Cuatro miradas sobre la propuesta constitucional que fractura Chile

Chile est¨¢ en la cuenta regresiva para que arranquen las campa?as informativas de quienes est¨¢n a favor y en contra de la propuesta redactada por el Consejo Constitucional, controlado por las derechas, que busca superar la Carta Fundamental nacida en la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990. El pr¨®ximo martes 7 de noviembre todos los participantes del segundo proceso constitucional participar¨¢n de la ceremonia de entrega oficial del proyecto al presidente, Gabriel Boric, lo que marcar¨¢ el puntapi¨¦ inicial a las campa?as hasta el plebiscito de salida, el 17 de diciembre.

Dada la caracter¨ªstica m¨¢s de derecha de la propuesta del Consejo Constitucional, es muy probable que el plebiscito replique una polarizaci¨®n marcada por el eje izquierda/derecha, plantaba en EL PAIS el acad¨¦mico Claudio Fuentes. Para conocer cu¨¢les son los puntos que resaltar¨¢n quienes har¨¢n campa?a por la opci¨®n A Favor y las flaquezas que remarcar¨¢n los que ir¨¢n por el En Contra, opinan cuatro protagonistas del proceso, dos de cada lado.

Natalia Gonz¨¢lez: ¡°El texto fomenta un Congreso de mayor¨ªas y evita la fragmentaci¨®n¡±

La abogada, que integr¨® el comit¨¦ de expertos por el partido de derecha hist¨®rica Uni¨®n Dem¨®crata Independiente (UDI), y votar¨¢ a favor del texto, considera que la principal innovaci¨®n de la propuesta constitucional son los cambios al sistema pol¨ªtico y electoral. ¡°Las reformas urgentes y necesarias que clama la ciudadan¨ªa pasan en buena parte por el Congreso y lo que hace este texto es fomentar uno de mayor¨ªas y evitar la fragmentaci¨®n¡±, plantea. La nueva norma establece que solo los partidos que alcancen al menos un 5% de los votos podr¨¢n obtener un esca?o, con una serie de excepciones. Tambi¨¦n se reduce el n¨²mero de diputados de 155 a 138.

Sobre las cr¨ªticas a que la consagraci¨®n del Estado social de derecho queda ¡°vac¨ªo¡± porque est¨¢ limitado o restringido por las propias normas de los derechos sociales como salud, educaci¨®n y pensiones, Gonz¨¢lez dice que le llama la atenci¨®n que en ese debate no se mencione el art¨ªculo 24. La norma se?ala que el Estado deber¨¢ adoptar medidas ¡°adecuadas para realizar¡± estos derechos, atendiendo, entre otros, la remoci¨®n de obst¨¢culos para la satisfacci¨®n de ellos y el empleo del m¨¢ximo de recursos disponibles, con responsabilidad fiscal. Tambi¨¦n defiende el rol de los privados en asuntos como educaci¨®n y pensiones, porque ¡°esos derechos sociales no pueden estar al amparo solo el Estado, no tiene los recursos para garantizar calidad, no da abasto¡±.

Algo que no le gusta del texto es la norma de paridad transitoria de salida, que corregir¨¢ la representaci¨®n cuando alg¨²n g¨¦nero supere el 60% de los parlamentarios electos, solo en las dos elecciones posteriores a la entrada en vigencia de la nueva Constituci¨®n, si es que se aprueba. Con este tipo de reglas, considera Gonz¨¢lez, ¡°nos encaminamos a democracias identitarias¡±.

Antonia Rivas: ¡°Es una propuesta maximalista, larga y con demasiado contenido legislativo¡±

La abogada, comisionada constitucional por el partido Convergencia Social, del Frente Amplio, el mismo bloque del presidente Gabriel Boric, votar¨¢ en contra de la propuesta que califica de ¡°maximalista, larga y con demasiado contenido legislativo¡±. Para ella existen tres tipos de problemas en el texto. Unos son t¨¦cnicos, que ¡°ponen en riesgo¡± la institucionalidad vigente porque ¡°desconf¨ªa del Estado en muchas cosas y crea agencias paralelas a la Contralor¨ªa, como la de integridad¡±, ejemplifica, o la anti-corrupci¨®n, que tiene el rol de coordinar distintos organismos aut¨®nomos encargados del asunto. En los derechos sociales cr¨ªtica que hay conceptos ambiguos e interpretables que representan riesgos importantes de judicializaci¨®n.

El segundo tipo de problemas, se?ala, tiene que ver con que es ¡°muy program¨¢tica¡¯. ¡°Cierra la deliberaci¨®n democr¨¢tica estableciendo pol¨ªticas p¨²blicas, por ejemplo, en pensiones¡±, apunta. La norma establece que cada cotizante previsional ¡°tendr¨¢ el derecho a elegir libremente la instituci¨®n, estatal o privada, que los administre e invierta [los fondos previsionales]. En ning¨²n caso podr¨¢n ser expropiados o apropiados por el Estado a trav¨¦s de mecanismo alguno¡±.

Por ¨²ltimo, para Rivas tiene problemas con que es ¡°conservadora y moralizante desde una sola mirada¡±. La propuesta establece el derecho preferente y el deber de los padres y tutores legales sobre la educaci¨®n de sus hijos o pupilos. Esto incluye elegir el tipo de educaci¨®n, su establecimiento de ense?anza y decidir por su inter¨¦s superior. ¡°No se pone en el caso de que los padres no respeten los derechos de esos ni?os¡±, alerta Rivas, quien tambi¨¦n critica la consagraci¨®n de la libertad de conciencia porque dejar¨ªa la puerta abierta a que alguien se oponga a una ley por razones religiosas. ¡°Yo no siento que sea una nueva Constituci¨®n. Es la de 1980 reforzada¡±, a?ade la abogada.

