El origen de la cucaracha: de los campos de India a tu cocina
Un nuevo estudio gen¨¦tico ha revelado el origen de este animal que nos atormenta
La mayor¨ªa de las cucarachas no nos molestan. Llevan existiendo en los diversos ecosistemas de la Tierra 130 millones de a?os, ayudando a reciclar la materia org¨¢nica de la que se alimentan. Hoy en d¨ªa, hay aproximadamente 4.000 especies y menos del 1% viven entre nosotros. Entre ellas, solo una, la cucaracha alemana (Blattella germ¨¢nica), es la que causa gran parte de las plagas en el mundo. Por fin, la ciencia ha trazado su historia.
Resulta que la cucaracha alemana vive exclusivamente en entornos urbanos, no existe ninguna poblaci¨®n en la naturaleza. Entonces, ?de d¨®nde vienen? A pesar de su nombre, nunca se ha cre¨ªdo que viniese de Europa, ya que aqu¨ª no tenemos otras especies del g¨¦nero Blattella.
El primer registro hist¨®rico de este animal en Europa ronda la ¨¦poca de la Guerra de los Siete A?os (1756-1763). Los nombres comunes que le daban variaban seg¨²n el bando: los rusos la llamaban la ¡°cucaracha prusiana¡± y sus oponentes la ¡°cucaracha rusa¡±. Finalmente, en 1767 Linneo recogi¨® unos ejemplares en Alemania y le puso el nombre de Blattella germ¨¢nica, pero realmente desconoc¨ªa su origen.
Se cre¨ªa que esta cucaracha podr¨ªa venir de ?frica, hasta que en 1950 unos cient¨ªficos de la Universidad de Harvard hicieron una expedici¨®n a la India y descubrieron otra cucaracha llamativamente parecida. La hip¨®tesis de que sali¨® de Asia pas¨® a ser la m¨¢s aceptada, pero c¨®mo lleg¨® a esparcirse por todo el mundo segu¨ªa siendo un misterio. Hasta ahora.
Un grupo de cient¨ªficos han tomado muestras de ADN de estos artr¨®podos en 17 pa¨ªses alrededor del mundo y han comparado sus secuencias. Los resultados, recientemente publicados en la revista PNAS, les han permitido trazar el viaje de la cucaracha alemana desde su origen hasta nuestros hogares.
La secuencia de la cucaracha alemana era casi id¨¦ntica a la de la Blattella asahinai, una cucaracha del golfo de Bengala. Esto significa que estas dos especies divergieron hace relativamente poco tiempo, en concreto 2.100 a?os, probablemente cuando los agricultores indios dejaron el campo para vivir en ciudades.
La primera vez que sali¨® de la India fue hace 1.200 a?os y se dirigi¨® hacia el oeste, pero no lleg¨® demasiado lejos. M¨¢s tarde hubo otra oleada que lleg¨® a Indonesia y solo hace 270 a?os, llegaron a Europa, lo que concuerda con los relatos de la Guerra de los Siete A?os. Por ¨²ltimo, colonizaron el resto del mundo hace 120 a?os.
El que la cucaracha alemana empezase a viajar hace tan poco tiempo tiene explicaci¨®n. Esta especie se caracteriza por tener una esperanza de vida muy corta, lo que implica que, para distribuirse por el mundo, necesita tiempos de transporte cortos. A medida que progresaba la tecnolog¨ªa humana, los transportes se hac¨ªan m¨¢s r¨¢pidos y se acortaba la duraci¨®n de los viajes. Por eso no sorprende que la mayor expansi¨®n de la distribuci¨®n de cucarachas se produjera en el siglo XX.
As¨ª lo explican los autores del estudio en The conversation: ¡°Creemos que el comercio mundial facilit¨® esta expansi¨®n, porque las poblaciones m¨¢s estrechamente emparentadas se encuentran en pa¨ªses con v¨ªnculos culturales, m¨¢s que en pa¨ªses que simplemente est¨¢n cerca unos de otros¡±.
Adem¨¢s, la cucaracha alemana es una especie tropical que tiene una temperatura ¨®ptima de entre 25 y 32?C. Conforme la tecnolog¨ªa humana fue mejorando las condiciones interiores de las casas, como la calefacci¨®n y el aislamiento de los edificios, este animal pudo ampliar su rango de distribuci¨®n a las zonas templadas. Tambi¨¦n ayud¨® el calor de los motores mec¨¢nicos y el¨¦ctricos de los ascensores, las escaleras mec¨¢nicas o los generadores.
Llama la atenci¨®n que, siendo las dos especies de cucarachas tan parecidas, una se haya quedado en los campos de India y la otra se haya vuelto totalmente urbanita para seguir al ser humano por todo el planeta. ?Qu¨¦ aspectos en un animal pueden desencadenar un cambio as¨ª en el estilo de vida?
Alta tasa de reproducci¨®n y m¨¢s gregaria
Adem¨¢s de tener una vida corta, la cucaracha alemana se caracteriza por tener un menor tama?o, lo que permite mantener una poblaci¨®n m¨¢s numerosa cuando los recursos son limitados. Esto se traduce en m¨¢s cucarachas en menos tiempo, lo que aumenta la tasa de evoluci¨®n y, por tanto, la capacidad de adaptaci¨®n. Las cucarachas alemanas pod¨ªan adaptarse r¨¢pidamente a las nuevas circunstancias ambientales, como nuevos materiales de construcci¨®n, nuevos tipos de alimento y otros factores humanos. Y tambi¨¦n desarrollar resistencia a los insecticidas con facilidad.
Pero la principal diferencia entre la cucaracha alemana y la asi¨¢tica es que la alemana es gregaria, lo que permite que m¨¢s individuos sobrevivan en peque?os refugios dentro de las viviendas humanas. Esto es muy importante. Si lo pensamos, la mayor¨ªa de las especies animales que forman plagas en las ciudades se caracterizan por ser muy sociales, como las ratas.
Esta especie muestra la organizaci¨®n social m¨¢s avanzada de entre todas las especies de cucarachas que se pueden considerar una plaga. Cuando se encuentran aisladas fuera de su grupo, las cucarachas alemanas sufren el ¡°s¨ªndrome de aislamiento¡±. Los s¨ªntomas incluyen el retraso de la maduraci¨®n sexual y varios trastornos del comportamiento, como una menor b¨²squeda de comida y una menor exigencia a la hora de evaluar a su potencial pareja reproductora.
Adem¨¢s, cuando est¨¢n aisladas reducen la cantidad de hidrocarburos que expresan en su cut¨ªcula. Estas mol¨¦culas se encargan de regular su comportamiento social, son las que les permiten reconocerse entre cucarachas emparentadas y decidir con qui¨¦n se juntan. En contraposici¨®n, otras especies de cucarachas no muestran estos s¨ªntomas.
Por lo tanto, tenemos una especie de cucaracha que, debido a su elevada tasa de reproducci¨®n y su comportamiento gregario, ha conseguido adaptarse perfectamente a la vida en la ciudad. El confort que creamos en nuestras viviendas tambi¨¦n es su confort y, de momento, no hay insecticida capaz de acabar con un animal que se adapta tan f¨¢cilmente. Lo m¨¢s probable es que, mientras haya humanos sobre la Tierra, la cucaracha alemana siga entre nosotros.
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