Madre coraje contra las casas de apuestas: ¡°Mi hijo lleva 10 a?os apostando. No puedo m¨¢s¡±
Susana Fonseca descubri¨® hace 10 a?os que su hijo Pablo robaba dinero en casa para apostar en salones del juego. Pide que se prohiban los anuncios
No lleg¨® a terminar cuarto de la ESO y apost¨® por primera vez. Pablo, un joven madrile?o de 27 a?os, est¨¢ enganchado a las casas de apuestas desde 2009. Susana Fonseca es su madre. ¡°Con 18 a?os consigui¨® abrir la caja fuerte que ten¨ªamos en la habitaci¨®n. ?Qu¨¦ de tiempo tuvo que dedicar para conseguir el c¨®digo de cuatro d¨ªgitos!¡±. Pablo, precavido, cog¨ªa peque?as cantidades para no levantar sospechas. Unas veces sacaba 100, otras 200, 500. "Nos dimos cuenta de que estaba apostando cuando se llev¨® 600. Hoy sigo sin saber cu¨¢nto se llev¨®¡±. Desde hace unos meses Fonseca acude a terapia para aprender c¨®mo puede ayudar a su hijo.
Pablo no se llama Pablo porque prefiere mantenerse en el anonimato. S¨ª quiere que su madre, de 51 a?os, cuente su historia. O que lean la petici¨®n que ella escribi¨® en Change.org con el t¨ªtulo?Mi hijo es lud¨®pata. Regulen ya los anuncios que acumula m¨¢s de 105.000 firmas. ¡°Si ya se controla la publicidad del tabaco y el alcohol, ?por qu¨¦ no la de las casas de apuestas?¡±. El ministro de Consumo, Alberto Garz¨®n, dijo el pasado domingo en La Sexta que las casas de apuestas son un problema de salud p¨²blica: ¡®La publicidad es un caos. Es la ley de la selva¡±. Para que no se olvide de sus palabras, Fonseca, que trabaja como auxiliar administrativo en una empresa de Torrej¨®n de Ardoz, le envi¨® una carta a mano hace unos d¨ªas contando su caso: ¡°Llevo 10 a?os as¨ª. No puedo m¨¢s¡±.
El pasado domingo, otra vez. A media tarde volvi¨® a cazar a su hijo con nueve apuestas guardadas en el caj¨®n del dormitorio. 90 euros. ¡°?l no las esconde¡±. Los boletos combinaban f¨²tbol americano con partidos de la liga de f¨²tbol alemana, espa?ola, de la NBA y de la ACB. ¡°Mi hijo puso su DNI en la web de lud¨®patas estatales ¡ªdonde est¨¢n registrados 43.796 lud¨®patas, el doble que hace ocho a?os¡ª para que no lo dejen entrar en las casas de apuestas, pero aun as¨ª le dejan¡±. Denuncia que ocurri¨® en un local de Sportium de Torrej¨®n de Ardoz, muy cerca de la casa donde viven, donde existen siete salones de juego en un per¨ªmetro de 700 metros. Hace 11 a?os que se inaugur¨® en el paseo de la Castellana la primera casa de apuestas de Madrid. Ahora existen m¨¢s de 385.
La madre de Pablo dice que tard¨® en asumir que su hijo era un lud¨®pata. ¡°Me dio verg¨¹enza cont¨¢rselo a su abuela y a su t¨ªa. Pero desde hace dos a?os me he quitado la careta. Trato de hacer lo que sea para que salga adelante. ?l me apoya, pero a las pocas semanas o d¨ªas vuelve a recaer¡±. Y ella se emociona. Y sufre. Y se sobrepone. ¡°Con 22 a?os Pablo acudi¨® por primera vez a una terapia. Me puse supercontenta. Pero mi ilusi¨®n dur¨® solo nueve sesiones porque a los cuatro meses lo dej¨®¡±. No ha vuelto.
Ella se autoinculpa. ¡°?Tardamos tiempo en llevarlo? Quiz¨¢, pero antes no hab¨ªa tanto conocimiento como hay ahora. Sab¨ªamos que era un problema, pero¡, no s¨¦¡±. Suspira. Y se vuelve a emocionar. ¡°Le he dado todos los recursos y los instrumentos para que salga. ?l es consciente de que es un lud¨®pata, pero ya no quiere ir a terapia. Y yo ya no me veo en la situaci¨®n de obligarle¡±.
¡ª?Le ha contado cu¨¢ndo apost¨® por primera vez?
¡ªNo. Y tampoco s¨¦ cu¨¢ndo dej¨® de ver a sus amigos.
Cuenta que Pablo se fue aislando poco a poco: dej¨® de ver a sus colegas, a su novia... Se qued¨® solo. Se encerr¨® en su cuarto para jugar con el ordenador. ¡°Pas¨® de no dormir en casa los viernes o los s¨¢bados a no salir nunca¡±. Y remarca: ¡°Los j¨®venes ven las apuestas como algo normal porque tienen el respaldo de una casa y de unos servicios m¨ªnimos asegurados: comida, ropa, m¨®vil, Internet. No les supone ning¨²n riesgo. Es una actividad m¨¢s como ir al cine o al teatro. Habr¨¢ j¨®venes a los que no les afecte, pero al m¨ªo s¨ª¡±.
