La Bienal de Flamenco se traslada a los espacios abiertos

¡°Lo m¨¢s f¨¢cil, como han hecho otros grandes festivales, hubiese sido cancelar, pero los responsables de las instituciones que hacemos posible la Bienal de Flamenco no hubi¨¦semos dormido tranquilos¡±, ha confesado este mi¨¦rcoles Antonio Mu?oz, delegado de H¨¢bitat Urbano, Cultura y Turismo del Ayuntamiento de Sevilla en la presentaci¨®n de la 21? edici¨®n de la cita m¨¢s importante del mundo para el flamenco. El multitudinario acto, al que han acudido casi una treintena de artistas, se ha celebrado al aire libre, en los jardines del Real Alc¨¢zar, como se ofrecer¨¢n la mayor¨ªa de los espect¨¢culos debido a las medidas de distanciamiento que deben observarse durante la pandemia, y amenizado con sonidos no precisamente arm¨®nicos: el canto de los pavos reales que no han querido perderse ni un detalle de la programaci¨®n.

¡°Hemos tenido que reducir el n¨²mero de espect¨¢culos, de los 70 previstos hemos pasado a 51, de los que 34 son estrenos, y la mayor¨ªa de ellos se celebrar¨¢n en espacios al aire libre; porque lo principal es que el trabajo de los artistas pueda verse. Siempre hemos tenido claro que las compa?¨ªas y los artistas necesitan la Bienal como un punto de partida desde el que sus creaciones puedan salir a recorrer el planeta¡±, ha asegurado Antonio Zoido, director del festival que naci¨® en 1980 de la mano del escritor y flamenc¨®logo Jos¨¦ Luis Ortiz Nuevo y que en 2020 cumple 40 a?os. Tambi¨¦n esta edici¨®n coincide con la celebraci¨®n de la primera d¨¦cada de la declaraci¨®n del flamenco como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.

Junto a nombres consolidados como los bailaores Roc¨ªo Molina, Israel Galv¨¢n, Andr¨¦s Mar¨ªn, Farruquito o Patricia Guerrero, los cantaores Estrella Morente, El Pele, Jos¨¦ Valencia, Tom¨¢s de Perrate o La Tremendita, el pianista Dorantes o el guitarrista Dani de Mor¨®n, la programaci¨®n incluye a artistas que se presentan por primera vez con espect¨¢culo propio como la bailaora Mercedes de C¨®rdoba, el guitarrista Daniel Casares o la arpista Ana Crism¨¢n, quien estrenar¨¢ Son¨ªos del arpa negra. ¡°Las circunstancias que vivimos impedir¨¢n a mucho de nuestro p¨²blico extranjero acudir, por eso retransmitiremos algunos de los espect¨¢culos por streaming¡±, ha puntualizado Zoido. En ediciones anteriores el 30% de los espectadores de la Bienal son de fuera de Espa?a.

Adem¨¢s de los escenarios habituales como los teatros Lope de Vega y Central, que tienen su aforo reducido a un 33% para respetar la distancia de seguridad, la Bienal de Flamenco ocupar¨¢ por primera vez el monasterio de La Cartuja

Adem¨¢s de los escenarios habituales como los teatros Lope de Vega y Central, que tienen su aforo reducido a un 33% para respetar la distancia de seguridad, la Bienal de Flamenco ocupar¨¢ por primera vez el monasterio de La Cartuja -sede del Centro Andaluz de Arte Contempor¨¢neo- y la Fundaci¨®n Tres Culturas del Mediterr¨¢neo. Otras de sus sedes ser¨¢n el monasterio de San Jer¨®nimo, la iglesia desacralizada de San Luis de los Franceses, el patio de la Monter¨ªa del Real Alc¨¢zar. En total se ofrecer¨¢n 12.000 entradas que saldr¨¢n a la venta en Internet el 1 de julio.

