Grethel Aguilar, directora general de la UICN: ¡°El estado de la naturaleza es cr¨ªtico¡±

Grethel Aguilar (San Jos¨¦, Costa Rica, 55 a?os) se convirti¨® la semana pasada en la nueva directora general de la Uni¨®n Internacional para la Conservaci¨®n de la Naturaleza (UICN). Creada en 1948, se trata de la red ambiental m¨¢s grande del planeta. Con sus evaluaciones, como la lista roja de especies en peligro de extinci¨®n, es el referente mundial del estado de conservaci¨®n de la naturaleza en la Tierra. Grethel, que cuenta con una experiencia en la conservaci¨®n y el desarrollo sostenible de m¨¢s de tres d¨¦cadas, atiende por videoconferencia a EL PA?S desde la ciudad suiza de Gland, donde est¨¢ la sede central de su organizaci¨®n.

Pregunta. ?Cu¨¢l es el papel de la UICN?

Respuesta. La UICN es la red mundial m¨¢s antigua y grande del mundo. Somos 1.500 miembros, entre gobiernos nacionales, organizaciones no gubernamentales, pueblos ind¨ªgenas y gobiernos subnacionales. Espa?a, donde tenemos 43 miembros de diferentes organizaciones, forma parte de la UICN. Adem¨¢s, tenemos 16.000 expertos por el mundo en siete comisiones. Lo m¨¢s importante de nuestra labor es la visi¨®n que tenemos de un mundo justo y equitativo que conserve la naturaleza para el bienestar de las personas y el planeta. Nuestra misi¨®n es influir en los gobiernos y en la sociedad para que se haga una conservaci¨®n y uso adecuado de los recursos naturales. Al mismo tiempo, trabajamos en producir conocimiento. Tambi¨¦n intentamos que las actividades del sector privado sean m¨¢s positivas con el medioambiente.

P. ?C¨®mo calificar¨ªa el estado de conservaci¨®n de la naturaleza en el planeta ahora?

R. Muy lamentablemente el estado de la naturaleza es cr¨ªtico. Estamos viviendo una crisis de p¨¦rdida de biodiversidad alarmante, de p¨¦rdida de especies, pero tambi¨¦n estamos inmersos en una crisis clim¨¢tica que no necesita mucha explicaci¨®n. Los seres humanos estamos viviendo sus impactos en forma de huracanes o sequ¨ªas, con repercusiones en nuestros cultivos y en la vida diaria. El planeta est¨¢ en el pico de su crisis ambiental y tenemos que actuar para cambiar el rumbo. Si no lo hacemos, peligra nuestra propia supervivencia. Pero, al mismo tiempo, tengo una gran confianza en que estamos a tiempo para darle una vuelta a esta situaci¨®n.

P. ?Qu¨¦ grupo de especies est¨¢ m¨¢s amenazado?

R. Hemos evaluado 150.388 especies de momento y una cuarta parte est¨¢n amenazadas de extinci¨®n. Las especies se pierden porque perdemos calidad en los sistemas. Hay especies que no pueden sobrevivir porque hemos destruido su h¨¢bitat. Y no hay que olvidar que nosotros somos una de esas especies. Por poner un ejemplo concreto, m¨¢s de 1.550 especies marinas evaluadas en nuestra lista roja est¨¢n amenazadas de extinci¨®n por la pesca ilegal o no sostenible. Esto incluye, por ejemplo, las poblaciones de dugongos en ?frica Oriental, en peligro cr¨ªtico de extinci¨®n, o la vaquita marina en M¨¦xico.

P. ?Cu¨¢l es el problema?

R. C¨®mo nos relacionamos con esas especies. Nos beneficiamos de los oc¨¦anos no solo para recrearnos con su belleza, tambi¨¦n para alimentarnos, y eso es algo que el ser humano no quiere perder. Pero si lo hacemos con pesca ilegal y no sostenible, si seguimos tirando el pl¨¢stico a los oc¨¦anos, nuestro destino ser¨¢ comer pl¨¢stico. Y eso tiene que parar, porque queremos un planeta saludable que nos sostenga.

P. ?Considera usted que es correcto hablar de que el planeta est¨¢ inmerso en la sexta gran extinci¨®n?

R. Yo no me atrevo ¡ªporque no soy cient¨ªfica¡ª a decir si eso es correcto o no, pero lo que s¨ª puedo afirmar es que estamos ante una gran extinci¨®n. No solo en cuanto a la extinci¨®n de especies, sino tambi¨¦n de la calidad de nuestros suelos, que es lo que nos permite mantener una dieta saludable. Los sistemas alimentarios no responsables ocasionan m¨¢s de un tercio de las emisiones de gases de efecto invernadero y hasta un 80% de la p¨¦rdida de biodiversidad. Debemos consumir productos de una agricultura sostenible, que van a permitir la vida en la Tierra no solo a los que estamos, sino a los que vienen. Pero tratamos nuestros suelos de una manera indiscriminada, como si el planeta no tuviera l¨ªmites. Lo mismo se puede decir del agua. Ya hay muchas poblaciones en el mundo que est¨¢n sufriendo su escasez. Muchos de estos efectos tienen que ver con el impacto del cambio clim¨¢tico, pero tambi¨¦n con la acci¨®n del ser humano sobre los ecosistemas; si arrasamos con nuestros bosques, dif¨ªcilmente podemos tener agua.

