El milagro econ¨®mico que seca el pantano de La Vi?uela
Mientras el embalse del que bebe la Axarqu¨ªa malague?a se muere, una investigaci¨®n del Seprona ha destapado el uso masivo e irregular de agua en los cultivos tropicales de aguacate y mango
El pantano de La Vi?uela, en M¨¢laga, est¨¢ moribundo. Con 16 hect¨®metros c¨²bicos de agua, se encuentra por debajo ya del 10% de su capacidad, la mitad que en 2022 a estas alturas de a?o. ¡°Est¨¢ peor que nunca¡±, advierte Gregorio Campos, vicepresidente de la empresa p¨²blica de Aguas y Saneamiento de la comarca de la Axarqu¨ªa ¡ªAxaragua¡ª, que gestiona un recurso del que dependen 15 municipios y unas 200.000 personas. El entorno del embalse es la pura imagen de la sequ¨ªa. Entre la retama seca, dos viejos hidropedales con el pl¨¢stico cuarteado descansan junto a un pantal¨¢n de madera, a decenas de metros de distancia de lo poco que queda de agua. Parece una broma pesada, pero es una realidad que hace temer que nada salga del grifo de los hogares a medio plazo en esta comarca.
A corto plazo, el foco est¨¢ puesto en la agricultura subtropical. M¨¢laga produce la mitad del aguacate y el 80% del mango en Espa?a, el pa¨ªs que lidera la producci¨®n europea de estos cultivos. Un milagro econ¨®mico que se ha basado, en buena parte, en el agotamiento de las reservas h¨ªdricas locales por su uso desmesurado de este recurso. Y tambi¨¦n en ocasiones irregular, como ha demostrado una operaci¨®n de la Guardia Civil, que ha detenido a 26 personas e investigado a otras 44 por riegos ilegales ante el riesgo de colapso h¨ªdrico, seg¨²n inform¨® a principios de mayo el Servicio de Protecci¨®n de la Naturaleza (Seprona).
Las frutas subtropicales han revolucionado la Axarqu¨ªa malague?a en poco tiempo. Llegaron en los a?os sesenta a modo de prueba. Su buena adaptaci¨®n y, sobre todo, su alta rentabilidad, dispararon su crecimiento. De las cerca de 4.000 hect¨¢reas de aguacate que hab¨ªa a principios de los noventa se ha pasado a unas 8.000 en la actualidad. A ellas se suman 4.300 de mango y un millar de otras variedades como chirimoya o n¨ªspero. La demanda ha sido tan grande que hace una d¨¦cada la lista de espera para adquirir plantones superaba el a?o. ¡°Quiz¨¢ nos hemos pasado, pero la mayor¨ªa son minifundios que han permitido subsistir a la comarca¡±, explicaba Jos¨¦ Campos, presidente de la junta central de usuarios del Sur del Guaro, a EL PA?S ya en 2021.
Esta nueva agricultura ha generado puestos de trabajo ¡ªcon cifras cercanas al pleno empleo en la comarca¡ª y una riqueza que hace olvidar las penurias de la tradicional pasa, el olivo de monta?a o los almendros de secano. Hoy la facturaci¨®n del sector se acerca a los 200 millones de euros. Mueve tanto dinero que los robos de fruta son habituales y en una de las operaciones policiales m¨¢s sonadas en la zona, que acab¨® el a?o pasado con 82 detenidos por una supuesta trama que defraudaba a Hacienda, se hallaron 1,7 millones de euros en efectivo, la mayor¨ªa escondidos en archivadores y bajo muebles de una empresa local.
Los suaves veranos e inviernos del clima son ideales para estas especies frutales. ¡°El problema es que requieren mucha m¨¢s agua de la que dispone la zona¡±, denuncia Rafael Yus, de Ecologistas en Acci¨®n. La lluvia, de hecho, se mantiene m¨¢s o menos estable desde hace 60 a?os, con unos 437 litros por metro cuadrado anual de media, seg¨²n los datos facilitados por la Agencia Estatal de Meteorolog¨ªa (Aemet), que reflejan que 2022 fue un mal a?o, con 342 litros en la estaci¨®n meteorol¨®gica de Algarrobo.
A pocos kil¨®metros de all¨ª, el pantano de La Vi?uela se seca por la falta de lluvias, las p¨¦rdidas debido a las malas infraestructuras hidr¨¢ulicas y por todo ese crecimiento de la agricultura de frutos tropicales. Pero el director de la Aemet en M¨¢laga, Jes¨²s Riesco, dejaba caer el verano pasado que podr¨ªa haber m¨¢s ¡°factores no meteorol¨®gicos de peso importante¡± para que ello ocurriera. El Seprona ha puesto cifras esta semana a buena parte del problema. Por un lado, de las 340 hect¨¢reas investigadas en la reciente operaci¨®n policial, 240 se riegan con recursos extra¨ªdos de manera irregular. Por otro, de los 300 pozos incluidos en esa extensi¨®n, 250 son ilegales. En total, se estima que se han defraudado casi 26 hect¨®metros c¨²bicos. ¡°Ha habido un crecimiento descontrolado de los cultivos subtropicales y nadie ha vigilado qu¨¦ se hac¨ªa con el agua¡±, insiste Yus, que llevaba a?os alertando de que algo no cuadraba. Y esto ha afectado a los acu¨ªferos subterr¨¢neos y al pantano.
