Magistral Diego Ventura
Puerta grande con todo merecimiento para el rejoneador, que sale a hombros de Las Ventas acompa?ado de Leonardo Hern¨¢ndez
Las cosas como son: Diego Ventura volvi¨® a demostrar este s¨¢bado que es un consumado maestro del rejoneo. Abandon¨® por un d¨ªa sus espectacularidades circenses y se dedic¨® a torear a caballo, a templar, a mandar, y, en consecuencia, a encandilar a los tendidos con una calidad extraordinaria, con un dominio deslumbrante de las distintas suertes y con una innata capacidad para conectar con el p¨²blico. Su primero no vali¨® un duro (en realidad, toda la corrida fue una mansada sopor¨ªfera e insoportable), pero Ventura lo tore¨® como si estuviera en el patio de su casa: sereno, plet¨®rico y suficiente. M¨¢s codicioso el quinto, con el que explic¨® su alt¨ªsimo concepto del temple con may¨²sculas. Sali¨® por la puerta grande con todo merecimiento y se llev¨® dos pollos, regalo de la concurrencia.
Tassara / Vegas, Ventura, Hern¨¢ndez
Toros despuntados para rejoneo de Viuda de Flores Tassara, bien presentados, mans¨ªsimos y muy descastados.
Sergio Vegas: pinchazo y rej¨®n trasero (ovaci¨®n); tres pinchazos, rejonazo y un descabello (ovaci¨®n).
Diego Ventura: rej¨®n en lo alto (oreja); rej¨®n bajo y un descabello (oreja).
Leonardo Hern¨¢ndez: dos pinchazos y rejonazo (silencio); rej¨®n bajo (dos orejas).
Ventura y Hern¨¢ndez salieron a hombros por la puerta grande.
Plaza de las Ventas. 22 de mayo. D¨¦cimo s¨¦ptima corrida de la feria de San Isidro. Lleno.
Le acompa?¨® en el triunfo Leonardo Hern¨¢ndez, aupado ya a los primeros puestos del toreo a caballo por su ilusi¨®n y buenas maneras. Lo tuvo que hacer todo porque sus oponentes atendieron m¨¢s a los tendidos que a sus caballos. Muy voluntarioso con su primero, destac¨® en el sexto con las banderillas al quiebro a lomos de Verdi. Pero, tambi¨¦n, las cosas como son: no mereci¨® las dos orejas. Primero, porque fall¨® con los palos, y, segundo, porque no clav¨® correctamente el rej¨®n de muerte. Pero valgan sus errores por su enorme af¨¢n de triunfo.
No les pudo acompa?ar a hombros Sergio Vegas, un rejoneador que no est¨¢ en la ¨¦lite del escalaf¨®n. Pech¨® con un lote infame, y, a pesar de ello, templ¨® bien en su primero, y llam¨® la atenci¨®n al colocar tres banderillas al viol¨ªn tras un quiebro en el cuarto. Fall¨® a la hora de la muerte y su labor qued¨® desva¨ªda.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.