P. ?La lucha contra el cambio clim¨¢tico oculta en ocasiones la crisis de p¨¦rdida biodiversidad?

R. Creo que tenemos que hablar de una sola crisis, la del planeta, que es de biodiversidad y clim¨¢tica. La manera m¨¢s acertada de poder enfrentar los retos actuales es dejando de separarlas. Los efectos del cambio clim¨¢tico en la biodiversidad son visibles y nuestras acciones como seres humanos cuentan para la biodiversidad y para el cambio clim¨¢tico. Si separamos esas dos cosas, perdemos todo. Y esa es una de las posiciones que la UICN lleva a la COP28 [la cumbre anual del clima de la ONU, que se celebra dentro de un mes en Dub¨¢i]. Por primera vez, la UICN lleva una posici¨®n muy fuerte y clara a una COP: la eliminaci¨®n gradual y limitada en el tiempo de todos los combustibles f¨®siles, incluyendo el petr¨®leo y el gas, dentro de un marco que garantice una transici¨®n justa. No hay tiempo ya para largos discursos y nada de acci¨®n.

P. ?Cree que puede salir de esa cumbre un compromiso as¨ª en estos momentos?

R. Quiero seguir teniendo la visi¨®n de que todo es posible, pero los tomadores de decisiones tienen que llevar posiciones contundentes. Deben entender que no se trata solo de consumir a costa de todo, sino de poder hacer un uso sostenible de nuestros recursos para no poner m¨¢s en peligro este planeta.

P. La UICN est¨¢ estudiando la gesti¨®n en el parque de Do?ana y existe el riesgo de que salga de la lista verde de su organizaci¨®n. ?Ha tomado ya una decisi¨®n?

R. Do?ana es un sitio maravilloso y uno de los lugares emblem¨¢ticos del mundo. La UICN est¨¢ realizando en este momento una evaluaci¨®n independiente e informaremos de la decisi¨®n final sobre el estatus del parque una vez que todas las partes interesadas hayan sido informadas. Estamos atendiendo una objeci¨®n presentada por el parque nacional, porque el grupo de expertos decidi¨® no conceder la certificaci¨®n de la lista verde al parque. Y ahora estamos analizando si esa evaluaci¨®n es correcta o no. Tenemos como meta comunicar la decisi¨®n para finales de noviembre.

P. ?Le llega el ciudadano el mensaje de lo terrible que es la perdida de la biodiversidad y lo que le afecta?

R. La gente a veces piensa que trabajar en conservaci¨®n de recursos naturales es salvar especies, sobre todo, las que nos encantan y ense?amos a nuestros hijos: los osos, los elefantes, los linces... Pero la conservaci¨®n de la biodiversidad tiene que ver con nuestra vida diaria. Por ejemplo, sin tierras saludables no podemos alimentarnos y, si nuestro aire est¨¢ contaminado, tampoco lo podemos respirar. Pero quiz¨¢ nosotros necesitamos comunicar mejor a la poblaci¨®n todo lo que est¨¢ ocurriendo, hacerlo m¨¢s sencillo, porque un planeta sano es b¨¢sico para nuestra existencia.

P. Usted ha trabajado durante mucho tiempo con los pueblos ind¨ªgenas. ?Cree que en ocasiones se les ha ignorado en la conservaci¨®n de la naturaleza?

R. Hemos perdido la oportunidad de aprender m¨¢s de ellos. Los hemos invisibilizado durante muchos a?os y tienen much¨ªsimo que aportar desde su conocimiento tradicional y el actual. No es una casualidad que est¨¦n ubicados donde tenemos las mayores riquezas en t¨¦rminos de biodiversidad, eso es porque la han protegido. Pero no hemos querido aprender su forma de entender la naturaleza, mucho m¨¢s avanzada que la que muchos de nosotros tenemos. Hemos confundido su forma de vida con la pobreza. Pero ellos tienen una vida mucho m¨¢s conectada con la naturaleza y mucho m¨¢s respetuosa con ella.

P. Parece un primer y un segundo mundo.

R. Si, pero a veces hay que cuestionarse cu¨¢l es el primer y cu¨¢l es el segundo mundo. Ad¨®nde va el primero y ad¨®nde el segundo. No quiero decir que ellos no tengan sus retos, y tampoco hay que idealizarlo. Ellos tambi¨¦n necesitan apoyo financiero, pero tienen simplemente una manera de visualizar el planeta muy diferente y de la que tenemos mucho que aprender.

Puedes seguir a CLIMA Y MEDIO AMBIENTE en Facebook y X, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal