Serge Haroche, Nobel de F¨ªsica: ¡°No deber¨ªamos exagerar los avances en la computaci¨®n cu¨¢ntica, hay mucho bombo publicitario¡±

Se podr¨ªa decir que su motivaci¨®n era matar al padre. Serge Haroche (Casablanca, 78 a?os) fue uno de los ganadores del premio Nobel de F¨ªsica en 2012 porque logr¨® atrapar y manipular part¨ªculas individuales conservando su naturaleza cu¨¢ntica. Su logro era impensable. El mismo Erwin Schr?dinger, uno de los padres de la f¨ªsica cu¨¢ntica, hab¨ªa dicho casi un siglo antes que trabajar sobre una sola part¨ªcula era imposible. Schr?dinger lo solucion¨® con el principio de la superposici¨®n cu¨¢ntica: como no pod¨ªa aislar y observar un sistema f¨ªsico como el electr¨®n, asumi¨® que este exist¨ªa en todos sus te¨®ricamente posibles estados. As¨ª naci¨® su famoso gato que, encerrado en una caja, estaba vivo y muerto hasta que pudiese ser observado. Donde Schr?dinger hab¨ªa escrito ¡±y¡±, Haroche puso una ¡°o¡±.

La mec¨¢nica cu¨¢ntica ha hecho posibles los grandes avances tecnol¨®gicos de nuestra era, desde el primer ordenador hasta la conexi¨®n por fibra ¨®ptica. El ¨²ltimo galard¨®n de la Academia Sueca, entregado el pasado 6 de octubre, volvi¨® a premiar un salto en las barreras de esta ciencia. Tres f¨ªsicos lograron controlar la comunicaci¨®n entre part¨ªculas a cientos de kil¨®metros de distancia. Hasta entonces, el llamado entrelazamiento cu¨¢ntico (la comunicaci¨®n entre part¨ªculas a distancia sin ning¨²n v¨ªnculo f¨ªsico) era un misterio de la ciencia.

¡°El progreso es algo fant¨¢stico. El siguiente paso siempre es el m¨¢s dif¨ªcil¡±, dice Haroche, que la pasada semana estuvo de visita en Buenos Aires, invitado por la Organizaci¨®n de Estados Iberoamericanos para celebrar la Semana Internacional de la Ciencia. Retirado de la investigaci¨®n desde hace unos a?os, el f¨ªsico y profesor franc¨¦s, exdirector del departamento de F¨ªsica de la Escuela Normal Superior de Par¨ªs y antiguo rector del Colegio de Francia, lleg¨® a la ciudad con un objetivo muy concreto: defender la investigaci¨®n como un fin en s¨ª mismo ante la urgencia del mercado y la constante exigencia de resultados de nuestra ¨¦poca.

Pregunta. Medir sistemas cu¨¢nticos individuales fue un salto adelante inimaginable para los padres de la f¨ªsica cu¨¢ntica. ?Qu¨¦ nos ense?a esto?

Respuesta. Nos dice que la manera en la que miramos la ciencia depende de la tecnolog¨ªa a la que tenemos acceso en nuestro tiempo. La raz¨®n por la que Schr?dinger o Einstein dec¨ªan que esto era imposible es porque no pod¨ªan concebir la tecnolog¨ªa que tenemos disponible.

P. ?Qu¨¦ mundos se abrieron con su investigaci¨®n?

R. Nuestro trabajo en la tecnolog¨ªa cu¨¢ntica estaba basado en intentar lograr objetivos que eran imposibles seg¨²n la f¨ªsica cl¨¢sica. El ejemplo m¨¢s claro son los relojes at¨®micos, m¨¢s precisos que los que miden la geolocalizaci¨®n actual. Otro es la comunicaci¨®n cu¨¢ntica usando el entrelazamiento. Esto garantiza una comunicaci¨®n secreta, que no puede ser espiada. Todos estos campos de investigaci¨®n est¨¢n muy activos. Especialmente el de las computadoras cu¨¢nticas, que es el m¨¢s dif¨ªcil de lograr porque tiene muchos desaf¨ªos por delante.

P. La Academia Sueca acaba de premiar los avances en la comunicaci¨®n cu¨¢ntica, ?qu¨¦ significa este logro?

R. Me hace muy feliz, porque los ganadores son amigos m¨ªos desde hace a?os. La investigaci¨®n en esta materia se empez¨® a explorar hace unos 40 a?os, intentando demostrar qu¨¦ pasa cuando los fotones permanecen conectados por ese v¨ªnculo inmaterial que llamamos entrelazamiento, incluso cuando est¨¢n a cientos de kil¨®metros. En ese entonces no exist¨ªa una aplicaci¨®n pr¨¢ctica para la experimentaci¨®n. Necesitamos unos 20 a?os m¨¢s hasta que los experimentos por los que yo gan¨¦ el premio demostraron que la manipulaci¨®n de sistemas cu¨¢nticos aislados era posible. Con la comunicaci¨®n esperamos que la gente empiece a creer que todo esto es ¨²til para algo¡­

El l¨¢ser es el mejor ejemplo de c¨®mo la ciencia b¨¢sica puede ser aplicada mucho tiempo m¨¢s tarde

P. Usted defiende la idea de que hay que centrarse en lo que llama ¡°ciencia in¨²til¡±. ?Qu¨¦ significa esto?

R. Es importante saber que todo lo que hacemos por curiosidad, sin la necesidad de buscar un resultado concreto, termina siendo ¨²til en maneras que no lo esperamos. Pensemos en uno de los mayores avances de nuestra ¨¢rea: el l¨¢ser, que hace posible la conexi¨®n global a trav¨¦s de la fibra ¨®ptica que cruza los oc¨¦anos, es una noci¨®n que desarroll¨® Einstein, pero que tom¨® casi 40 a?os en concretarse. Una d¨¦cada despu¨¦s de su invenci¨®n ya lo us¨¢bamos para comunicarnos usando repetidores cu¨¢nticos, pero quienes lo desarrollaron no ten¨ªan ni idea de que esto pod¨ªa pasar. El l¨¢ser es el mejor ejemplo de c¨®mo la ciencia b¨¢sica puede ser aplicada mucho tiempo m¨¢s tarde.

