Una poblaci¨®n de osos polares descubierta en Groenlandia, gen¨¦ticamente aislada, no necesita el hielo marino para sobrevivir
Estos ¨²rsidos se han adaptado a un escenario clim¨¢tico similar al previsto en todo el ?rtico para finales de siglo provocado por el calentamiento
La imagen de un oso encaramado a un solitario trozo de hielo en mitad de un mar en deshielo ha sido, durante d¨¦cadas, el s¨ªmbolo de los impactos del cambio clim¨¢tico en la vida animal. Ahora, acaban de descubrir una poblaci¨®n de osos polares que lleva siglos viviendo en las condiciones que tendr¨¢ el ?rtico a finales de siglo, cuando algunos modelos vaticinan que estos ¨²rsidos se asomar¨¢n al precipicio de la extinci¨®n. Son gen¨¦ticamente distintos, tienen otros patrones de caza y apenas se alejan de su fiordo base. ?Les garantiza esto la supervivencia? Quiz¨¢ no, pero s¨ª vivir¨¢n cuando sus cong¨¦neres se hayan extinguido.
En la regi¨®n ¨¢rtica quedan unos 25.000 osos polares. Se agrupan en 19 subpoblaciones que ocupan espacios tan distantes como Alaska, Groenlandia o la isla de Svalbard. Pero todos dependen del hielo marino. Es aqu¨ª donde sus dos principales fuente de prote¨ªnas, las focas anilladas o las barbudas, hacen sus agujeros para respirar, descansan y tienen a sus cr¨ªas. Son los momentos que aprovechan los osos para cazarlas. Pero desde hace cuatro d¨¦cadas, hay menos hielo en el ?rtico: su extensi¨®n es cada vez menor en los meses fr¨ªos y se retira cada vez m¨¢s en los de verano. Eso obliga a los osos polares a arriesgadas traves¨ªas a nado siguiendo la l¨ªnea del hielo o buscar fortuna en tierra. La situaci¨®n es tan extrema que ha llevado a muchos ejemplares a cambiar focas por huevos. Ahora han descubierto la vig¨¦sima subpoblaci¨®n y es la primera que no depende del hielo marino para sobrevivir.
En 2014, investigadores de varios pa¨ªses iniciaron una investigaci¨®n en el sureste de Groenlandia. Sab¨ªan, por avistamientos y testimonios de cazadores locales, que hab¨ªa osos polares, pero desconoc¨ªan cu¨¢ntos eran, sus desplazamientos o sus patrones de caza. Desde entonces han avistado a unos trescientos y han puesto dispositivos de seguimiento a una treintena de ellos. En paralelo, con la ayuda de los lugare?os, que pueden cazarlos por subsistencia, recogieron tejidos de casi 400 ejemplares obtenidos desde 1983 para su an¨¢lisis. Los resultados del seguimiento y el estudio gen¨¦tico han sido toda una sorpresa.
¡°Son los osos m¨¢s al sur y est¨¢n geogr¨¢ficamente aislados de los otros, por lo que no interact¨²an muy a menudo ni se cruzan con los de otras subpoblaciones¡±Kristin Laidre, cient¨ªfica polar de la Universidad de Washington
Las conclusiones del trabajo, publicado en Science, muestran que estos osos son gen¨¦ticamente diferentes al resto de poblaciones, por lo que sus autores defienden que la Uni¨®n Internacional para la Conservaci¨®n de la Naturaleza los catalogue como la subpoblaci¨®n n¨²mero 20. La principal autora del estudio, Kristin Laidre, cient¨ªfica polar de la Universidad de Washington, dice que la diferenciaci¨®n gen¨¦tica se debe al aislamiento: ¡°Son los osos m¨¢s al sur del ¨¢rea de distribuci¨®n del oso polar y est¨¢n geogr¨¢ficamente aislados de los otros, por lo que no interact¨²an muy a menudo ni se cruzan con los de otras subpoblaciones¡±.
