Hospitales con ropa sucia y rota
La lavander¨ªa de los centros p¨²blicos, un negocio privatizado de 70 millones de euros, deja un 33% de la ropa inutilizable, seg¨²n una auditor¨ªa
¡°Vas a poner la ropa de cama para un paciente y te das cuenta de que est¨¢ negra de manchas de humedad. Llena de mierda¡±. ¡°Llega mal planchada, y rota¡±. ¡°Hay un riesgo de contagio de enfermedades infectocontagiosas¡±. Tres frases de otros tantos representantes sindicales reflejan las quejas que provoca desde 2013 la privatizaci¨®n de los servicios de lavander¨ªa de los 19 hospitales madrile?os: el 33% de la ropa que vuelve a los centros sanitarios no es utilizable, seg¨²n una auditor¨ªa a la que ha tenido acceso EL PA?S. Esos fr¨ªos datos se traducen en ocasiones en olores, colores y sabores. Todos desagradables. Muchos en contacto con la piel de los pacientes. Y la mayor¨ªa presentes en el d¨ªa a d¨ªa de los hospitales p¨²blicos, que seguir¨¢n lavando as¨ª su ropa al menos hasta finales de 2019: en 2017, la Comunidad renov¨® dos a?os el acuerdo con la concesionaria ¡ªpara un total de casi 70 millones en los seis a?os¡ª.
¡°La calidad del servicio es regular¡±, resume la auditor¨ªa. ¡°Observamos que todav¨ªa siguen persistiendo los mismos errores de las anteriores auditor¨ªas, por lo que se considera que la problem¨¢tica seguir¨¢ presente hasta que se tomen las medidas adecuadas¡±. Y advierte: ¡°El porcentaje de ropa no utilizable se encuentra por encima del m¨ªnimo establecido, y en algunos casos se encuentra en est¨¢ndares muy elevados. Esta situaci¨®n trastorna el buen funcionamiento de las ¨¢reas de lencer¨ªa de los hospitales y en algunos casos no han tenido otra opci¨®n que incorporar ropa no utilizable a su circuito de entrega de ropa limpia utilizada para dar servicio a sus pacientes¡±.
Cuando la ropa llega de la lavander¨ªa externa, se recibe en el servicio de lencer¨ªa de los hospitales p¨²blicos. En La Paz este servicio se encuentra bajo tierra. All¨ª los trabajadores, ataviados con ropa blanca, recogen las grandes bolsas que entregan los camiones de reparto y, tras abrirlas, se encargan de seleccionar cada prenda ¡ªque lleva un chip identificativo¡ª y comprobar si se encuentra en buen estado. Las que llegan mal, se devuelven a los camiones que las recogen cuatro veces al d¨ªa; las que est¨¢n bien pasan a una percha individual que se introduce en un sistema de carrusel con cuatro cintas de dispensaci¨®n. Este carrusel parece un hilo infinito de ropa que se mueve enloquecida, como en una pel¨ªcula futurista. Al final de cada cinta hay una m¨¢quina expendedora de donde deben recoger su ropa los sanitarios. La ropa de cama y de los enfermos se reparte con carritos por el hospital.
El sistema requiere de una precisi¨®n y una coordinaci¨®n similares a los de una orquesta. Ocurre, sin embargo, que en este caso hay m¨²sicos que desafinan.
¡°Vas a poner la ropa de cama para un paciente y te das cuenta de que est¨¢ negra de manchas de humedad. Si la ropa no se seca, luego est¨¢ llena de mierda y de manchas¡±, explica Araceli Rojo, enfermera en el 12 de Octubre y delegada sindical de UGT. ¡°No hay ropa para cambiar las camas, no hay uniformes para que se cambie el personal, no hay ropa de cama, no hay almohadas¡±, detalla. Y lamenta: ¡°Antes hab¨ªa lavander¨ªa en el hospital y funcionaba muy bien, la ropa llegaba bien y seca. Ahora viene desastrosa¡±.
