°reconocer al interlocutor¡±. El Gobierno cree que aceptar eso, sin exigir previamente a Puigdemont el respeto a la ley, otorgar¨ªa un estatus de legitimidad al separatismo al que La Moncloa prefiere resistirse. Este escollo frustr¨® los intentos de acercamiento con mediadores internacionales antes de la declaraci¨®n de independencia en el Parlament del pasado 27 de octubre.

El lugar de esa reuni¨®n no es un problema: ¡°Bruselas o cualquier rinc¨®n de la UE¡±, incluso La Moncloa ¡°si se dan las garant¨ªas¡±, dijo Puigdemont, en referencia, aparentemente, a garant¨ªas de no ser detenido. Rovira, por su parte, rectific¨® lo que hab¨ªa defendido en campa?a y ahora apoya la restituci¨®n del Govern destituido. Los republicanos se han mostrado dispuestos a trabajar para ¡°poner fin al exilio forzoso y a la prisi¨®n injusta de los presos pol¨ªticos¡±, obviando que eso s¨®lo est¨¢ en manos de los jueces.

Puigdemont sostiene que propone ¡°di¨¢logo¡± para rebajar la temperatura, a la vista de que Rajoy ¡°lo ha intentado todo, incluida la represi¨®n policial y una delirante represi¨®n penal, excepto el di¨¢logo bilateral¡±. Pero el objetivo declarado es la independencia, si bien los soberanistas no optan abiertamente en esta ocasi¨®n por la v¨ªa unilateral. La receta del 155, seg¨²n el autoproclamado ¡°presidente leg¨ªtimo¡± de la Generalitat, ¡°no ha funcionado¡±; ¡°el 155 ha perdido con claridad el plebiscito¡±, dijo Puigdemont en un tono menos incendiario que en campa?a. ¡°Ahora toca restituir a un Gobierno leg¨ªtimo, retirar la polic¨ªa que Rajoy ha enviado a Catalu?a y ponerse a dialogar sin condiciones¡±.

¡°Los partidos independentistas no han dejado de sumar votos en cada convocatoria electoral, ahora con m¨¢s de un 80% de participaci¨®n: es la hora de la pol¨ªtica, no puede ser que la gente se exprese y que los pol¨ªticos no encontremos la manera de hablar¡±, remach¨® en una comparecencia organizada junto a la sede de las instituciones europeas.

Porque hay mensaje para Madrid, pero tambi¨¦n para Bruselas. La Comisi¨®n Europea dej¨® claro ayer que su posici¨®n ¡°no va a cambiar¡± con respecto a Catalu?a: Bruselas ofrec¨ªa y ofrece un respaldo sin fisuras a Rajoy. Tras solicitar la reuni¨®n con este, Puigdemont reclam¨® asimismo a la Comisi¨®n ¡°que escuche a Catalu?a¡±. ¡°No le pido a Bruselas que cambie sus posiciones: solo le pido que nos escuche¡±, dijo, a la vista de que ninguna instituci¨®n europea recibe a los l¨ªderes catalanes.

La v¨ªa unilateral

?Puigdemont sobrevol¨® algunos de los asuntos m¨¢s espinosos. No aclar¨® si volver¨¢ a Barcelona en caso de ser investido presidente. Y tampoco si m¨¢s adelante regresar¨¢ a la v¨ªa de la ruptura unilateral, aunque de sus palabras se deduce que el camino, a d¨ªa de hoy, parece otro: ¡°El pr¨®ximo paso es el di¨¢logo¡±, dijo en catal¨¢n, castellano, franc¨¦s e ingl¨¦s. El expresidente dej¨® incluso alg¨²n mensaje ambiguo en clave interna: cree que no necesita a la CUP.

¡°Podemos gobernar ERC y Junts per Catalunya: el bloque alternativo no puede competir. Nuestra idea es intentar llegar a acuerdos no solo con la CUP, con todos los partidos que compartan que se ha acabado la receta unilateral del Estado espa?ol¡±, dijo en referencia a Catalunya en Com¨².

Puigdemont va a tener que usar mucho el tel¨¦fono. Quiere contactar con Rajoy, con Jean-Claude Juncker, jefe de la Comisi¨®n, y con los comunes. Est¨¢ por ver qui¨¦n va a contestar a esas llamadas, pero de momento su postura desde Bruselas coincide con la de ERC en Barcelona: Rovira emplaz¨® a Rajoy a reconocer los resultados y a sentarse a dialogar y apenas cit¨® condiciones m¨¢s all¨¢ de la reapertura de las embajadas catalanas en el exterior. El 21-D ha sido un b¨¢lsamo para ambos partidos ¡ªpero a¨²n m¨¢s para Junts per Catalunya¡ª y tanto Puigdemont como Rovira han rebajado las posturas maximalistas. A la vez, el desaf¨ªo de fondo sigue ah¨ª: vienen curvas, si es que alguna vez se fueron.

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