Miguel R¨ªos: ¡°El mercado musical no busca seres ¨²nicos, sino clones¡±
El rockero granadino recibe en la Universidad Miguel Hern¨¢ndez de Elche su segunda investidura como doctor ¡®honoris causa¡¯
Miguel R¨ªos (Granada, 1944) viste de nuevo la toga y el birrete. El doctor rock and roll, etiqueta que ¨¦l mismo se adjudic¨® con sorna en el pasado, ha recibido este viernes en la Universidad Miguel Hern¨¢ndez (UMH) de Elche su segunda investidura universitaria como honoris causa. Otro reconocimiento del mundo acad¨¦mico a m¨¢s de medio siglo de carrera. A una epopeya profesional que arranca en 1962, con 17 a?os, como Mike R¨ªos, el rey del twist, y 3.000 de las antiguas pesetas por un primer disco de versiones.
R¨ªos ha vuelto a subir hoy al escenario de un paraninfo -la Universidad de Granada lo hizo honoris causa en mayo de 2016- en medio de una sonora ovaci¨®n, junto a cient¨ªficos e investigadores, en un campus que alberga su propia escuela de rock. Un honor que ¨¦l vive como un "desquite" que le brinda ahora la vida, tras no haber podido cursar estudios en una instituci¨®n que en su juventud quedaba fuera del alcance de ¡°las clases populares¡±. Durante su discurso, el artista ha elogiado a la universidad como ¡°servicio p¨²blico¡± que fomenta el conocimiento y la educaci¨®n, ¡°uno de los mejores empe?os del ser humano, fundamental en su evoluci¨®n como especie¡±.
El m¨²sico ha comparecido unos minutos antes en rueda de prensa para dejar algunas frases lapidarias. Reflexiones de sabio, a medio camino entre el derrotismo y la esperanza. Y bastantes dardos envenenados, dirigidos para la ocasi¨®n (siempre con elegancia y una sonrisa), a la pol¨ªtica y la corrupci¨®n, la industria discogr¨¢fica o los talent shows televisivos. A saber: ¡°Al Gobierno no le interesa la cultura, la tiene como una mar¨ªa deleznable¡±. ¡°Desespera ver c¨®mo hay tanto trinc¨®n esperando juicio despu¨¦s de 20 a?os¡±. ¡°El rock es una hidra que ha ido mutando¡±. ¡°La industria discogr¨¢fica nunca ha sido una obra de caridad; es una de las manifestaciones de la historia de la cultura m¨¢s crueles y despiadadas¡±. Casi nada.
A sus 73 a?os de hombre que ha vivido ¡°en la carretera¡±, como reza uno de sus m¨¢s celebres temas, recibe el doctorando universitario de la UMH con sensaciones contradictorias. ¡°En un primer momento te asalta una especie de expansi¨®n del ego, pero luego se dispara la alarma, cuando descubres que la toga te puede venir grande y acoges el premio con algo de impostura¡±. En cualquier caso, ¡°no es un premio individual, sino el premio a una carrera, a mucha gente, al rock, que ha logrado hacer, desde mediados del siglo pasado y hasta nuestros d¨ªas, hacer m¨¢s f¨¢cil la vida de los seres humanos y darles m¨¢s cotas de libertad, con una actitud m¨¢s proclive a la igualdad y a la generaci¨®n de buen rollo¡±, afirma, pidiendo disculpas por la tos de un resfriado que se resiste a abandonarle.
La UMH ha reconocido sus ¡°relevantes m¨¦ritos tanto en el terreno musical como en el social¡±. En su discurso, el rector de la universidad ilicitana, Jes¨²s Pastor, ha desgranado las peripecias profesionales de un tipo solidario y creativo, que ¡°luch¨® por sus ideales, supo siempre preservar su vida privada y digerir sus ¨¦xitos¡±, que ha sabido, en definitiva, ¡°disfrutar de su profesi¨®n y de la vida¡±.