La geograf¨ªa de la zona es clave en el aislamiento. Ocupando una extensi¨®n de unos 700.000 kil¨®metros cuadrados y una l¨ªnea de costa de 3.200 kil¨®metros, se trata de un ¨¢rea de fiordos que se adentran hasta 1.000 metros en la tierra donde acaban centenares de glaciares rodeados por monta?as. Con una altura media del hielo que cubre la isla de 2.135 metros, los osos no pueden ir tierra adentro. Hacia el oeste est¨¢ el mar, uno en el que coinciden tres fuertes corrientes marinas que participan en el trasiego de agua del ?rtico al Atl¨¢ntico y al rev¨¦s y que hacen muy peligrosa su traves¨ªa. Al norte, una imponente cordillera les corta el paso. Podr¨ªan llegar al lado oeste de la isla yendo por el sur, pero all¨ª se concentran los pocos humanos que viven en Groenlandia. Y los osos han aprendido que no es buena idea acercarse a estos seres y sus armas.
La telemetr¨ªa de los dispositivos de seguimiento confirma este aislamiento y la escasez de relaciones con los osos del norte. Tambi¨¦n muestra que son pr¨¢cticamente sedentarios. Mientras sus cong¨¦neres del norte de Groenlandia se mueven una media de 40 kil¨®metros cada cuatro d¨ªas y recorren hasta 1.500 kil¨®metros al a?o, esta nueva poblaci¨®n no se desplaza m¨¢s de 10 Km en cuatro d¨ªas. De hecho, muchos animales no abandonan su fiordo durante a?os. Los investigadores detectaron que la mitad de las osas anilladas hab¨ªan sido arrastradas por la corriente hasta 120 millas n¨¢uticas de su base y todas acababan volviendo su territorio.
Lo que extra?¨® a los cient¨ªficos es que esta zona de Groenlandia parece la menos adecuada para que vivan los osos polares. No hay hielo marino durante la mayor parte del a?o, unos 250 d¨ªas. Eso supone hasta doblar los 100 a 180 d¨ªas que los osos sobreviven al ayuno estacional. ?C¨®mo viven entonces? La observaci¨®n directa confirm¨® a los cient¨ªficos que hay focas anilladas en la zona. Lo que tambi¨¦n vieron es que las cazan cuando descansan sobre las finas placas de hielo de agua dulce que se desprenden de los glaciares. Son inestables, muy cuarteadas, pero es lo que hay la mayor parte del a?o y los ¨²rsidos han adaptado su forma de cazar a este fr¨¢gil escenario.
¡°Las condiciones del hielo en el sureste de Groenlandia de hoy se parecen a las que han predicho para el nordeste para finales de siglo¡±, dice Laidre. Para entonces, en esta enorme isla y en casi toda la regi¨®n ¨¢rtica, se prev¨¦ una retirada muy acusada del hielo, que solo se mantendr¨ªa en torno al polo norte en los meses de verano. ¡°En cierto sentido, estos osos dan una idea de c¨®mo les puede ir a los osos de Groenlandia en los escenarios clim¨¢ticos futuros¡±, concluye la investigadora en una nota de su universidad.
Para los autores del estudio, esta zona podr¨ªa funcionar como un refugio clim¨¢tico. Pero, ?bastar¨¢ para salvar a la especie? Expertos ajenos a esta investigaci¨®n, lo dudan. Es el caso de Anthony Pagano, bi¨®logo del Servicio Geol¨®gico de Estados Unidos, una agencia cient¨ªfica del gobierno estadounidense. Pagano trabaja sobre el terreno en Alaska, estudiando las poblaciones locales de osos polares. En 2018, publicaba una investigaci¨®n que mostraba que, con el deshielo en curso, estos animales est¨¢n viviendo de prestado, por encima de las posibilidades que les ofrecen las cada vez menos habituales presas. No, no es que las focas se est¨¦n extinguiendo, es que no hay hielo.
