Los cient¨ªficos del ¡®reloj del fin del mundo¡¯ fijan sus manecillas a cien segundos de la cat¨¢strofe
El Bolet¨ªn de Cient¨ªficos At¨®micos advierte cada a?o de las amenazas para la humanidad al ubicar la hora que falta para la medianoche
El a?o pasado, los cient¨ªficos que dirigen las manecillas del simb¨®lico reloj del fin del mundo anunciaron que la humanidad nunca hab¨ªa estado tan cerca de su propio fin, m¨¢s que ¡°incluso en el apogeo de la Guerra Fr¨ªa¡±. Apuntaban al cambio clim¨¢tico, a la inestabilidad pol¨ªtica creada por l¨ªderes como Trump que podr¨ªan acabar con guerras nucleares y, entre otras muchas amenazas, las pandemias. Fueron acusados de alarmismo, casi como cada a?o. Dos meses despu¨¦s, el mundo entero se encerraba en casa asediado por un virus, en septiembre los megaincendios arrasaban California y poco despu¨¦s el due?o de los c¨®digos de lanzamiento de bombas at¨®micas de EE UU alentaba un autogolpe de Estado. Hoy, el Bolet¨ªn de Cient¨ªficos At¨®micos mantiene, como el a?o pasado, las manecillas del reloj del apocalipsis a 100 segundos de la medianoche, que simboliza el fin del mundo.
¡°Las manecillas del Reloj del Juicio Final permanecen en 100 segundos antes de la medianoche, tan cerca de la medianoche como nunca. La letal e inspiradora pandemia de covid-19 sirve como una llamada de atenci¨®n hist¨®rica, una ilustraci¨®n v¨ªvida de que los gobiernos nacionales y las organizaciones internacionales no est¨¢n preparados para manejar las amenazas que verdaderamente ponen fin a la civilizaci¨®n como las armas nucleares y el cambio clim¨¢tico¡°, declar¨® la presidenta del Bolet¨ªn, Rachel Bronson.
¡°Creamos estas amenazas y podemos controlarlas¡±, advirti¨® Bronson, ¡°pero el margen de error es bajo¡±. La covid no eliminar¨¢ a la humanidad, afirm¨® Bronson, pero es un ejemplo claro de que las autoridades de todo el planeta no son capaces de afrontar peligros globales como la emergencia clim¨¢tica. ¡°Como podemos ver con la pandemia actual, algo tan peque?o como una mutaci¨®n viral podr¨ªa acercarnos al d¨ªa del juicio final. Debemos seguir tom¨¢ndonos esta amenaza en serio¡°, a?adi¨® la doctora Asha George, del Consejo de Ciencia y Seguridad del Bolet¨ªn.
El Bolet¨ªn ide¨® este reloj para denuncia el peligro de autodestrucci¨®n al que se acercaba la humanidad con la llegada de las bombas at¨®micas. Hasta ese momento, en 1945, la humanidad no ten¨ªa forma de autodestruirse por completo. Los cient¨ªficos que hab¨ªan participado en su desarrollo sintieron la necesidad de advertir a todos del peligro que supon¨ªa su creaci¨®n. Ahora que el reloj cumple 75 a?os, se han incorporado m¨¢s riesgos existenciales: desde el bioterrorismo y la inteligencia artificial a los virus incontrolables.
¡°Los gobiernos renunciaron con demasiada frecuencia a su responsabilidad, ignoraron los consejos cient¨ªficos, no cooperaron ni se comunicaron de manera eficaz¡±Bolet¨ªn de Cient¨ªficos At¨®micos
¡°En esta ¨¦poca de aut¨¦ntica crisis, los gobiernos renunciaron con demasiada frecuencia a su responsabilidad, ignoraron los consejos cient¨ªficos, no cooperaron ni se comunicaron de manera eficaz y, en consecuencia, no protegieron la salud y el bienestar de sus ciudadanos¡±, se?ala el informe que publican junto con el reloj.
En 2007 se incluy¨® el cambio clim¨¢tico como un peligro grave para la humanidad que demandaba una respuesta ¡°urgente e inmediata¡± y desde entonces la manecilla del reloj no ha dejado de acercarse a la medianoche, puesto que los cinco a?os en los que se ha registrado una mayor temperatura del planeta han sucedido despu¨¦s de 2015. Lejos queda el apacible a?o 1991, cuando el reloj estaba a 17 minutos de las 0.00 horas, mientras Francis Fukuyama declaraba el fin de la historia y tras firmarse entre EE UU y Rusia el Tratado de Reducci¨®n de Armas Estrat¨¦gicas.
Dada la creciente importancia de la geopol¨ªtica en las amenazas existenciales que afronta la humanidad, los cient¨ªficos del bolet¨ªn cuentan con el asesoramiento de la organizaci¨®n The Elders (los ancianos, en ingl¨¦s), fundada en 2007 por Nelson Mandela para aprovechar la experiencia de exl¨ªderes mundiales, entre los que destaca en esta edici¨®n Ellen Johnson Sirleaf, expresidenta de Liberia y codirectora del panel independiente que est¨¢ auditando el trabajo de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud durante la pandemia de covid.
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