Dice que ella ha pasado por muchas fases. A los 20 a?os ¡ªel perfil medio del jugador en Espa?a es un var¨®n de entre 20 y 35 a?os¡ª Pablo dej¨® de trabajar y utilizaba la tarjeta de Alcampo para comprar juegos, malvenderlos y lograr dinero en efectivo para apostar. ¡°Tardamos en darnos cuenta¡±, dice su madre. Ahora hay meses que le administra el dinero y otros que no. ¡°Tiene mi n¨²mero de cuenta asignado y ah¨ª le ingresan lo que gana por trabajar¡±. Una vez se neg¨®. ¡°Y de golpe le entregu¨¦ su salario: ¡®Toma, Pablo, 1.300 euros¡¯¡±. Le duraron 10 d¨ªas. Otro mes se gast¨® m¨¢s de 6.000 euros. ¡°3.500 que ten¨ªa guardados, 1.300 del trabajo y el resto de una indemnizaci¨®n que le dieron porque se cambi¨® de empresa¡±.
Ahora Pablo justifica cada gasto que hace. ¡°Le doy 10, 12, 20 o 50 euros al d¨ªa¡±. ?l luego llega con los tickets a casa y me dice que se ha tomado un caf¨¦, que ha comido fuera o que ha echado gasolina. El pasado 19 de enero, no. ¡°Le dej¨¦ 150 porque me dijo que quer¨ªa comprarse unos guantes y algo de ropa, pero por la noche vi las apuestas en el caj¨®n¡±.
¡ª?Qu¨¦ le dijo?
¡ªNo sabe la raz¨®n por la que volvi¨®. No s¨¦ qu¨¦ decirle ya.
Y se enrabieta. ¡°?Les pondr¨ªa una bomba a todas las casas de apuestas!¡±. Dice que cada 15 d¨ªas acude a un terapeuta especializado en padres de j¨®venes adictos al juego. Que otro d¨ªa quiso probar en qu¨¦ consist¨ªa la adicci¨®n de su hijo. Que alucin¨® con que se pudiera apostar a carreras de galgos. Que otra tarde persigui¨® como una detective a Pablo hasta un sal¨®n de juegos. Que al salir le mir¨® y que ¨¦l agach¨® la cabeza. Que otro d¨ªa se registr¨® como una lud¨®pata en Internet para ver en qu¨¦ salones de juegos se pide el DNI al entrar y en cu¨¢les no. Que le mand¨® una carta al Real Madrid y a los que publicitan las apuestas como Jorge Javier V¨¢zquez y Carlos Sobera. Que ninguno le contest¨®. Y que, como no puede m¨¢s, apaga la tele o la radio cada vez que sale un anuncio.
Este jueves, pese a estar autovetada, pudo entrar en la casa de apuestas Codere de la plaza de Lavapi¨¦s. El viernes, tal y como demuestran sus apuestas y sus grabaciones, en dos de Torrej¨®n. ¡°?Sabe el Gobierno que esto pasa?, ?no hay control?¡±, se pregunta. ¡°?No piden el DNI, dejan que los lud¨®patas sigan jugando!¡±.
Se pasa casi todo el d¨ªa pensando si su hijo estar¨¢ apostando. ¡°Me noto que cada vez estoy peor porque la situaci¨®n es igual que hace 10 a?os. Me gustar¨ªa que fuera feliz, que se riera, que saliera de fiesta, que tuviera novia, porque adem¨¢s es muy guapo¡±. Hace poco la psic¨®loga le dijo que aprovechara los momentos de lucidez de Pablo para insistirle en que vuelva a la terapia. ¡°Ocurre en los momentos en los que se gasta mucho dinero porque ah¨ª es cuando asume que necesita ayuda¡±. ?l se niega.?
Hace unas semanas, en una conversaci¨®n, pactaron que se vaya de casa en mayo. Se independizar¨¢ en un piso que su madre tiene en Alcal¨¢ de Henares. ¡°Volar¨¢ solo. Ese ser¨¢ el ¨²ltimo mes que le administre el dinero. No s¨¦ qu¨¦ pasar¨¢". Y se acuerda de cuando algunas noches Pablo se acerca y le dice: ¡°Mam¨¢, llevo unos d¨ªas sin apostar¡±. Eso, para ella, es la felicidad. ¡°Pero me dura muy poco¡±.
Un nuevo local, al lado de un centro contra la ludopat¨ªa
Muy cerca del madrile?o parque de El Retiro, en la calle de Doctor Esquerdo, 58, se abrir¨¢ en los pr¨®ximas semanas un nuevo local de apuestas deportivas. La apertura ha desatado las cr¨ªticas de los vecinos del bloque 58. ¡°Las obras empezaron en noviembre y todo era muy secreto. Forraron las paredes de hierro para que no supi¨¦ramos qu¨¦ iban a abrir, pregunt¨¢bamos a los obreros y no nos dec¨ªan nada¡±, cuenta Lydia Puertas, de 65 a?os, y presidenta de la comunidad de vecinos del bloque del edificio que albergar¨¢ el sal¨®n de juegos. ¡°El Ayuntamiento nos dijo que iban a abrir una casa de apuestas. Haremos todo lo posible por paralizar su apertura¡±. Alrededor de este futuro local existen hasta ocho centros educativos, dos hospitales y un centro contra la ludopat¨ªa.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel D¨ªaz Ayuso, anunci¨® el pasado noviembre que no se abrir¨¢n m¨¢s casas de apuestas. Sin embargo, este decreto todav¨ªa no ha sido aprobado. Fuentes de la Consejer¨ªa de Justicia aseguran que est¨¢ en tr¨¢mite y que se aprobar¨¢ en las pr¨®ximas semanas. La licencia de esta casa de apuestas se tramit¨® en octubre.
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