Tren subterr¨¢neo hacia la libertad
El norteamericano Colson Whitehead revive el trauma de la esclavitud en una compleja y exigente novela de gran carga moral que destila belleza y potencia
Colson Whitehead (Nueva York, 1969) forma parte de una formidable constelaci¨®n de escritores afroamericanos, algunos de cuyos nombres m¨¢s relevantes son Yaa Gyasi, Jesmyn Ward, Ta-Nehisi Coates, Teju Cole, Chimamanda Adichie, Paul Beatty o el canadiense Lawrence Hill, hombres y mujeres que est¨¢n cambiando el rostro de la literatura que se escribe hoy en aquel pa¨ªs. Nacido en Nueva York en 1969, Whitehead es autor de seis novelas que llaman la atenci¨®n por su inventiva y por la destreza con que saquea las posibilidades de los g¨¦neros narrativos. Entre sus t¨ªtulos m¨¢s destacados cabe se?alar El intuicionista, su m¨¢gico debut; Los d¨ªas de John Henry, en torno a un personaje legendario celebrado en baladas de folk; Sag Harbor, emotiva historia de adolescentes, o Zona Uno, novela de zombis en un Manhattan posapocal¨ªptico. El ferrocarril subterr¨¢neo (2016), su ¨²ltima novela, obtuvo los Premios Pulitzer y Nacional del Libro. El t¨ªtulo es una alusi¨®n metaf¨®rica a la compleja red de caminos y refugios secretos que ten¨ªan como fin posibilitar la huida de los esclavos de las plantaciones del sur hacia los Estados donde pod¨ªan vivir en libertad. Se calcula que en la primera mitad del siglo XIX cerca de 100.000 hombres y mujeres de raza negra lograron escapar por medio del sistema del tren subterr¨¢neo, en cuyas operaciones de salvaci¨®n colaboraron numerosos abolicionistas blancos.
La novela de Colson Whitehead sigue la suerte de la ¨²ltima representante de un linaje de esclavas, desde Ajarry, que tras ser raptada en ?frica Occidental por unos traficantes efect¨²a un viaje atroz a bordo de un barco de esclavos, yendo a parar a una plantaci¨®n de Georgia. En la novela, la met¨¢fora del tren subterr¨¢neo se hace realidad. Hay, en efecto, un ferrocarril en el que los esclavos pueden huir hacia los Estados abolicionistas. Mabel, hija de Ajarry, lograr¨¢ huir en ¨¦l, abandonando en la plantaci¨®n a su hija Cora, protagonista de la novela. Andando el tiempo, Cora tambi¨¦n conseguir¨¢ escapar en compa?¨ªa de un esclavo llamado C¨¦sar. El contrapunto de la historia es el personaje de Arnold Ridgeway, cazador de esclavos que no soporta no haber sido capaz de atrapar a Mabel, cuya fuga la convirti¨® en un personaje de leyenda.
Son muchas las l¨ªneas maestras que confluyen en la escritura de White?head; el referente m¨¢s inmediato es Toni Morrison, pero hay otros entrecruzamientos patentes, desde Twain y Faulkner hasta Pynchon, con quien Whitehead comparte ciertas afinidades narrativas. El ferrocarril subterr¨¢neo es una novela compleja y exigente, escrita con una prosa que destila belleza y potencia. Whitehead hace gala de una gran destreza t¨¦cnica, logrando una voz de gran elasticidad. En todo caso, la dimensi¨®n dominante es de orden moral. Las atrocidades que se describen trascienden los l¨ªmites de lo soportable. En una fiesta celebrada en una plantaci¨®n los propietarios desuellan a latigazos a un esclavo llamado Big Anthony, y tras castrarlo lo roc¨ªan con aceite, quemando despu¨¦s su cuerpo a¨²n con vida a fuego lento. De la suerte que aguarda a las esclavas, mejor no hablar, aunque conviene recordar que nada es invenci¨®n del autor. Al narrar el viaje subterr¨¢neo de Cora, Whitehead no hace m¨¢s que revivir uno de los traumas que definen el ser su naci¨®n. Arnold Ridgeway, el cazador de esclavos, tiene un nombre para justificar sus acciones indecibles: ¡°El imperativo americano¡±. Hoy lo llamar¨ªamos supremac¨ªa blanca y se sigue hablando de ello en los peri¨®dicos. La novela deja en el lector la inquietante sensaci¨®n de que el ferrocarril subterr¨¢neo no ha llegado a¨²n a su destino. Como dice un personaje: ¡°Am¨¦rica es un enga?o, el m¨¢s grandioso de todos. En su fuero m¨¢s ¨ªntimo, la raza blanca cree que est¨¢ en su derecho de apropiarse de la tierra, de matar a los indios, de hacer la guerra, de esclavizar a sus hermanos. Si hubiera alguna justicia en el mundo, esta naci¨®n no deber¨ªa existir, pues sus cimientos son el robo, el asesinato y la crueldad¡±.
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Autor:?Colson Whitehead.?Traducci¨®n de Cruz Rodr¨ªguez Juz.
Editorial: Literatura Random House (2017).
Formato: eBook y tapa blanda (320 p¨¢ginas).
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