Guerra biol¨®gica en el parque del Retiro: suelta de 250 millones de larvas contra pulgones, ¨¢caros y ara?as

La legi¨®n n¨²mero seis de insectos sali¨® ayer a salvar el mundo¡­ de las plantas. Concretamente en el vivero Estufas del Retiro, donde los t¨¦cnicos municipales soltaron millones de peque?as larvas y huevos de insectos, concretamente de mosquitos, avispas o chinches, destinados todos ellos a acabar con las plagas de pulgones, cochinillas, ¨¢caros o ara?as mediante una lucha biol¨®gica sin cuartel. El bien contra el mal animal, en t¨¦rminos puramente de salud arb¨®rea. La vitalidad contra la enfermedad. Toda una guerra natural en miniatura con un gran cometido: acabar con las afecciones de las plantas de una forma limpia y pura, es decir, sin da?ar el medio ambiente o la salud de las personas.

La t¨¦cnica es sencilla: se basa principalmente en confiar en el medio ambiente y utilizarlo para su propio beneficio. Se llama lucha biol¨®gica y es un m¨¦todo de control de plagas y enfermedades. Se estudian los depredadores naturales, se cr¨ªan, se congelan y se sueltan en el momento en el que las plagas empiezan a ganar la batalla, es decir, cuando las temperaturas lo propician: de primavera hasta oto?o. La de ayer fue la sexta y ¨²ltima suelta de este a?o, por eso es la legi¨®n n¨²mero seis. Despu¨¦s, la guerra de insectos se tomar¨¢ un respiro hasta que vuelva el calor.

Adolfo Mart¨ªn, director t¨¦cnico de Projard¨ªn y colaborador con el Ayuntamiento de Madrid, fue el encargado de llevar el cargamento de unos 250 millones de insectos. Llegaron en una caja de cart¨®n de porexp¨¢n con hielo algo m¨¢s grande que una caja de zapatos, metidos en diferentes botes y con una temperatura bien medida, inferior a 10? C, pero superior a cero: ¡°Ahora hay much¨ªsimo movimiento de bichos. Vienen de un continente a otro y no siempre es bueno. As¨ª que para que puedas usar estos que soltamos tienen que estar registrados en el ministerio y demostrar que son de la fauna aut¨®ctona o se han estudiado para que no causen da?os. Por ejemplo, entr¨® una mariquita de origen asi¨¢tico que acababa con la aut¨®ctona, y eso hay que evitarlo a toda costa porque luego puede haber desequilibrio de fauna¡±.

La caja de la salvaci¨®n pas¨® entonces de Mart¨ªn a Javier Spalla, el director del vivero Estufas del Retiro y personal del Ayuntamiento. Este la abri¨®, comprob¨® su interior y se sorprendi¨® de la gran ausente: la mariquita com¨²n, la abeja reina de la popularidad, cuyas larvas se utilizan para el mismo cometido. ¡°Son las m¨¢s conocidas, pero aunque las hemos pedido no han llegado. No es ¨¦poca¡±, lament¨® Spalla.

Criadores de par¨¢sitos

Los par¨¢sitos y depredadores que se utilizan en los viveros son criados por empresas especializadas y est¨¢n disponibles todo el a?o, aunque con algunas limitaciones por su propio ciclo vital y porque no se pueden conseguir todos los animales que ser¨ªan necesarios para combatir las plagas. Esta producci¨®n se realiza en diferentes pa¨ªses y se centraliza en Almer¨ªa.

La legi¨®n n¨²mero seis de este a?o, sin embargo, sali¨® igualmente a pasear sin su cara m¨¢s popular. ¡°Esto es un env¨ªo de insectos ¨²tiles que recibimos peri¨®dicamente en el vivero a demanda, se hace con diez o 15 d¨ªas de antelaci¨®n, cuando vemos que puede haber problemas con una plaga¡±, explic¨® el director.

La posible plaga, en esta ocasi¨®n, se ver¨¢ las caras con chrysoperlas carnea o crisopas (una especie de mosquitos de color verde), con orius y neosidicoris (dos especies de chinches) o Aphidoletes (otro tipo de mosquito), entre otros. Y a partir de la suelta, empieza el fest¨ªn. Una guerra sin cuartel por sobrevivir y mantener el equilibrio.