¡°Hay un riesgo de contagio de enfermedades¡±, advierte Rosa Muela, de CCOO. ¡°Esto afecta tanto a pijamas de pacientes como a la ropa de los trabajadores y la ropa de las camas de los enfermos¡±, a?ade Juli¨¢n Ord¨®?ez, secretario de Sanidad de UGT. El sindicato de enfermer¨ªa Satse ve problemas similares.
Aguirre y Cifuentes
La privatizaci¨®n, asegur¨® entonces el Gobierno de Esperanza Aguirre, ahorrar¨ªa m¨¢s de 36 millones. A cambio, las concesionarias firmaron hasta 2017 por 47,5 millones. Hace dos a?os, el Gobierno de Cristina Cifuentes decidi¨® renovar el acuerdo hasta finales de 2019 por m¨¢s de 22 millones. Fue una decisi¨®n llamativa: la propia Comunidad sancion¨® con cientos de miles de euros a la concesionaria durante los primeros a?os de contrato, y los auditores se?alan que los mismos problemas se repiten una y otra vez. De hecho, el Ejecutivo quiere incluir nuevas cl¨¢usulas de sanci¨®n en el pr¨®ximo acuerdo.
¡°Algunos par¨¢metros de calidad no son los id¨®neos¡±, reconoce un portavoz de la consejer¨ªa de Sanidad. ¡°[En el pr¨®ximo contrato] se cambiar¨¢ de la modalidad de pago por kilos a pago por prenda, lo que permitir¨¢ ajustarse mejor a las necesidades concretas y puntuales de cada centro¡±.
¡°Cumplimos con los est¨¢ndares que nos marca el contrato con la Comunidad y cada vez que llega un informe de auditor¨ªa estamos en permanente contacto para ver d¨®nde est¨¢n los problemas y solucionarlos¡±, explica un portavoz de la empresa concesionaria.
Mientras los gestores mejoran el sistema, penan profesionales y pacientes: arrugas, suciedad, manchas y roturas son los principales problemas.
Un problema que afecta a 19 hospitales
La Comunidad de Madrid privatiz¨® en 2013 el servicio de lavander¨ªa para 19 hospitales p¨²blicos que hasta entonces ten¨ªan un servicio propio. Se trata del Hospital Universitario La Paz, Hospital de Cantoblanco, Hospital Universitario Doce de Octubre, Hospital Universitario Ram¨®n y Cajal, Hospital Cl¨ªnico San Carlos, Hospital Universitario de la Princesa, Hospital Universitario Santa Cristina, Hospital Carlos lll, Hospital lnfantil Universitario Ni?o Jes¨²s, Hospital Central de la Cruz Roja San Jos¨¦ y Santa Adela, Hospital Virgen de la Torre,Hospital de la Fuenfr¨ªa, Hospital Universitario de Getafe, Hospital Universitario de M¨®stoles, Hospital Severo Ochoa, Hospital Universitario Pr¨ªncipe de Asturias, Hospital General Universitario Gregorio Mara?¨®n, Hospital El Escorial y Hospital Guadarrama.
La ropa que reciben los hospitales no tiene el nivel de calidad requerido con un porcentaje de ropa no utilizable que incumple el m¨¢ximo admitido en el contrato (5%). Las principales ineficiencias son que un 13.5% de la ropa est¨¢ arrugada, un 9,6% est¨¢ sucia, un 5,9% tiene defectos por culpa de la calandra (una m¨¢quina para procesar las prendas), un 2,7% de las prendas tienen roturas, otro 2,4% con falta de costura y un 1,4% de ropa con humedad.
Adem¨¢s de la mala calidad hay otros problemas, como que no se env¨ªa ropa suficiente (con una merma diaria del 6%), no se separan prendas para costura en el 36% de las entregas y no se reciben algunas prendas en el 44,5% de las entregas.
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