La b¨²squeda de espacios al aire libre, que permiten un 50% del aforo, ha llevado a la Bienal a expandirse y recuperar el monasterio de San Jer¨®nimo -que ya se hab¨ªa utilizado en ediciones anteriores- para ofrecer las propuestas m¨¢s experimentales los viernes y s¨¢bados de agosto (del 7 al 29). Los coqueteos del jerezano Diego Villegas, que toca la flauta, el saxo y la arm¨®nica en clave flamenca, con el jazz abrir¨¢n este nuevo ciclo en el que tambi¨¦n estar¨¢n el grupo granadino M. de Puchero, el guitarrista Ra¨²l Cantizano, la fusi¨®n de electr¨®nica y flamenco que hace Artom¨¢tico y Los Voluble o el m¨ªtico Gualberto que estrena Duende el¨¦ctrico. ¡°Es una mezcla de flamenco y m¨²sica psicod¨¦lica, en el que toco la guitarra el¨¦ctrica y el sitar, inspirada en la novela de Robert Graves La diosa blanca que he compuesto durante el confinamiento y trata de los tiempos del matriarcado¡±, ha explicado el m¨²sico, uno de los pioneros del rock andaluz.

Pasado el avance de agosto, la programaci¨®n comenzar¨¢ el 5 de septiembre con la reposici¨®n de espect¨¢culo que el Ballet Flamenco de Andaluc¨ªa, dirigido por ?rsula L¨®pez, estren¨® para celebrar sus 25 a?os. Al d¨ªa siguiente, la bailaora y core¨®grafa Roc¨ªo Molina har¨¢ doblete en el teatro Central con dos partes de su trilog¨ªa dedicada a la guitarra. Al mediod¨ªa ofrecer¨¢ Inicio (Uno), que ya esboz¨® el a?o pasado junto al guitarrista Rafael Riqueni y que presentar¨¢ muy modificado. Por la noche ser¨¢ el estreno de Al fondo riela (Lo otro del Uno). Farruquito, con Desde mi ventana, Antonio Canales que dirigir¨¢ su montaje Torero, Mar¨ªa Moreno, con su nuevo montaje More (No) More e Israel Galv¨¢n que presentar¨¢ Gatomaquia junto a Le Cirque Roman¨¦s forman parte del cartel de este a?o en el que predomina el baile. La cita tiene un presupuesto de 1,5 millones de euros y que sus organizadores (Ayuntamiento de Sevilla con la colaboraci¨®n de la Junta de Andaluc¨ªa y la Diputaci¨®n de Sevilla entre otros) aseguran que se ha ahorrado en muchas cosas, menos en el cach¨¦ de los artistas, que se ha respetado. La clausura de esta edici¨®n la cerrar¨¢ Estrella Morente el 4 de octubre.

Entre los proyectos que se han quedado por el camino por culpa del coronavirus, Zoido destaca La divina comedia, de Andr¨¦s Mar¨ªn; Suite Sevilla, una colaboraci¨®n de la Real Orquesta Sinf¨®nica de Sevilla y Riqueni, y las cuatro noches del Hotel Triana, la parte m¨¢s popular de la cita que est¨¢ estudiando recuperar m¨¢s adelante. ¡°No hemos querido dejar a nadie atr¨¢s, pero hay cosas que no se han podido ensayar por el estado de alarma. El flamenco necesita ahora todo el apoyo posible, especialmente despu¨¦s de lo que est¨¢ pasando con los tablaos y de que tengamos que ver cosas como el cierre de Casa Patas en Madrid. Me ha dado mucha pena. Durante a?os ha sido la instituci¨®n por excelencia en la que se pod¨ªa ver flamenco bueno; pero tras la entrada del flamenco en la programaci¨®n de los teatros, como en los Teatros del Canal, en el Real o en el Caf¨¦ Berl¨ªn, Casa Patas se hab¨ªa quedado instalada en un flamenco muy unidimensional; frente al flamenco m¨¢s abierto que se hace hoy¡±, reflexiona Zoido.