Dos investigadoras espa?olas desarrollan una ¡®carne¡¯ vegetal m¨¢s saludable y menos contaminante

Una nueva carne vegetal hecha a base de arroz y algarroba est¨¢ a punto de llegar a los supermercados. El nuevo producto, bautizado como Leggie, ha sido desarrollado por la investigadora del CSIC Marta Miguel en colaboraci¨®n con la profesora Marta Garc¨¦s, de la Universidad Francisco de Vitoria. Esta carne, baja en grasas saturadas, sin colesterol y rica en fibra diet¨¦tica, llegar¨¢ a los puntos de venta a principios de verano y pretende establecerse como una alternativa para aquellos que busquen reducir su consumo de carne animal, ya sea por motivos ¨¦ticos, de salud o medioambientales.

Hace unos siete a?os, las investigadoras vieron un creciente inter¨¦s del p¨²blico estos productos m¨¢s respetuosos con el medio ambiente y con los animales y que fueran m¨¢s saludables. Para Marta Miguel, la aparici¨®n de la covid no ha hecho m¨¢s que acentuar esa tendencia: ¡°A ra¨ªz de la pandemia de coronavirus, tambi¨¦n se est¨¢ estableciendo esta mayor preocupaci¨®n por el medio ambiente y por la sostenibilidad del planeta¡±.

La pandemia ha creado una mayor preocupaci¨®n social por el medio ambiente y la sostenibilidad del planeta

Marta Miguel, investigadora del CSIC

El problema de los primeros alimentos desarrollados es que hab¨ªa poca variedad y su precio sol¨ªa ser elevado. As¨ª que se lanzaron a la creaci¨®n de una alternativa. ¡°Al principio fue muy lento, hasta que decidimos las matrices que quer¨ªamos utilizar para que fuese un alimento con la menor cantidad de ingredientes posibles y que tuviese la textura, la apariencia y el aspecto de una carne¡±, se?ala Miguel. La elecci¨®n final fue mezclar arroz y algarroba. El resultado es un producto bastante conseguido tanto en textura como en apariencia, aunque el sabor de la harina de arroz prevalece.

Ambos ingredientes est¨¢n muy presentes en la dieta mediterr¨¢nea (lo que hace que sean productos f¨¢ciles de conseguir) y tienen un alto nivel de fibra, algo que, seg¨²n las investigadoras, puede ayudar a reducir el d¨¦ficit de esta sustancia en la dieta de los espa?oles. Las recomendaciones de los nutricionistas rondan los 30 gramos de fibra por persona y d¨ªa, aunque los espa?oles apenas alcanzan los 20. Y es que esta carne no est¨¢ pensada para vegetarianos o veganos exclusivamente. ¡°Siguiendo con las recomendaciones de la dieta mediterr¨¢nea, es un producto de consumo diario¡±, cuenta Marta Garc¨¦s.

El Instituto Nacional de Estad¨ªstica calcula que los sectores de la agricultura, la ganader¨ªa, la silvicultura y la pesca generan unos 45 millones de toneladas de CO?. Sin embargo, seg¨²n los c¨¢lculos de la Organizaci¨®n de las Naciones Unidas Para la Alimentaci¨®n y la Agricultura, solo el sector c¨¢rnico produjo en 2015 m¨¢s de 86 millones de toneladas de di¨®xido de carbono. Seg¨²n datos del estudio Meat Price Index publicado en 2017, los espa?oles son los europeos que m¨¢s carne consumen (97 kilos al a?o), solo por detr¨¢s de los austriacos, que alcanzan los 102 kilos. El nacimiento de alternativas vegetales puede ayudar a reducir el consumo de animales y mitigar el impacto medioambiental.

Adem¨¢s, se trata de una carne que puede utilizarse en platos muy diferentes, seg¨²n cuenta Garc¨¦s. ¡°Estamos ante un ingrediente muy vers¨¢til que se puede utilizar en m¨²ltiples preparaciones culinarias, como topping de pizzas o ensaladas, como relleno de empanadas, empanadillas o lasa?as, y tambi¨¦n para elaborar bolo?esas, hamburguesas, salchichas, alb¨®ndigas, etc¨¦tera¡±, explica la profesora. Pese a ello, la compa?¨ªa ya trabaja en nuevos productos con curry, una salsa bolo?esa sin tomate o una mortadela vegetal, aunque es una l¨ªnea de productos que a¨²n tiene camino por recorrer antes de llenar las barrigas de los ciudadanos.

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