La vida no es bella
'El invisible', novela del escritor chino Ge Fei, muy conocido en su pa¨ªs, es una lectura fascinante
Cui (nunca sabremos su nombre de pila) tiene 48 a?os y malvive preparando sistemas de reproducci¨®n de m¨²sica para audi¨®filos: su ¨²nico amigo (de la infancia, ahora un empresario textil) le desprecia, sus clientes le tratan con condescendencia o sencillamente lo humillan, su mujer lo abandon¨® tras haberle sido infiel con varios hombres, su hermana pretende casarlo con una mujer enferma; finalmente, lo echa de su casa. Y sin embargo, hacia el final de su historia, Cui est¨¢ seguro (y afirma) que ¡°si uno puede aprender a cerrar de vez en cuando los ojos y olvidar la man¨ªa de quejarse de todo y de todos, de golpe uno puede descubrir que la vida en realidad es una cosa muy bella¡±.
Nacido en 1964 en la provincia china de Jiangsu, Ge Fei (cuyo nombre real es Liu Yong) es uno de los escritores m¨¢s conocidos de su pa¨ªs, donde se lo considera un autor experimental. El invisible no es una obra de ese tipo, sin embargo; su tema es la dificultad de llevar una vida decente en una sociedad en la que la irrupci¨®n del capitalismo ha dejado a millones de personas como su protagonista sin una certeza moral a la que aferrarse. Los fabricantes de sistemas de reproducci¨®n de m¨²sica no son m¨¢s de 20 en todo Pek¨ªn; ¡°debe ser una de las profesiones m¨¢s insignificantes en la China actual¡±, dice Cui, y agrega: ¡°Lo raro es que, aunque en el ambiente todos nos conocemos, no tenemos trato entre nosotros. Ni nos serruchamos el piso ni nos doramos la p¨ªldora, ni hacemos jam¨¢s comentarios desubicados sobre el oficio de los otros colegas [¡]. La mayor parte de la sociedad ignora completamente nuestra existencia, lo cual no est¨¢ nada mal. Nosotros, a su vez, ocultos en nuestro rinc¨®n oscuro, satisfechos con nuestra vida de hombres invisibles, tenemos razones m¨¢s que suficientes para despreciar a esta sociedad¡±.
No sabemos mucho sobre China, lo cual hace dificultoso decir algo acerca de su literatura
No sabemos mucho acerca de China, lo cual hace dificultoso decir algo acerca de su literatura. (En 2015, la editorial argentina Adriana Hidalgo contribuy¨® a paliar ese d¨¦ficit con una antolog¨ªa de narrativa china actual seleccionada y traducida, tambi¨¦n, por Miguel ?ngel Petrecca). A pesar de ello, o m¨¢s bien por esa raz¨®n, El invisible es, con su laconismo y sus soluciones argumentales inesperadas, una lectura fascinante: la invisibilidad de la que presume su protagonista y el hecho de que sus clientes le abran las puertas de sus casas para que les instale sus equipos de audio lo convierten en un valioso testigo de las visiones de ciertos sectores de la sociedad china acerca de su pa¨ªs y de los desaf¨ªos que presenta a esos sectores un capitalismo que en las ¨²ltimas d¨¦cadas ha sido en China especialmente voraz.
¡°Soy una persona a la que le gusta mantener su percepci¨®n de las cosas en la superficie¡±, afirma Cui; en una sociedad en la que, como dictamina otro personaje, ¡°no hay ni una sola persona que pueda llevar una vida decente¡±, su preferencia por no profundizar en las cosas lo salva. ¡°En un mundo sucio y mediocre, la suerte es la ¨²nica religi¨®n¡±; al final Cui tiene un golpe de fortuna asociado con el que quiz¨¢s sea un fantasma y quiz¨¢s no, de all¨ª su opini¨®n acerca de la belleza de la vida. Pero la novela est¨¢ lejos de darle la raz¨®n a su protagonista, y traza un pron¨®stico pesimista para China y para los que, inevitablemente, acabaremos siendo sus s¨²bditos econ¨®micos.
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Autor:?Ge Fei. Traducci¨®n de Miguel ?ngel Petrecca.
Editorial:?Adriana Hidalgo (2016).
Formato: tapa blanda (166 p¨¢ginas).
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