La Fiscal¨ªa de Medio Ambiente critica la ¡°confusi¨®n¡± creada con los perros peligrosos en la ley de bienestar animal

La tormentosa tramitaci¨®n de la Ley de Protecci¨®n de los Derechos y el Bienestar de los Animales tuvo un ¨²ltimo giro de guion con los llamados hasta ahora perros potencialmente peligrosos, ocho razas que la normativa vigente considera que por sus caracter¨ªsticas f¨ªsicas pueden ¡°causar la muerte o lesiones¡±. Los borradores de la ley de bienestar animal, que entr¨® en vigor el 29 de septiembre, contemplaban la eliminaci¨®n de ese listado de razas, que ser¨ªa sustituido por test de sociabilidad que permitieran analizar y clasificar a cada animal de forma individual y no de forma indiscriminada. Pero en el ¨²ltimo momento de la tramitaci¨®n ese cambio se elimin¨®.

Estos vaivenes han generado desconcierto, y no solo entre los due?os de estos perros, que deber¨¢n seguir llev¨¢ndolos siempre con bozal ¡ªincluso en parques caninos¡ª y con correa corta, adem¨¢s de contar con un seguro obligatorio y una licencia. Hasta el ¨¢rea de medio ambiente de la Fiscal¨ªa General del Estado han llegado consultas verbales y por escrito de las polic¨ªas locales de algunos municipios y de fiscales especializados en estos temas sobre la forma en la que deben actuar tras la entrada en vigor de la ley hace algo m¨¢s de dos semanas.

Para intentar aclarar la situaci¨®n actual, Antonio Vercher, el fiscal coordinador de Medio Ambiente y Urbanismo, acaba de mandar un escrito al resto de fiscales y las fuerzas de seguridad en el que desliza una cr¨ªtica por ¡°la situaci¨®n de inestabilidad¡± creada con la norma. Porque, mientras se aprobaba la ley en marzo, el Ministerio de Derechos Sociales asegur¨® que en el futuro reglamento de desarrollo de la norma s¨ª se eliminar¨¢ el listado de razas potencialmente peligrosas para sustituirlo por esas pruebas de sociabilidad. Ante la ¡°cierta confusi¨®n¡± generada, el ¨¢rea que dirige Vercher ha elaborado un escrito para ¡°clarificar¡± las dudas que le han llegado.

El fiscal coordinador de medio ambiente, tras repasar la normativa vigente sobre perros potencialmente peligrosos, pide a los representantes del ministerio p¨²blico que procedan ¡°tal y como se ha venido haciendo¡± desde enero de 2015, cuando Vercher difundi¨® unas instrucciones que supusieron un cambio en la forma de afrontar los ataques de este tipo de canes a otros animales y a seres humanos.

Hasta ese momento, los fiscales sol¨ªan considerar como una falta los ataques cuando los perros potencialmente peligrosos no fueran debidamente atados. Pero, a partir de 2015, se empez¨® a considerar como un delito por el ministerio p¨²blico, lo que podr¨ªa acarrear penas de entre uno y dos meses de c¨¢rcel para los due?os. En su momento, Vercher justific¨® ese cambio en el aumento de este tipo de ataques en Espa?a.

Ese futuro reglamento que desarrollar¨¢ la ley y que eliminar¨¢ la clasificaci¨®n de las razas potencialmente peligrosas est¨¢ parado a la espera de que se forme el nuevo Gobierno. Y todo depender¨¢ del equipo que finalmente se encuentre al frente de la Direcci¨®n General de Derechos de los Animales, que hasta ahora ha estado en el Ministerio de Derechos Sociales, es decir, en manos de Unidas Podemos.

El director general actual, Sergio Garc¨ªa Torres, sostiene que el listado de razas peligrosas se modificar¨¢ cuando se d¨¦ el visto bueno al reglamento, porque la actual legislaci¨®n supone una estigmatizaci¨®n de determinados canes, a pesar de que no existe una base cient¨ªfica para asociar ciertas razas caninas con agresividad. Lo que s¨ª aparecen son individuos violentos que pueden pertenecer a cualquier tipo de raza, aunque esta no se encuentre dentro de las consideradas peligrosas.

Test de sociabilidad

Los veterinarios y profesionales del sector est¨¢n de acuerdo con estas consideraciones por ser justas para los perros. Pero, el problema, apuntan, es que una vez que se elimine la clasificaci¨®n, es necesario determinar qu¨¦ individuos son los conflictivos, y en qu¨¦ va a consistir el test de sociabilidad que se propon¨ªa en el anteproyecto. Todo ello, en medio del miedo que generan estos animales. Hay muchas personas que se cruzan de acera cuando los ven acercarse, a pesar de que porten el bozal y la correa reglamentaria.

En su escrito, Vercher considera ¡°planteamientos muy loables, harto positivos¡± y provistos de ¡°l¨®gica y sentido com¨²n¡± los argumentos en favor de desestigmatizar determinadas razas independientemente de su comportamiento. Sin embargo, a?ade el fiscal, ¡°el problema reside en los duros resultados pr¨¢cticos que finalmente se pueden producir¡± cuando se produce un ataque a otro perro o a un ser humano.

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