La disecci¨®n de emociones de Isabel Mu?oz, en Tabacalera
La premiada fot¨®grafa exhibe ¡®La antropolog¨ªa de los sentimientos¡¯
La sala Principal de Tabacalera recibe al visitante con cuatro pantallas gigantes en las que se muestran a bailarines japoneses representando el buto, una danza creada tras la Segunda Guerra Mundial para limpiar el dolor de la derrota. Poco o nada se escucha salvo sus gemidos envolventes y universales que aportan una pista de lo que se ver¨¢ a continuaci¨®n. As¨ª comienza La antropolog¨ªa de los sentimientos, la nueva exposici¨®n de la fot¨®grafa Isabel Mu?oz, Premio Nacional de Fotograf¨ªa en 2016.
Esta primera pieza (Kudo san) es, de hecho, la ¨²ltima. ¡°He trabajado sobre este tema durante los ¨²ltimos 25 a?os, pero esta pieza la acabamos anoche¡±, explicaba Mu?oz ayer durante la presentaci¨®n. La muestra, compuesta por una selecci¨®n de 97 fotograf¨ªas y seis instalaciones, construye un recorrido tem¨¢tico en torno a la representaci¨®n obsesiva y heterog¨¦nea del cuerpo humano, desde los mismos or¨ªgenes de la humanidad, la espiritualidad, la locura, los l¨ªmites y extremos del cuerpo, la dimensi¨®n social de lo corporal, y la sexualidad y el deseo. En ella se recogen las series fotogr¨¢ficas m¨¢s representativas de su producci¨®n actual, aunque tambi¨¦n se incluye material in¨¦dito e im¨¢genes de los inicios de su carrera. ¡°Al principio quisimos crear una retrospectiva, pero luego nos dimos cuenta de que deb¨ªamos continuar con esa b¨²squeda de sentimientos y emociones que tanto caracteriza su trabajo¡±, explica Audrey Hoareau, comisaria junto a Fran?ois Cheval de la exposici¨®n.
Con este trabajo, Mu?oz invita a desprenderse de prejuicios y a profundizar en aquello que muestran las im¨¢genes. ¡°Perforarse la cara con objetos punzantes o simular a Jes¨²s crucificado¡ donde nosotros (occidentales) solo vemos dolor, quiz¨¢s no lo haya¡±, apunta. Varias de las series de la muestra est¨¢n dedicadas al cuerpo porque, como explica Hoareau, ¡°es el elemento que representa nuestro centro y es, a la vez, algo muy complejo al que le damos diferentes tratamientos¡±.
Hoareau y Cheval se embarcaron en este proyecto junto a Mu?oz hace tres a?os cuando la fot¨®grafa les invit¨® a visitar su estudio en el madrile?o barrio de Pac¨ªfico. ¡°Nos lo mostr¨® todo: sus cajones, todas sus im¨¢genes y las historias que contienen¡±, cuenta Hoareau. Comenzaron entonces a organizar el trabajo por tem¨¢ticas y cap¨ªtulos para ver qu¨¦ nuevas aportaciones necesitaban. Mu?oz habla con ternura de este ¨²ltimo trabajo que define como ¡°el m¨¢s colaborativo¡± de su carrera: ¡°He aprendido muchas cosas y me ha permitido reencontrarme con archivos que ya se perd¨ªan en los cajones de mi estudio. Volv¨ª a vivir cada historia al recuperar estas im¨¢genes¡±.
¡°Los art¨ªfices de la exposici¨®n son ellos, todo est¨¢ pensado al detalle. Han sido capaces de crear peque?os universos dentro de cada serie¡±, cuenta la fot¨®grafa barcelonesa. Los comisarios han conseguido reflejar la internacionalidad del trabajo de Mu?oz, que ha recorrido infinidad de pa¨ªses, dise?ando al mil¨ªmetro la muestra. ¡°Se nos ofreci¨® este espacio (Tabacalera) cuando Isabel Mu?oz gan¨® el Premio Nacional de Fotograf¨ªa en 2016. Desde entonces hemos trabajado sabiendo cu¨¢l ser¨ªa el lugar de exposici¨®n, eso nos facilit¨® mucho la labor¡±, explica Cheval.
La antropolog¨ªa de los sentimientos. Centro cultural Tabacalera (Embajadores, 53). Entrada gratuita. Hasta el 17 de junio.
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