Casas para refugiados en medio de un pol¨ªgono empresarial
La Asociaci¨®n de Vecinos del barrio critica que se concentren las 300 plazas en el mismo lugar
En mitad del Pol¨ªgono Empresarial Villa de Vallecas, frente a un supermercado Aldi y la ITV del barrio, la actividad y el ruido son incesantes. Gr¨²as, camiones, excavadoras y una veintena de obreros con chalecos reflectantes entran y salen de una zona vallada y plagada de carteles que obligan seguir las normas de seguridad por obras. Este es el lugar que ha elegido el Ayuntamiento de Madrid para instalar 32 viviendas prefabricadas que albergar¨¢n a finales de marzo a cerca de 300 personas demandantes de asilo pol¨ªtico, en concreto a las familias con menores a su cargo.
Se trata de un solar, hasta ahora vac¨ªo, entre la carretera Villaverde-Vallecas y la avenida Mayorazgo. Alrededor del enclave el tr¨¢fico es incesante y, de vez en cuando, aparece alg¨²n jubilado de paseo. Como Francisco, de 69 a?os. Se asoma curioso entre los huecos de la valla met¨¢lica, con las manos cruzadas sobre la espalda. Este vecino de Villa de Vallecas se ha enterado este jueves por la prensa de lo que est¨¢n construyendo all¨ª. "No me parece mal, pero creo que nos deber¨ªan haber avisado", explica. A este jubilado le parece una buena zona para acoger a las familias: hay varios supermercados y el Metro y la Renfe est¨¢n m¨¢s o menos cerca, indica. De hecho, el lugar se encuentra a?unos quince minutos caminando del centro neur¨¢lgico del barrio y a veinte de los metros Villa de Vallecas y Sierra de Guadalupe, y de las estaciones de tren Vallecas y El Pozo.
El Gobierno abre otro centro de acogida en la sierra
Fue en diciembre cuando llegaron las primeras excavadoras y, desde entonces, ha sido en cuesti¨®n de d¨ªas cuando se han instalado las primeras viviendas. As¨ª es como lo recuerda Mari Carmen Mart¨ªnez, otra vecina de 69 a?os que se hace la avenida Mayorazgo cada d¨ªa de arriba a abajo a paso r¨¢pido. Ella, que no sab¨ªa lo que se estaba construyendo all¨ª, le pregunt¨® a los obreros: "Casas para refugiados, me dijeron". A diferencia de Jos¨¦ L¨®pez, de 80 a?os, e Iberia Lasso, de 70, vecinos? muy informados. "No est¨¢ bien que las familias con ni?os tengan que dormir en parroquias o a la intemperie, hay que darles dignidad". A Jos¨¦ esta situaci¨®n le recuerda a otra que ocurri¨® no hace mucho: cuando eran los espa?oles los que se marchaban a trabajar a Alemania o a Francia. "Ellos tampoco est¨¢n aqu¨ª por gusto, qu¨¦ menos que darles un techo donde dormir", a?ade la pareja mientras tira del carro de la compra. Sixto Bermejo, otro vecino de 63 a?os, est¨¢ sorprendido por la celeridad de las obras "Entre ayer y hoy (por este mi¨¦rcoles y este jueves) han puesto las casas, han sido rapid¨ªsimos", dice.?
Desde la Asociaci¨®n de Vecinos Ensanche de Vallecas lanzan cr¨ªticas a la obra del Consistorio. "Damos la bienvenida a los refugiados, bastante mal lo est¨¢n pasando, pero no estamos de acuerdo con las formas ni con la organizaci¨®n", explican. En concreto, se oponen a que el Ayuntamiento concentre a cerca de 300 personas en el mismo distrito. El Consistorio justifica esta decisi¨®n a una cuesti¨®n de gesti¨®n y de urgencia: "Crear un centro es m¨¢s r¨¢pido que crear cuatro o cinco", explican fuentes del ?rea de Familias, Igualdad y Bienestar Social y recuerdan que el acogimiento a solicitantes de asilo es competencia del Gobierno central, por eso el centro tendr¨¢ un car¨¢cter rotatorio: Las familias pasar¨¢n all¨ª un m¨¢ximo de 30 d¨ªas. Despu¨¦s, el Ministerio de Trabajo y Migraciones tendr¨ªa que derivarlos a sus propias instalaciones.?
El organismo vecinal de Vallecas tambi¨¦n teme lo que pueda ocurrir despu¨¦s en este lugar. "?Qu¨¦ va a pasar cuando ya no se utilicen estas casas?", se preguntan. Cuentan con la experiencia previa de El Gallinero, recientemente desmantelado. "Esa zona se puso en marcha de la misma manera que estas casas prefabricadas: para dar alojamiento temporal a personas que viv¨ªan en malas condiciones". El Gallinero se transform¨® en un poblado chabolista donde llegaron a vivir m¨¢s de 500 personas en condiciones de extrema pobreza.
Desde el ?rea de Familias concluyen que la situaci¨®n de El Gallinero y la de este centro "no es en absoluto comparable". El perfil de las personas que se alojar¨¢n ¡ªfamilias latinoamericanas, en muchas ocasiones con formaci¨®n, que huyen de una crisis o de la violencia de sus pa¨ªses¡ª?no son, en principio, problem¨¢tico. Y a?aden:?"Cuando deje de ser necesario (esperamos que lo antes posible), se desinstalar¨¢n los m¨®dulos, y en todo caso se tomar¨¢n las medidas necesarias para evitar asentamientos posteriores".
Con un futuro quiz¨¢s incierto, el presente de este peque?o vecindario de 32 casas prefabricadas se abre paso entre el polvo del cemento de las excavadoras. Desde detr¨¢s de la valla met¨¢lica se puede adivinar la distribuci¨®n de cada una de las viviendas de 60 metros cuadrados, ya con sus enchufes, su cable de televisi¨®n y sus puntos de luz: tres habitaciones, sal¨®n, cocina y ba?o. Este jueves hab¨ªa ya instaladas una decena de ellas por la concejal¨ªa de Obras y Equipamientos?que calcula que 96 demandantes de asilo podr¨¢n instalarse durante la primera semana de febrero (fase 1), otros 140 lo har¨¢n a finales del mes (fase 2) y los restantes hasta alcanzar el aforo completo de 294 personas, llegar¨¢n a finales de marzo (fase 3).?
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