Entra en vigor la ley de bienestar animal, la norma que nace a medias
El texto vivi¨® una pol¨¦mica tramitaci¨®n parlamentaria que ha dejado fuera a perros de caza y peligrosos y sigue a la espera de un reglamento que la desarrolle
La ley de bienestar animal que entra en vigor este viernes es muy distinta del proyecto que se plante¨® al inicio de la pasada legislatura. Aquel primer anteproyecto inclu¨ªa medidas como la esterilizaci¨®n obligatoria de todos los perros ¡ªsalvo los de criadores¡ª, la protecci¨®n tambi¨¦n de los canes de caza y la eliminaci¨®n de la lista de razas potencialmente peligrosas, que se han quedado por el camino en medio de una bronca pol¨ªtica considerable entre PSOE y Unidas Podemos, socios de Gobierno, que a punto estuvo de hacer caer el texto. Adem¨¢s, numerosos profesionales y colectivos criticaron aquella normativa e impulsaron enmiendas para modificar la ley, que se estrena a medias a falta de un reglamento que la desarrolle. ¡°Me hubiera gustado que fuese m¨¢s ambiciosa, pero estamos en la situaci¨®n que estamos y todos los partidos quisieron aportar sus medidas. Hay que seguir trabajando para mejorarla en el futuro¡±, explica el director general de los Derechos de los Animales, Sergio Garc¨ªa Torres.
La norma, considerada estrat¨¦gica por el Ministerio de Derechos Sociales de Unidas Podemos, arranc¨® con un anteproyecto que sali¨® a informaci¨®n p¨²blica en octubre de 2021. Ya entonces se vio que iba a generar grandes fricciones: recibi¨® unas 6.000 alegaciones y soliviant¨® a cazadores, bi¨®logos y veterinarios, entre otros sectores. La Real Federaci¨®n Espa?ola de Caza (RFEC), la m¨¢s cr¨ªtica con la iniciativa, exigi¨® la retirada del texto porque ¡°imposibilitar¨ªa la caza¡±, generar¨ªa ¡°inseguridad jur¨ªdica¡± y afectar¨ªa a ¡°la cetrer¨ªa y la caza con hur¨®n, o con perro¡±. Desde la Direcci¨®n General de Derechos de los Animales, en cambio, respondieron que la actividad cineg¨¦tica quedaba fuera de esta reglamentaci¨®n; adem¨¢s, se?alaron que el 80% de las alegaciones ped¨ªan m¨¢s ambici¨®n, ya que dejaba fuera la tauromaquia ¡ªdependiente de Cultura¡ª y los animales de producci¨®n ¡ªregulados por Agricultura¡ª.
El enfrentamiento entre cazadores y animalistas fue subiendo de nivel. De hecho, la RFEC lleg¨® a publicar un v¨ªdeo en el que aparec¨ªa la cara del director de Derechos de los Animales en la mirilla de un rifle. Unos meses despu¨¦s, en marzo de 2022, decenas de miles de cazadores realizaron una gran manifestaci¨®n en Madrid para protestar contra la ley, entre otras reivindicaciones.
El PSOE entr¨® en p¨¢nico ante la perspectiva de perder el voto rural en las elecciones locales y auton¨®micas de 2023 y, en septiembre de 2022, sorprendi¨® con una moci¨®n que planteaba sacar de la norma a los perros de caza y a los de uso profesional, como el pastoreo. En medio de otras pol¨¦micas, como las rebajas de penas a violadores por la ley del solo s¨ª es s¨ª o la bronca por la ley trans, el partido mayoritario del Gobierno de coalici¨®n consider¨® irrenunciable esta modificaci¨®n (apoyada por PP y Vox). El pulso se mantuvo durante seis meses entre acusaciones de una y otra parte, y a punto estuvo de hacer decaer la ley, pero al final Unidas Podemos tuvo que tragarse ese sapo para aprobar una de sus normas estrellas.
