La muerte, ?un asunto de ni?os?
'Ana y Bruno' convierte, por segunda vez en apenas un a?o, el fin de la vida en una tem¨¢tica apta para todos los p¨²blicos
Ana y Bruno o La muerte y M¨¦xico. La infancia truncada y la fuerza de la imaginaci¨®n. La p¨¦rdida y el valor de la amistad. Por segunda vez en apenas un a?o, el fin de la vida se ha convertido en una tem¨¢tica para ni?os en la gran pantalla. Apta para todos los p¨²blicos, al igual que la exitosa producci¨®n estadounidense Coco, la?pel¨ªcula reci¨¦n estrenada de Carlos Carrera es una historia de aventuras con un trasfondo muy mexicano: no faltan la muerte, los robachicos (secuestradores de ni?os), el humor y la tragedia en un mismo trago y, por supuesto, un simp¨¢tico perro xoloitzcuintle (raza originaria del pa¨ªs).
Ana es una adorable ¡°cabezona y bizca¡±, quien acompa?ada de unos personajes imaginarios, de un amigo ciego y del ya mencionado can, ayuda a su madre a olvidar. A olvidar la muerte de su propia hija. Puede sonar tr¨¢gico y, claro, confuso. Pero al aparecer los cr¨¦ditos de la pel¨ªcula en la sala, los m¨¢s peque?os comienzan a hablar animados mientras algunos de los adultos all¨ª presentes tratan de enjugarse las l¨¢grimas antes de que se enciendan las luces. La candidez de unos y la hiperconsciencia de otros hace que la misma pel¨ªcula se vea de maneras radicalmente opuestas.
Bendecida por Guillermo del Toro y Alfonso Cuar¨®n, la pel¨ªcula no ha alcanzado en sus primeras semanas en taquilla las expectativas de sus productores. Para mayor inri, Ana y Bruno ha recibido cr¨ªticas por ser considerada no apta para menores. ¡°Es m¨¢s un tema de los prejuicios que tienen los adultos sobre lo que un ni?o puede o no gestionar que el hecho de lo que pueden manejar¡±, defend¨ªa una de sus productoras, Isabel Aerenlund, en este diario.
Carrera, ganador de la Palma de Oro en el Festival Internacional de Cine de Cannes por el cortometraje de animaci¨®n El h¨¦roe (1994), cre¨® para esta cinta, cuya producci¨®n se prolong¨® durante una d¨¦cada, unos seres alocados cuya particularidad es que todos (excepto el malo mal¨ªsimo) tienen sus virtudes y sus defectos. Bruno, coprotagonista de la pel¨ªcula, es?una especie de duende verde; Tic, el reloj-br¨²jula; la taza de WC Hugo; la elefanta, la mano peluda y Piripit¨ªn, llam¨¦mosle El breve, son entra?ables: apoyan a Ana, pero son ego¨ªstas, mani¨¢ticos o celosos. Un reflejo de la vida misma, con un toque pedag¨®gico.
El universo de personajes cont¨® con un reconocido elenco de actores y actrices que les dieron voz. Marina de Tavira hizo de la mam¨¢ Carmen, Dami¨¢n Alc¨¢zar del pap¨¢ Ricardo, H¨¦ctor Bonilla del doctor M¨¦ndez, Silverio Palacios de Bruno, con la especial participaci¨®n de Galia Mayer, que cuando grab¨® la voz de Ana apenas sab¨ªa ni leer, y de Daniel Carrera, hijo del cineasta, en el papel del amigo ciego Daniel, Choco para los amigos.
Durante m¨¢s de hora y media, el guion, basado en la novela de Daniel Emil ¡ªcuya publicaci¨®n est¨¢ prevista para este mismo mes¡ª, lleva al espectador a encontrarse con situaciones y personajes inesperados. ¡°La imaginaci¨®n lo puede todo. Imaginamos hacer esta pel¨ªcula, conseguimos el mayor presupuesto de la historia del cine mexicano y, con perseverancia, se logr¨®. La pel¨ªcula es lo mismo: tambi¨¦n gira en torno al poder de la imaginaci¨®n¡±, apuntaba su productor Pablo Baksht, antes del estreno. Tras el tropiezo inicial en la taquilla y despu¨¦s de proclamarse la gran ganadora de los premios Quirino ¨Cque reconocen el talento iberoamericano del g¨¦nero¨C, a Ana y Bruno siempre le quedar¨¢n los festivales.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.