Los portugueses despiden a Saramago en Lisboa
Los restos mortales del Nobel de Literatura llegan procedentes de Lanzarote.- La capilla ardiente estar¨¢ abierta hasta ma?ana
El f¨¦retro con los restos mortales de Jos¨¦ Saramago ya est¨¢ en la Sala Noble del Ayuntamiento de Lisboa, donde se ha instalado la capilla ardiente, que permanecer¨¢ abierta al p¨²blico hasta la celebraci¨®n de una ceremonia civil, a las 11 de ma?ana, a la que asistir¨¢ la vicepresidenta Teresa Fern¨¢ndez de la Vega. Numerosos ciudadanos hacen cola frente al edificio municipal para dar su ¨²ltimo adi¨®s al premio Nobel de Literatura. Pueden verse claveles rojos en solapas y vestidos, s¨ªmbolo de la revoluci¨®n de abril de 1974. Dos grandes fotograf¨ªas del escritor con la frase "Gracias, Saramago" cuelgan en la fachada del Ayuntamiento de la capital lisboeta. El f¨¦retro cubierto con la bandera portuguesa ha llegado el edificio municipal a las 15.30, en medio de aplausos y v¨ªtores de los asistentes. Entre las coronas recibidas se pod¨ªan ver las dos enviadas por Ra¨²l y Fidel Castro.
El alcalde, Ant¨®nio Costa, ha recibido a la comitiva procedente del aeropuerto, en la que viajaban familiares, amigos y algunos dirigentes pol¨ªticos, como las ministras de Cultura de Espa?a, ?ngeles Gonz¨¢lez-Sinde, que ha viajado desde Madrid, y de Portugal, Gabriela Canavilhas, que ha volado desde Lanzarote. Al frente est¨¢ Pilar del R¨ªo, esposa del escritor. Tras la celebraci¨®n de una ceremonia a puerta cerrada, la casa de Gobierno de la ciudad ha abierto las puertas para recibir a los portugueses que quieren despedir a Saramago y formar en el libro de condolencias. Poco despu¨¦s ha llegado al Consistorio el primer ministo luso, Jos¨¦ S¨®crates.
Amigo y camarada
"Vengo a dar mi ¨²ltimo adi¨®s al amigo y camarada", dice un veterano militante del Partido Comunista, en el que milit¨® el novelista hasta su muerte. El l¨ªder de la organizaci¨®n, Jer¨®nimo de Sousa, ha sido uno de los primeros dirigentes pol¨ªticos en acudir al Ayuntamiento. "Nunca le¨ª ning¨²n libro suyo, pero lo admiraba como persona y como portugu¨¦s", comenta una mujer que est¨¢ en la plaza desde las 10 de la ma?ana.
El avi¨®n de la Fuerza A¨¦rea con los restos mortales procedente de Lanzarote ha aterrizado a las 14,30 en el aeropuerto internacional de Lisboa, donde ha sido recibido por numerosas figuras de la cultura y la pol¨ªtica, como Alice Vieira, Nuno J¨²dice, Manuel Gusm?o, Jos¨¦ Barata-Moura, R¨²ben de Carvalho y Jer¨®nimo de Sousa, secretario general del Partido Comunista Portugu¨¦s (PSP). El Gobierno ha estado representado por Rui Pereira, ministro de Administraci¨®n Interna. La comitiva ha recorrido las calles de la ciudad hasta el Ayuntamiento. En algunos balcones cuelgan pancartas con la misma frase Gracias, Saramago.
El cuerpo ser¨¢ incinerado ma?ana en el cementerio de S?o Jo?o, y las cenizas quedar¨¢n en Portugal por voluntad expresa del escritor, seg¨²n ha confirmado Jos¨¦ Sucena, administrador de la Fundaci¨®n Jos¨¦ Saramago. El escritor hab¨ªa expresado en una entrevista en 2008 el deseo de que sus cenizas permaneciesen debajo de una piedra en un jard¨ªn de Lanzarote, donde residi¨® autoexiliado desde 1993, pero posteriormente cambi¨® de opini¨®n.
La jerarqu¨ªa de la Iglesia Cat¨®lica, blanco de la pluma y la palabra de Saramago, ha emitido un comunicado de p¨¦same por la muerte del escritor, en el que no evita una clara referencia al anticlericalismo del premio Nobel. El Secretariado Nacional de la Pastoral de Cultura lamenta que "la aproximaci¨®n" del escritor a la religi¨®n "no estuviera m¨¢s desprendida de posicionamientos ideol¨®gicos".
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.