¡°Es muy curioso cuando lo ves. En realidad es bastante salvaje, pero bueno. Por ejemplo, cuando soltamos larvas de Cryptolaemus, que son unos escarabajos muy peque?os que llevan como una cresta, los ves comerse a la cochinilla algodonosa como si fuese un bocadillo¡±, explica de una manera muy gr¨¢fica Sonia Uceda, oficial de jardiner¨ªa del vivero. Ella y una compa?era se encargan de monitorizar d¨ªa a d¨ªa todas las plantas, revisarlas, hacen un estadillo a pie de campo y mandan un an¨¢lisis completo a los t¨¦cnicos del Ayuntamiento para que decidan c¨®mo atajar el problema que hay en cada momento. ¡°Si la plaga no tiene un nivel alto, se deja para ver c¨®mo va evolucionando, o si puede extenderse se hace una suelta¡±.

No es menos llamativa la manera en que una peque?a larva de avispilla acaba matando al pulg¨®n. ¡°Se trata del Aphidius, que pone los huevos dentro de los pulgones y cuando se empieza a desarrollar el huevo, la larva termina matando al pulg¨®n, y termina convertido en una momia, que es un cuerpo marr¨®n inmovilizado. Son momias de pulg¨®n. Ah¨ª ya el pulg¨®n est¨¢ muerto¡±, a?ade Spalla. Ojo, que estas sueltas tambi¨¦n corren su propio peligro: las hormigas, que no tienen predadores naturales. ¡°Para ellas los pulgones son sus vacas, utilizan su melaza. As¨ª que cuando hacemos sueltas y aparecen las hormigas van corriendo a comerse a las larvas para que no compitan por su alimento¡±. Las t¨¦cnicas de protecci¨®n integral incluyen tambi¨¦n la adaptaci¨®n al calendario de cultivos a las ¨¦pocas de m¨ªnima incidencia de las plagas y enfermedades y se intensifican las tareas de limpieza en los invernaderos.

Estas t¨¦cnicas se han aplicado tambi¨¦n en los viveros de la Casa de Campo y Migas Calientes, y el resultado ha sido m¨¢s que satisfactorio, ya que se ha conseguido mantener a niveles bajos la mayor parte de las plagas comunes y su presencia se considera que no es da?ina para los cultivos. ¡°Aqu¨ª se est¨¢ demostrando que la lucha biol¨®gica es eficaz¡±, asegura Uceda.

¡°Esto no es nuevo de ahora, se empez¨® a hacer en 2006¡±, reconoce el director del vivero del Retiro. Fue entonces cuando el Ayuntamiento realiz¨® la primera experiencia de t¨¦cnicas de Protecci¨®n Biol¨®gica Integrada, que alterna la puramente natural de los insectos con otras actuaciones como podas o tratamientos diversos, siempre intentando utilizar la menor cantidad de qu¨ªmicos. Esa t¨¦cnica es la que se utiliza en los parques, como el propio Retiro. ¡°Se hace en todo Madrid, pero de forma distinta dependiendo del sitio. En este vivero que es todo planta es diferente que un parque con ¨¢rboles, porque las plagas ah¨ª no son tan accesibles, hay que poner trampas, los bichos no est¨¢n a la vista, hay que subirse a los ¨¢rboles¡±, explica Spalla.

En esos casos, contin¨²a, monitorizar un parque es ¡°mucho m¨¢s complejo porque se utilizan una serie de m¨¦todos, como trampas, para saber si el insecto est¨¢ presente¡±. ¡°Pero la lucha biol¨®gica se hace igualmente, pero con una estrategia m¨¢s amplia, la que se llama lucha integrada: con otros sistemas, otra serie de medidas que pueden ser desde actuaciones de poda hasta tratamientos diversos que sean compatibles con los bichos que liberamos¡±.

Ayer se dio rienda suelta a la ¨²ltima suelta del a?o. Comienza la guerra por mantener el equilibrio natural. Como para matar ahora un mosquito.