La econom¨ªa vista por el cine

En una butaca de cine es posible aprender tanto de econom¨ªa como en una clase magistral. T¨ªtulos como Margin Call o El lobo de Wall Street narran mejor que un manual la ca¨ªda en 2008 de un poderoso banco de inversi¨®n y la posterior crisis o el modo de montar un chiringuito financiero de la nada, estafando a los dem¨¢s por pura y simple codicia. Joaqu¨ªn Estefan¨ªa, ex director de EL PA?S, el economista Emilio Ontiveros y la directora del Huffington Post, Monserrat Dom¨ªnguez, hablaron ayer en Valencia, a iniciativa de la Fundaci¨®n Ca?ada Blanch, de la brillante combinaci¨®n de ciencia y s¨¦ptimo arte.

¡°El cine, como herramienta, ayuda a entender la realidad y ha sabido explicar el origen y las cicatrices que a¨²n tenemos en nuestras vidas a causa de la crisis econ¨®mica. Por eso nos pareci¨® un buen planteamiento cuando Fundaci¨®n Ca?ada Blanch nos invit¨® a charlar sobre econom¨ªa a partir del 2008 con la ca¨ªda de Lehman Brothers¡±, explic¨® Dom¨ªnguez. "La de 2008 es la crisis econ¨®mica mejor documentada por el cine", opin¨® Ontiveros.

El catedr¨¢tico de Econom¨ªa y presidente del grupo Analistas Financieros Internacionales repas¨® algunos de los t¨ªtulos que mejor han narrado la crisis econ¨®mica. "Ha habido buenos cineastas que han hecho cr¨®nicas magistrales", prosigue este economista acostumbrado a a utilizar en sus clases seis o siete filmes para ilustrar las partes que m¨¢s le interesan de la econom¨ªa: Steve Jobs, La gran apuesta o Margin Call, entre otras.

"Creo que las pel¨ªculas que mejor hablan de econom¨ªa son las que no tienen nada que ver con ella", apostill¨® Estefan¨ªa. Si se trata de relacionar actualidad y cine, de elegir qu¨¦ pel¨ªculas ilustran lo que est¨¢ sucediendo, el escritor y periodista, autor de Abuelo, ?c¨®mo hab¨¦is consentido esto? o su m¨¢s reciente Revoluciones. Cincuenta a?os de rebeld¨ªa (1968-2018), se decanta por La escopeta nacional, del director Luis Garc¨ªa Berlanga, por el esperp¨¦ntico retrato de la clase empresarial y pol¨ªtica espa?ola. En realidad, se queda con la trilog¨ªa, que completan los t¨ªtulos Patrimonio nacional y Nacional III.

Y otra recomendaci¨®n de Estefan¨ªa, muy relacionada con los casos de corrupci¨®n que salpican a comunidades como Madrid o Valencia. "Dado que estamos en Valencia y venimos de Madrid, yo propondr¨ªa el filme Chinatown (1974), de Roman Polanski", porque habla de una trama corrupta en torno a una empresa de servicios municipales en la ciudad de Nueva York.

"Estar¨ªa bien elaborar la historia econ¨®mica de Espa?a a trav¨¦s del cine. Y si pudiera elegir, empezar¨ªa con Pl¨¢cido (1961), tambi¨¦n de Garc¨ªa Berlanga", propuso Ontiveros. Una comedia en torno a la campa?a franquista que hubo para despertar un sentimiento de caridad hacia los pobres en Espa?a.

"Las rentas no remuneran el esfuerzo de la gente y esto acaba siendo una especie de germen suicida", dice Ontiveros

Antes de presentarse ante el p¨²blico de La Nau, donde tuvo lugar la mesa redonda Una mirada a la econom¨ªa a trav¨¦s del cine, ambos se pronunciaron sobre los efectos de la globalizaci¨®n, la brecha salarial o la deriva autoritaria en Europa y otros pa¨ªses. Ontiveros se detuvo en el caso espa?ol cuando acaba de conocerse la EPA del primer trimestre de 2018, donde crece el desempleo. "Me resisto a culpar al medio ambiente de los males dom¨¦sticos, de los males espa?oles", apunt¨®.

El catedr¨¢tico de Econom¨ªa analiz¨® el origen de la alta tasa de desempleo estructural espa?ola. "Son personas que estaban empleados en la construcci¨®n residencial o la promoci¨®n inmobiliaria y no ha dispuestos de mecanismos p¨²blicos rapidos y suficientes para reorientar su cualificaci¨®n. Su media de edad es de 50 a?os".