¡°Las focas asociadas al hielo pueden permanecer en aguas abiertas cuando no hay hielo marino presente. Los osos polares son capaces de nadar, pero no est¨¢n adaptados para permanecer exclusivamente en aguas abiertas¡±Anthony Pagano, bi¨®logo del Servicio Geol¨®gico de Estados Unido
¡°Las focas asociadas al hielo, como las anilladas y barbudas, pueden permanecer en aguas abiertas cuando no hay hielo marino presente¡±, explica Pagano en un correo. ¡°Los osos polares son capaces de nadar, pero no est¨¢n adaptados para permanecer exclusivamente en aguas abiertas. Su morfolog¨ªa es similar a la de otros mam¨ªferos terrestres. Adem¨¢s, ha habido pocas observaciones de osos polares atrapando focas en aguas abiertas. Por lo tanto, sin el hielo marino, no pueden cazar ni comerse a su principal presa¡±, a?ade.
En cuanto a si la poblaci¨®n descubierta ahora podr¨ªa servir de modelo adaptativo para otras poblaciones, Pagano lo pone muy en duda. ¡°Como menciona la investigaci¨®n, este tipo de h¨¢bitat de glaciares son escasos en el ?rtico, a excepci¨®n de algunas zonas de Groenlandia y Svalbard. As¨ª que, dichas ¨¢reas pueden servir como posible refugio, pero tales h¨¢bitats no estar¨ªan disponibles para la mayor¨ªa de los osos polares distribuidos por todo el ?rtico¡±, sostiene Pagano.
La misma opini¨®n mantiene Steven C. Amstrup, responsable cient¨ªfico de la organizaci¨®n conservacionista Polar Bears International. ¡°Este nuevo art¨ªculo que aparece en Science documenta un peque?o grupo de osos polares que han podido sobrevivir en un ¨¢rea donde la disminuci¨®n del hielo marino ya ha sido lo suficientemente grande como para evitar que pudieran persistir en la regi¨®n. Esta aparente excepci¨®n es posible debido a la extensa red de fiordos y glaciares que albergan una melange glacial (agua dulce que se derrite de los glaciares de marea y forma una capa de hielo en la superficie marina)¡±, comenta Amstrup. El agua dulce se congela a mayor temperatura que la salada, por lo que, ¡°incluso cuando las condiciones all¨ª no permiten que persista el hielo marino, pueden mantener una capa de hielo que sirve a los osos polares para continuar cazando las focas que viven bajo ese hielo¡±, a?ade el cient¨ªfico estadounidense.
¡°Si permitimos que el hielo desaparezca, los osos polares desaparecer¨¢n con ¨¦l¡±Steven C. Amstrup, responsable cient¨ªfico de la organizaci¨®n conservacionista Polar Bears International
Pero Amstrup enseguida destaca: ¡°Esto no es, por lo tanto, un nuevo comportamiento o adaptaci¨®n de los osos, contin¨²an cazando focas marinas desde una superficie de hielo. Sucede que el ¨²nico hielo que queda en esta ¨¢rea es en gran parte agua dulce. Puede haber algunas otras ¨¢reas como esta en otras partes del ?rtico, pero en el esquema general de las cosas, tales h¨¢bitats son escasos y solo podr¨ªan albergar a unos pocos osos¡±.
Hay un ¨²ltimo detalle que destacan tanto Laidre, por parte de los autores del descubrimiento, como los dos expertos ajenos: el hielo de los glaciares tambi¨¦n se est¨¢ retirando tierra adentro. Como sentencia Amstrup, ¡°en ¨²ltima instancia, este h¨¢bitat se derretir¨¢ y desaparecer¨¢ al igual que el hielo marino¡±. Y con el deshielo, tambi¨¦n los osos reci¨¦n descubiertos estar¨¢n condenados si no se reducen las emisiones que calientan el ?rtico. Amstrup recuerda haberlo dicho en una entrevista hace a?os: ¡°A medida que se va el hielo marino, tambi¨¦n se va el oso polar¡±. Ese hecho, a?ade ahora, ¡°no ha cambiado, y si permitimos que el hielo desaparezca, los osos polares desaparecer¨¢n con ¨¦l¡±.
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