Su madrina acad¨¦mica, la vicerrectora de Cultura y Extensi¨®n Universitaria, Tatiana Sentamans, ha calificado a R¨ªos de ¡°maestro¡±, todo un ¡°referente mundial del rock¡± en el que todo se cuantifica con la ¡°medida del mill¨®n: millones de discos vendidos y millones de escuchas, millones de kil¨®metros de carretera rodados en giras, y millones de personas llenando sus conciertos¡±.
El artista granadino ha hecho este viernes una defensa del t¨¦rmino ¡°inventar¡±, de ¡°la creaci¨®n¡±, como motor de la m¨²sica, frente a la ¡°imitaci¨®n¡±. Y eso que la imitaci¨®n fue su propia ¡°escuela¡±, un tiempo en el que emulaba a Elvis Presley, ¡°intentando que el tup¨¦ se quedara inhiesto¡± y se impusiera a unos rizos demasiado rebeldes. A su juicio, la Universidad Miguel Hern¨¢ndez, a la que ofrece su experiencia y conocimientos, debe plantear su escuela de rock como ¡°una escuela de investigaci¨®n¡±, un lugar que ofrezca ¡°algo m¨¢s de lo que el mercado puede dar¡±.
Corrupci¨®n sist¨¦mica
R¨ªos niega la mayor. ¡°En la cultura no hay corrupci¨®n, es impoluta, la ¨²nica arma a la que nos podemos agarrar¡±, responde cuando se le pregunta por el proceso judicial contra los antiguos gestores de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE). Pero s¨ª cree que la ¡°corrupci¨®n sist¨¦mica¡± de la Espa?a actual ha tenido sus efectos en el mundo de la cultura: ¡°Al ver que hay tanto trinc¨®n que est¨¢ esperando 20 a?os para un juicio¡±, se?ala, es normal que muchos creadores se frustren y acaben renegando de hacer ¡°cosas que engrandecen al ser humano¡±. ¡°En este pa¨ªs lo que falta son ciudadanos cr¨ªticos y gente que trate de llevar a la pol¨ªtica esa cr¨ªtica, para que la pol¨ªtica no sea una liturgia cada cuatro a?os, sino una liturgia de cada d¨ªa¡±, precisa.
El nuevo doctor de la UMH tampoco ahorra cr¨ªticas hacia la industria discogr¨¢fica, que nunca ha sido ¡°una obra de caridad¡± y se ha comportado, m¨¢s bien, como ¡°una de las manifestaciones mercantiles m¨¢s crueles y despiadadas que ha habido en la historia de la cultura¡±. En este mercado, ¡°representante real de la cultura capitalista¡±, tampoco interesa la disidencia, entregado como est¨¢ al arte ¡°de usar y tirar¡±.
Para R¨ªos, no vale la excusa de la pirater¨ªa para explicar ese af¨¢n por la homogeneidad, pues la pirater¨ªa ¡°ha jodido m¨¢s a los m¨²sicos que a la industria¡±. El rock y la cultura latina, en general, viven ¡°subyugados a un mercado que no busca seres diferentes, sino clones, clones y clones¡±. Sobrevive en un modelo mercantilista abocado sin remedio a la ¡°repetici¨®n¡± y la ¡°f¨®rmula¡±, que convierte ¡°a una persona que se tira dos meses ensayando en una estrella rutilante¡±. Ah¨ª va su opini¨®n sobre el fen¨®meno televisivo de Operaci¨®n Triunfo, el programa de TVE, al que no ha querido citar expresamente.
Un verdadero m¨²sico, advierte, ¡°no se consigue en un cuarto de hora¡±; supone un esfuerzo que ¨¦l no duda en tildar de ¡°heroico¡±. Sin embargo, el cantante, ha querido dejar en su intervenci¨®n un resquicio a la esperanza, pues los locales de ensayo ¡°est¨¢n m¨¢s llenos que nunca, hay m¨¢s bandas que nunca y ¨¦stas tocan mejor que nunca¡±. ¡°El rock es una hidra de muchas cabezas, que ha ido mutando y adquiriendo diferentes apellidos¡±, opina. Y su futuro reside en la ¡°emoci¨®n¡± que se experimenta ¡°en el hecho de tocar una guitarra y que la melod¨ªa pase por la garganta¡±.
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