Otros pa¨ªses lo han hecho bien, consider¨® Ontiveros en referencia a Dinamarca o Suecia, cuyos gobiernos las vieron venir e invirtieron en cualificar a su poblaci¨®n. "A los mercados no se les puede dejar solos y la mejor forma de responder a ese dominio es con los presupuestos p¨²blicos. Por eso no tiene sentido que en Espa?a nos obsesionemos mucho con el adelgazamiento [de las cuentas] cuando resulta que el gasto p¨²blico sobre el PIB es de los m¨¢s bajos de Europa". Seg¨²n el economista, "es un problema de elecci¨®n y aqu¨ª [en Espa?a] no hemos acabado de entender que asignar m¨¢s recursos p¨²blicos al conocimiento se traduce en m¨¢s beneficios para el contribuyente".

Los salarios no est¨¢n creciendo en t¨¦rminos reales ni al ritmo de antes de la crisis, lo que est¨¢ creando un problema econ¨®mico y social. "En una econom¨ªa donde los salarios no crecen se puede estar incubando un malestar que acaba siendo adverso para la actividad empresarial", a?adi¨® Ontiveros. Una econom¨ªa donde las rentas no remuneran el esfuerzo de la gente acaba siendo una especie de germen suicida. Los salarios tienen que crecer para evitar males mayores, aconsej¨®.

El empleo crece pero su calidad, seg¨²n la OCDE, es malo. "Es parad¨®gico que los que m¨¢s sufrieron la crisis no no fueron los que la generaron y la poscrisis no los est¨¢ compensando. Eso, sociol¨®gicamente, es una bomba de relojer¨ªa que nos puede pasar factura", advirti¨® Ontiveros.

Para Estefan¨ªa, la globalizaci¨®n est¨¢ bien, pero "esta globalizaci¨®n" no est¨¢ bien. No se camina al mismo ritmo en libertad de movimiento de capitales, de personas, de servicios, de datos... En algunos aspectos se avanza mucho y en otros no tanto, y eso da lugar a que existan muchos perdedores en esta globalizaci¨®n, que son los que est¨¢n generando desafecci¨®n. "Creo que hay poca gente que quiera volver a un mundo de autarqu¨ªa pero s¨ª quieren una globalizaci¨®n que ponga sem¨¢foros", apostill¨® el escritor.

"Poca gente quiere volver a un mundo de autarqu¨ªa pero s¨ª desea una globalizaci¨®n que ponga sem¨¢foros"

?Como gobernamos esta globalizaci¨®n?, plante¨® Estefan¨ªa: ¡°Llevamos mucho tiempo sin reflexionar sobre ello, la globalizaci¨®n contin¨²a su marcha y est¨¢ creando una desafecci¨®n gigantesca porque muchos mercados no son eficientes, la pol¨ªtica deber¨ªa corregir esas desviaciones y no lo est¨¢ haciendo, lo que explica la crisis de representatividad que vivimos".

La deriva autoritaria que se vive en algunos pa¨ªses, sobre todo en la Europa del este, preocupa y mucho. "Hay trozos de Europa donde se produce una involuci¨®n que podr¨ªamos llamar fascista. Y lo m¨¢s preocupante no es que los partidos populistas, de extrema derecha, ganen las elecciones sino que contagian con sus propuestas al resto de partidos que est¨¢n en el centro del sistema", asever¨® el periodista. La gran depresi¨®n de la ¨²ltima d¨¦cada ha generado "desconfianza en la gente" y convertido la democracia en un sistema instrumental que, seg¨²n Estefan¨ªa, es lo m¨¢s peligroso.

Ontiveros defiende la globalizaci¨®n.? "Nos afecta a todos y, sin embargo, la capacidad defensiva que hay en algunos pa¨ªses es superior a la de otros", reconoci¨®. "La globalizaci¨®n ha generado bienestar, crecimiento y ha contribuido a reducir la pobreza en el mundo", a?adi¨® el economista, pero "la redistribuci¨®n de esa riqueza ha sido regresiva y est¨¢ generando esos sentimientos que est¨¢n detr¨¢s de la desafecci¨®n de las instituciones".

El sentimiento anglobalizaci¨®n que existe en el norte de Europa es significativamente menor al que existe en los pa¨ªses del sur porque en los primeros el sector p¨²blico tom¨® medidas para redistribuir mejor las rentas.? "Estar en contra de la globalizaci¨®n ser¨ªa un error, lo que tenemos es que gestionar ese fen¨®meno mucho mejor. Es posible la cohesi¨®n social y la internacionalizaci¨®n de las econom¨ªas; no es cierto que la globalizaci¨®n sea enemiga de la cohesi¨®n social, cuando los gobiernos adoptan medidas y gastan presupuesto se resisten mejor los avatares competitivos globales", advirti¨® el economista.