Rescata los avances en materia de descentralizaci¨®n, que incluye la funci¨®n de Gobierno tanto en las municipalidades como en los gobiernos regionales. Tambi¨¦n celebra ¡°los titulares¡± sobre medio ambiente y la actualizaci¨®n de algunas materias en el sistema pol¨ªtico, pero reclama que son insuficientes.

Germ¨¢n Becker: ¡°Es una Constituci¨®n de centro y moderada¡±

El consejero de Renovaci¨®n Nacional, de la derecha moderada y que votar¨¢ a favor, dice que la propuesta es ¡°una Constituci¨®n moderna¡±. Destaca que se incorporan nuevos derechos sociales, como a la vivienda, y que se refuerzan otros como la creaci¨®n de la sala cuna desde los seis meses de vida, ¡°lo cual es tambi¨¦n un avance para la mujer¡±, y ¡°el derecho preferente de los padres de elegir la educaci¨®n de sus hijos¡±. Suma el impulso de un Plan universal de salud ¡°que no va a discriminar por sexo, edad, g¨¦nero ni preexistencias (de enfermedades previas)¡± y que en la protecci¨®n del medio ambiente el eje sea la sustentabilidad y el desarrollo, adem¨¢s de que ¡°se reconoce el cambio clim¨¢tico¡±.

En sistema pol¨ªtico, agrega como clave ¡°la reducci¨®n del tama?o de los distritos¡± que se impuls¨® para evitar la actual fragmentaci¨®n pol¨ªtica del Congreso chileno, adem¨¢s del umbral del 5% para los partidos que tambi¨¦n relev¨® Natalia Gonz¨¢lez.

Es un texto considera muy bueno, pero que ¡°lo malo¡± estuvo durante el proceso: ¡°La izquierda socialdem¨®crata fue absorbida por los sectores m¨¢s extremos y eso a Chile Vamos nos complic¨® mucho pues cada vez que quer¨ªamos negociar algo, hab¨ªa que hacerlo con la izquierda m¨¢s extrema. De no haber sido as¨ª, a lo mejor podr¨ªamos haber llegado a algunos acuerdos y dar un cariz un poco distinto al proyecto¡±.

Est¨¢ seguro de que, desde el comienzo, ¡°la izquierda m¨¢s dura vino con la idea de ver la forma de rechazar el proyecto. Fue desde la elecci¨®n, cuando se dieron cuenta que hab¨ªan salido electos muchos republicanos y la tortilla se hab¨ªa dado vuelta. No veo muchos argumentos de fondo para rechazar. Est¨¢ dif¨ªcil para la izquierda su trabajo para que se vote en contra. Normalmente son consignas falsas, como que es una Constituci¨®n anti mujeres, retr¨®grada y partisana. Pero, si alguien la lee, es una Constituci¨®n de centro, moderada, que trata de invitar a todos los sectores a participar¡±.

Pese a lo que afirma el oficialismo, dice que la propuesta mantiene sin riesgos a la ley de aborto en tres causales que rige en Chile desde 2017. Pero, admite que, aunque a su juicio no tiene efectos, hubiese preferido que no se cambiara el t¨¦rmino actual, ¡°la ley protege la vida del que est¨¢ por nacer¡±, a ¡°la ley protege la vida de quien est¨¢ por nacer¡±.

Alejandro K?hler: ¡°La derecha ha impuesto una sola moral¡±

Para el consejero socialista Alejandro K?hler, que votar¨¢ en contra, la propuesta est¨¢ basada en ¡°una lucha de hegemon¨ªa pol¨ªtica del Partido Republicano que trasladaron al texto constitucional. Por esa raz¨®n, lo absolutamente malo de este proceso es su sesgo pol¨ªtico e ideol¨®gico. Por lo tanto, es un texto excluyente¡±. Y agrega: ¡°Una Constituci¨®n democr¨¢tica no puede ser escrita a partir de una sola mirada, porque se excluyen ideas democr¨¢ticas que deben tener cabida. Lo que ha hecho la derecha es imponer una sola mirada y una sola moral y eso conlleva a un alto riesgo de polarizaci¨®n y desestabilidad pol¨ªtica del pa¨ªs¡±.

Ejemplifica esa ¡°sola mirada¡± en la norma que impuls¨® republicanos que se?ala que la ley protege la vida de quien est¨¢ por nacer. ¡°Esa mirada moral y excluyente lleva impl¨ªcito el riesgo de eliminar un derecho conquistado por las mujeres chilenas al uso de la interrupci¨®n de embarazo por tres causales¡±.

Y aunque se consagr¨® el Estado social y democr¨¢tico de derecho que tanto anhelaba la izquierda chilena, ¡°en el fondo fue diluido por cuanto existen tambi¨¦n normas que constitucionalizan a las isapres (aseguradoras privadas de salud) y a las AFP (privados que administran los fondos de pensiones). Se insiste es constitucionalizar un modelo mercantilista de prestaciones sociales¡±.

Para K?hler, sin embargo, la norma ¡°m¨¢s grave¡± es la que se refiere a la objeci¨®n de conciencia que, aunque en la propuesta tiene un alcance general, seg¨²n sus cr¨ªticos podr¨ªa abarcar muchas situaciones. El socialista se?ala que se podr¨ªan a extender a las instituciones, lo que ¡°para m¨ª es un cerrojo a cualquier aplicaci¨®n tanto del Estado de derecho como para las prestaciones sociales que se deben garantizar a la ciudadan¨ªa. Porque cuando una instituci¨®n privada haga uso de su derecho a su objeci¨®n de conciencia, puede rechazar la prestaci¨®n de un servicio fundamental en salud o educaci¨®n¡±.