Tensi¨®n en el campo
La reciente operaci¨®n de la Guardia Civil ha generado tensi¨®n en la comarca y en el campo ahora pocos quieren hablar. Algunos aseguran que el silencio ha sido recomendado por sus abogados. La investigaci¨®n ha llegado a apuntar a 180 agricultores, aunque la fiscal¨ªa de Medio Ambiente pidi¨® focalizar el trabajo en los principales responsables, de ah¨ª que se haya detenido solo a 26 personas e investigado a otras 44. Los primeros son los que presuntamente m¨¢s beneficios han obtenido y m¨¢s p¨¦rdidas han causado al dominio p¨²blico hidr¨¢ulico, ¡°y su delito es m¨¢s grave¡±, detallan fuentes de la Guardia Civil. Los segundos, los que menos. Se estima que entre todos han causado da?os valorados en 10 millones de euros, tres de ellos a causa de las derivaciones ilegales por comunidades de regantes, que incluso se sospecha revend¨ªan el agua que compraban barata procedente de La Vi?uela. El precio del metro c¨²bico, entre cuatro y cinco c¨¦ntimos, ha facilitado la situaci¨®n. Y aunque desde el embalse solo se pod¨ªa utilizar para regar fincas ubicadas hasta los 140 metros respecto al nivel de mar, tambi¨¦n ha llegado a cotas m¨¢s altas incluso para irrigar en exceso otros cultivos como el olivar, seg¨²n fuentes del sector.
El Seprona, que bautiz¨® la operaci¨®n como Chaak por el dios maya de la lluvia, arranc¨® la investigaci¨®n en 2018. La denuncia parti¨® de agricultores que se sorprend¨ªan de que sus aguacates se quedaran peque?os por la sequ¨ªa mientras los de sus vecinos eran de un calibre tres o cuatro veces mayor y, por tanto, los pod¨ªan vender m¨¢s caros. ¡°Los regantes legales apenas ten¨ªan agua y los ilegales toda la que quer¨ªan¡±, revelan desde el instituto armado, donde a?aden que la mayor¨ªa de casos irregulares forman parte de comunidades de regantes, a quienes el Juzgado de Instrucci¨®n 1 de V¨¦lez-M¨¢laga ya ha pedido que cesen las extracciones. Mientras, quienes han cumplido las normas han visto como la cuota h¨ªdrica procedente de La Vi?uela a la que ten¨ªan derecho se ha ido reduciendo en los ¨²ltimos a?os. De 4.000 metros c¨²bicos por hect¨¢rea se pas¨® a 3.000, 2.000, 1.500... Y desde octubre pasado, a cero.
Hoy hay agricultores comprando cubas de agua para mantener vivos sus ¨¢rboles, otros los han podado y encalado para que soporten mejor la sequ¨ªa aunque no produzcan, y algunos han decidido talarlos para dedicarse a otro cultivo. ¡°El d¨¦ficit h¨ªdrico es estructural¡±, reconocen desde la Asociaci¨®n Espa?ola de Tropicales.
La escasa agua que pueden utilizar ahora es regenerada de las depuradoras de V¨¦lez-M¨¢laga, Torrox y Algarrobo. La Junta de Andaluc¨ªa espera que a principios de verano puedan sumarse la de Rinc¨®n de la Victoria y la del Pe?¨®n del Cuervo, al este de la capital malague?a. Supondr¨¢n 14 hect¨®metros c¨²bicos anuales m¨¢s tras una inversi¨®n de 47 millones de euros. El Consejo de Ministros extraordinario de este jueves sirvi¨® para conocer que el Gobierno asumir¨¢ el coste de una desaladora en la zona, que estar¨¢ lista para 2026 o 2027. Un mundo en t¨¦rminos de sequ¨ªa, por eso la Administraci¨®n andaluza estudia ya otros recursos subterr¨¢neos porque su principal preocupaci¨®n es el consumo humano. A la Axarqu¨ªa llegan desde hace un a?o 250 litros por segundo trasvasados desde el pantano Conde del Guadalhorce (al norte de la provincia) y otros 50 de un pozo del esquilmado r¨ªo Ch¨ªllar, en Nerja. Otros 200 proceden del pantano de La Vi?uela, cuyas reservan disminuyen ahora un hect¨®metro al mes, que pronto ser¨¢ el doble por el turismo y la evaporaci¨®n. Se espera que el embalse sobreviva, al menos, hasta despu¨¦s del verano.
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