Los defensores de los animales consideran que esa renuncia deja desprotegidos precisamente a los perros m¨¢s vulnerables. ¡°Hay una discriminaci¨®n de facto de algunos animales por la presi¨®n del lobby de la caza¡±, resume Jos¨¦ Luis Mac¨ªas, de la Asociaci¨®n Espa?ola de Protectoras y Santuarios de Animales (Iberanimal). Estas entidades recogen cada a?o unos 20.000 perros de caza abandonados, seg¨²n la Fundaci¨®n Affinity. Manuel Gallardo, presidente de la RFEC, responde: ¡°Todos los perros, incluidos los de caza, ya estaban protegidos por el C¨®digo Penal y por m¨¢s de 80 normas entre legislaci¨®n estatal y auton¨®mica. Adem¨¢s, est¨¢n identificados con una cartilla sanitaria y microchip. La ley animalista quiere acabar con el mundo rural y con la caza¡±. Es cierto que el maltrato ya estaba castigado por el C¨®digo Penal ¡ªmodificado este a?o¡ª, pero la norma va m¨¢s all¨¢ y sanciona tambi¨¦n conductas m¨¢s leves, como un perro sin supervisi¨®n m¨¢s de un d¨ªa, que hasta ahora eran dif¨ªciles de sancionar.
Otras modificaciones
Aunque los perros de caza monopolizaron la pol¨¦mica, no es el ¨²nico cambio de calado en la norma. En sus inicios, contemplaba la castraci¨®n obligatoria de canes y gatos, salvo aquellos cuyos due?os se inscribieran en un futuro registro estatal de criadores, como una forma de luchar con los casi 300.000 abandonos anuales de estos animales. Cazadores y la Real Sociedad Canina de Espa?a (RSCE) protestaron y, al final, esa imposici¨®n solo se mantiene para los felinos. En cualquier caso, se hace hincapi¨¦ en que todos los animales ¡ªperros, gatos, p¨¢jaros, roedores, reptiles¡ª deben estar registrados.
Otra idea que se qued¨® por el camino fue la derogaci¨®n de la lista de perros potencialmente peligrosos, que en la actualidad incluye ocho razas ¡ªcomo pitbull, rottweiler y dogo argentino¡ª que deben estar siempre con bozal y correa corta. ¡°La ley quer¨ªa sustituir esa lista, que es injusta, por un test de sociabilidad, porque lo peligroso no son las razas, sino individuos sin sociabilizar¡±, apunta Jos¨¦ Miguel Doval, presidente de la RSCE. Se trata de una prueba de valoraci¨®n para saber si los animales pueden comportarse en sociedad y con otros ejemplares. La ley s¨ª ha cambiado el nombre de estos perros, que ahora pasan a llamarse de manejo especial, y deja abierta la puerta a que, cuando se apruebe el futuro reglamento, se pueda pasar un test para relajar las condiciones de su manejo.
La falta de ese reglamento, que al tener forma de decreto no puede aprobarse hasta que no haya nuevo Gobierno, hace que la normativa entre en vigor a medio gas. Para m¨¢s adelante quedan, por tanto, futuras obligaciones que todav¨ªa no pueden aplicarse, como el seguro de responsabilidad civil para todos los perros ¡ªcomo ya ocurre en Madrid y el Pa¨ªs Vasco¡ª, un curso para todos los due?os de mascotas, y el registro de todos los animales ¡ªtambi¨¦n p¨¢jaros y roedores¡ª y criadores en varios registros estatales.
Otro problema ha sido la gran cantidad de bulos que se han vertido respecto a la norma. ¡°La ley se ha visto perjudicada por un entorno pol¨ªtico y medi¨¢tico que no ha sido favorable, se ha tergiversado y se han vertido muchas mentiras sobre ella, y eso que algunos partidos que la criticaban han hecho lo mismo en sus leyes auton¨®micas¡±, se?ala Doval. Muchos de estos bulos ten¨ªan que ver con el futuro listado positivo, los animales que podr¨¢n comprarse y adoptarse en Espa?a. La frase ¡°Adi¨®s al h¨¢mster, la tortuga y el periquito¡± se extendi¨® por televisiones y redes sociales. Aunque ese listado est¨¢ por elaborar, la mayor¨ªa de los animales dom¨¦sticos seguir¨¢n como hasta ahora: se dejan fuera los animales peligrosos o venenosos, mam¨ªferos silvestres de m¨¢s de cinco kilos y reptiles (excepto tortugas) de m¨¢s de dos kilos, como grandes serpientes o iguanas.
En cuanto a las colonias felinas, ahora tienen que gestionarlas los ayuntamientos con el m¨¦todo CER (captura, esterilizaci¨®n y retorno), que supondr¨¢ capturar a esos felinos, identificarlos con microchip y volverlos a soltar. Los bi¨®logos denunciaron que los gatos son un problema para la biodiversidad en algunos entornos, sobre todo en las islas, y m¨¢s de 800 cient¨ªficos firmaron una carta contra la norma en EL PA?S. Por eso, ahora incorpora que los gatos capturados se puedan reubicar cuando supongan un problema para otras especies amenazadas.
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