P. ?ltimamente, se habla mucho de los avances en la computaci¨®n cu¨¢ntica. Compa?¨ªas como Google o IBM dicen que han dado grandes pasos en ese campo. ?No es cierto?

R. La superposici¨®n cu¨¢ntica es muy fr¨¢gil. Hasta ahora solo somos capaces de controlar unas pocas part¨ªculas al mismo tiempo, y necesitamos poder manipular millones para lograr una computadora cu¨¢ntica. Creo que hay mucho bombo publicitario porque las compa?¨ªas compiten y necesitan demostrar resultados. El trabajo que est¨¢n haciendo es interesante, sin duda, pero a¨²n faltan muchas cosas por hacer y no deber¨ªamos exagerar. La historia de la ciencia nos ense?a que los desarrollos tecnol¨®gicos son casi siempre una sorpresa, casi nunca se acercan a nuestra intenci¨®n original. El desfase entre la ciencia b¨¢sica y su aplicaci¨®n siempre llega con giros inesperados. Debemos tener cuidado.

P. ?Son descuidadas estas compa?¨ªas?

R. No son descuidos, pasa por la l¨®gica en la que trabajan: necesitan mostrar un producto que sea vendible. Yo lo veo desde un punto de vista puramente cient¨ªfico, no desde el de alguien que necesita producir algo con un fin lucrativo. Con ser cuidadosos me refiero a que no podemos predecir que algo pasar¨¢ en dos o tres a?os, porque las investigaciones llevan m¨¢s tiempo y pueden pasar muchas cosas en el camino.

P. ?Por qu¨¦ existe ese apuro?

R. Hay muchas fantas¨ªas que probablemente no ocurrir¨¢n. Ninguno de los grandes avances tecnol¨®gicos del siglo XX fue predicho: el l¨¢ser, internet, el ordenador cl¨¢sico, la ubicaci¨®n en GPS¡­ Incluso si el ordenador cu¨¢ntico puede ser construido, ser¨¢ una m¨¢quina enorme, que necesita trabajar a temperaturas muy bajas. No es algo que pueda ser vendido como un ordenador port¨¢til.

P. No tendremos tel¨¦fonos cu¨¢nticos dentro de poco¡­

R. No lo creo. Pero esa idea nos ayuda a explicar el desaf¨ªo gigante que tienen los ordenadores cu¨¢nticos por delante: el tel¨¦fono que tienes en tus manos es m¨¢s poderoso que los ordenadores que monitorearon el viaje del ser humano a la Luna. El progreso es algo fant¨¢stico, y el siguiente paso es el m¨¢s dif¨ªcil.

P. ?Qu¨¦ ha cambiado en la investigaci¨®n en estos a?os?

R. Los cient¨ªficos de la ¨¦poca de Einstein y Schr?dinger ten¨ªan mucho apoyo, ten¨ªan buenos salarios. Es cierto que la investigaci¨®n costaba menos entonces, pero todo se ha complicado en nuestro tiempo. La competencia es mayor y la financiaci¨®n es mucho m¨¢s limitada. Se ha vuelto m¨¢s complicado trabajar: necesitamos que los j¨®venes inviertan su creatividad en la ciencia, pero sus oportunidades son muy limitadas.

P. ?Cu¨¢l es el papel de la pol¨ªtica en esto?

R. Los gobiernos deber¨ªan entender que la ciencia es una aventura a largo plazo. No hay un compromiso en estos t¨¦rminos, algo que sol¨ªamos relacionar con pa¨ªses con sistemas pol¨ªticos fr¨¢giles, pero que se ha empezado a expandir: ahora pasa en Estados Unidos, por ejemplo. La ciencia fue descuidada durante el Gobierno de [Donald] Trump, y ese es un problema enorme. Si queremos que la ciencia le haga frente a nuestros problemas m¨¢s urgentes, como el cambio clim¨¢tico, necesitamos un compromiso pol¨ªtico fuerte y duradero.

P. ?Cree que la ciencia ha perdido autoridad en nuestra ¨¦poca?

R. S¨ª, completamente. La ciencia vive bajo amenaza. Los cient¨ªficos cuestionan las verdades que gobiernan nuestro tiempo, pero se basan en dudas racionales, en dudas que desaf¨ªan teor¨ªas que no explican todos los hechos. Es por eso que las teor¨ªas conspirativas son tan perversas: se basan en la idea de que cualquier cosa puede ser desafiada con una opini¨®n, de que las opiniones son v¨¢lidas como teor¨ªas.

P. ?Qu¨¦ ha pasado?

R. Creo que es una pregunta para la sociolog¨ªa, pero hay una explicaci¨®n en que hemos entrado en una fase peligrosa de la globalizaci¨®n. Hay gente que ha quedado afuera, que est¨¢ aislada y se siente indefensa ante la evoluci¨®n que ha prometido nuestro mundo. La respuesta que han tenido es ponerlo en duda en comunidades, en burbujas de pensamiento. Y ese es un lugar dif¨ªcil para las herramientas de la ciencia, porque no sirve para unirse en contra de otros. El pensamiento anticient¨ªfico es algo que une a la gente en contra de otra, y la ciencia no puede trabajar ah¨ª porque es universal, racional y objetiva.

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