La deforestaci¨®n ilegal en la Amazonia sube y alcanza el r¨¦cord en los ¨²ltimos 15 a?os

La Amazonia brasile?a perdi¨® 13.235 kil¨®metros cuadrados de ¨¢rboles en un a?o, seg¨²n el ¨²ltimo balance anual, difundido este jueves con enorme sigilo por el Gobierno de Jair Bolsonaro. La cifra supone que la deforestaci¨®n ilegal entre agosto de 2020 y julio de 2021 aument¨® un 22% respecto al periodo anterior, cuando sum¨® 10.851 kil¨®metros cuadrados. Es la m¨¢s alta registrada en los ¨²ltimos 15 a?os. Este balance anual, elaborado con mediciones de sat¨¦lite por el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE), es el m¨¢s esperado por todos los implicados en la protecci¨®n y preservaci¨®n del mayor bosque tropical del mundo porque viene a ser como un examen de fin de curso. La medida del ¨¦xito o el fracaso. Tambi¨¦n es la vara con la que el mundo mide el desempe?o medioambiental del pa¨ªs que alberga el grueso del mayor bosque tropical del mundo. Este a?o, la nota es un clamoroso suspenso.

El significativo aumento registrado por el sistema Prodes contribuir¨¢ a agravar la crisis clim¨¢tica adem¨¢s de ser un problema diplom¨¢tico para el presidente brasile?o. La acelerada desaparici¨®n de la vegetaci¨®n en Amazonia supone una amenaza para el futuro de Brasil y el planeta porque, a medida que la superficie arbolada de Amazonia disminuye de tama?o, la selva pierde, adem¨¢s de biodiversidad, la capacidad de refrescar el planeta y frenar el calentamiento global. El sistema Prodes contabiliza ¨¢reas deforestadas de m¨¢s de 6,25 hect¨¢reas, lo que lo convierte en el m¨¢s preciso de los que Brasil utiliza.

El balance se ha conocido cuando el Gobierno ha colgado en la web, sin anuncio ni presentaci¨®n, una nota. El comunicado estaba datado no este jueves sino el pasado 27 de octubre, antes, por tanto, de que empezara la cumbre del clima COP26 en Glasgow. ONGs ecologistas y cient¨ªficos han acusado al Ejecutivo y al ministro de Medio Ambiente, Joaquim Leite, de haber ocultado la informaci¨®n de la que dispon¨ªan durante las negociaciones en las que Brasil se comprometi¨® a eliminar completamente la deforestaci¨®n para 2028, dos a?os antes de lo previsto. Tambi¨¦n acusan a las autoridades brasile?as de haber enga?ado al resto de los participantes en la cumbre al presentar los resultados de otra medici¨®n, la de las alertas del sistema Deter, que es menos precisa y arrojaba datos mucho m¨¢s positivos.

El Observatorio del Clima, una ONG brasile?a, sostiene que esos 13.235 kil¨®metros cuadrados ilegalmente deforestados en un a?o revelan ¡°el triunfo del proyecto ecocida de Bolsonaro¡±. Para Greenpeace, ¡°el Gobierno intent¨® lavar su imagen en Glasgow a sabiendas de que hab¨ªa batido un r¨¦cord en deforestaci¨®n¡±. Esta organizaci¨®n ha advertido de que el cerco sobre Brasil se estrecha porque, por ejemplo, la Comisi¨®n Europea propuso este mi¨¦rcoles impedir la entrada en los mercados de la UE a la soja, el cacao, el caf¨¦, el aceite de palma, la carne de vacuno, la madera y sus derivados si proceden de zonas deforestadas.

La tala ilegal est¨¢ en aumento desde 2017 tras la fuerte ca¨ªda de los primeros a?os 2000, pero desde que el ultraderechista y negacionista de la ciencia lleg¨® al poder en 2019 el crecimiento de la superficie arrasada se ha acelerado, impulsado por varios factores. Su pol¨ªtica en materia de medio ambiente ha consistido en debilitar la vigilancia --cada vez hay menos inspectores ambientales en Amazonia-- adem¨¢s de dar alas a quienes explotan la selva sorteando las leyes. Ech¨® de sus puestos a veteranos ambientalistas para sustituirlos por polic¨ªas militares al frente de los organismos encargados de la protecci¨®n del medio ambiente, los ind¨ªgenas y la biodiversidad.

El presidente ha cumplido sus promesas de no demarcar un solo cent¨ªmetro m¨¢s de reservas ecol¨®gicas o tierras ind¨ªgenas y el Congreso tramita un proyecto de ley para legalizar la miner¨ªa en tierras que ahora son legalmente intocables para la explotaci¨®n comercial.

La imposici¨®n de multas por delitos contra el medio ambiente se ha desplomado en los ¨²ltimos a?os. Las medidas que ha ido adoptando el Gobierno, ante las presiones de otros pa¨ªses, los inversores y las ONG, no han reducido la deforestaci¨®n ilegal ni mejorado demasiado su imagen en el extranjero. Brasil ha pasao de alumno ejemplar a villano ambiental en pocos a?os. El despliegue de miles de soldados fue caro e ineficaz para frenar el aumento de la deforestaci¨®n como indica el balance.

El ministro de Medio Ambiente sostiene que los n¨²meros conocidos este jueves ¡°no reflejan la actuaci¨®n gubernamental de los ¨²ltimos meses¡± con el despliegue, por ejemplo, de centenares miembros de la Guardia Nacional. El Gobierno Bolsonaro insiste en proclamar que no tolerar¨¢ ilegalidades en la Amazonia pero lo cierto es que basta ir hasta all¨ª para ser testigo de la velocidad a la que avanzan la deforestaci¨®n, la ocupaci¨®n de tierras con ganado, las invasiones de mineros ilegales en tierras ind¨ªgenas, etc¨¦tera.

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