La librer¨ªa de barrio se arma contra Amazon y defiende su labor ¡°esencial¡±
Los libreros celebran su d¨ªa y piden que no se les obligue a cerrar en caso de un nuevo confinamiento. Todostuslibros, la web que los re¨²ne, ya permite la compra directa
El peque?o librero, el virus y el gigante digital. La situaci¨®n que vive el sector del libro suena como el t¨ªtulo de una f¨¢bula. Un cuento, eso s¨ª, algo sombr¨ªo, lleno de esperanza, pero tambi¨¦n de batallas y preocupaciones. El lema Mi librer¨ªa es de barrio, escogido para celebrar este viernes el d¨ªa de estos establecimientos, es tambi¨¦n una declaraci¨®n de intenciones. Y de resistencia: frente a la pandemia, los cierres y, tambi¨¦n, Amazon. Ante las amenazas que oscurecen su futuro, los libreros est¨¢n festejando con una mir¨ªada de actividades en todo el pa¨ªs. Al p¨²blico piden participaci¨®n y compras. Y al Gobierno, apoyo.
La v¨ªspera de su fiesta, las librer¨ªas recibieron una buena noticia. O, m¨¢s bien, no tan mala: la facturaci¨®n en los tres primeros trimestres del a?o se redujo un 22,55%, frente al mismo periodo de 2019: de 299 millones a 232, seg¨²n Cegal, la principal confederaci¨®n del sector, que agrupa a un 40% de estos establecimientos. Considerando las semanas de confinamiento y la incertidumbre, las librer¨ªas descubren que han aguantado mejor de lo que esperaban, aunque su cat¨¢logo ha bajado de siete millones de ejemplares almacenados a 5,5. Adem¨¢s, la web Todostuslibros.com, la respuesta online a Amazon de 181 librer¨ªas independientes, acumula 2.499 pedidos cobrados, 999 reservas y 1.637 cheques-regalo. Es decir, 5.135 ventas en su primera semana de actividad comercial.
En mitad de una segunda ola del virus, los libreros quieren alejar el espectro de otro cierre. Aunque ¡°no ha habido petici¨®n oficial¡± espec¨ªfica de Cegal, seg¨²n su portavoz de la junta directiva, ?lvaro Manso, la Federaci¨®n de C¨¢maras del Libro de Espa?a (Fedecali), que agrupa a toda la cadena del libro, s¨ª ha solicitado al Gobierno que las librer¨ªas puedan permanecer abiertas en el supuesto de un confinamiento total. ¡°La propuesta es que se consideren como un comercio que suministra un producto esencial¡±, apunta Miguel Barrero, presidente de Fedecali. ¡°Es la sociedad la que lo est¨¢ reclamando, como se ha visto durante el primer confinamiento, y a trav¨¦s de las librer¨ªas de barrio¡±, asegura Patrici Tixis, presidente de la C¨¢mara del Libro de Catalu?a, que ya ha hecho lo propio ante la Generalitat. Y la consejera de Cultura de la Comunidad de Madrid, Marta Rivera de la Cruz, explic¨® el jueves en una entrevista con Efe que estar¨ªa dispuesta a considerar esa opci¨®n, en el caso eventual de un nuevo cierre.
No es una preocupaci¨®n solo espa?ola. En Francia, el sector afronta temores y competencia parecidos. En un pa¨ªs donde las librer¨ªas independientes se consideran una aut¨¦ntica se?a de identidad, Amazon, en cambio, se ha convertido en lo que hace unas d¨¦cadas fue McDonald¡¯s, como observaba hace unos d¨ªas Le Monde. Si la cadena de comida r¨¢pida concentraba, para muchos franceses, todos los males de la globalizaci¨®n y una amenaza para la alimentaci¨®n y el estilo de vida aut¨®ctono, ahora la multinacional de las ventas en l¨ªnea resume todos los peligros que arrastran las tecnol¨®gicas estadounidenses.
¡°Lo digo de verdad a los parisienses: no compr¨¦is en Amazon. Amazon es la muerte de nuestras librer¨ªas y nuestra vida de barrio¡±, dijo la alcaldesa de Par¨ªs, la socialista Anne Hidalgo, a principios de noviembre tras el inicio del nuevo confinamiento. La ministra de Cultura, Roselyne Bachelot, se ha pronunciado en t¨¦rminos similares. ¡°En estos tiempos sin precedentes, empresas como Amazon juegan un papel fundamental a la hora de facilitar a nuestros clientes obtener los productos necesarios para ellos y sus familias¡±, responde un portavoz de la compa?¨ªa. Y subraya que el coloso estadounidense ¡°trabaja con m¨¢s de 9.000 peque?os empresarios y comerciantes en Espa?a¡± y prev¨¦ llegar a 9.000 empleados este a?o en el pa¨ªs. ¡°Hay sitio para todos¡±, insiste frente a los ataques de las librer¨ªas.
La situaci¨®n, sin embargo, resulta parad¨®jica. En Francia, este segundo confinamiento obliga a cerrar los comercios no necesarios, incluidas las librer¨ªas. Y la medida deja el campo libre a las plataformas de venta online y, entre ellas, Amazon. A la vez que las autoridades esgrimen medidas para tasar a las tecnol¨®gicas estadounidenses y evitar que escapen al fisco, o cultivan la ret¨®rica encendida en defensa de la excepci¨®n cultural francesa, han creado las condiciones para la consolidaci¨®n del gigante en Francia al obligar al cierre de los peque?os comercios. Mientras en varios puntos del Hex¨¢gono proliferan las protestas contra nuevos almacenes y puntos de distribuci¨®n, y arrecian las cr¨ªticas por motivos medioambientales, sociales y fiscales, el gigante de Seattle prepara la apertura de nuevos centros con la consiguiente creaci¨®n de empleo en tiempos de recesi¨®n.
No por nada, la Uni¨®n Europea considera que las grandes tecnol¨®gicas son las grandes vencedoras de esta crisis. Los gigantes se han convertido en mastodontes, con valoraciones jam¨¢s vistas en Bolsa. Por ello, Bruselas financiar¨¢ sus planes de recuperaci¨®n con la llamada tasa GAFA (por las iniciales de Google, Amazon, Facebook y Apple). La actividad de esas empresas no ha hecho sino crecer durante la crisis, mientras que los gobiernos ¡ªnecesitados m¨¢s que nunca de ingresos¡ª siguen sin poder recaudar los impuestos que s¨ª logran de las compa?¨ªas tradicionales. Ante ese despegue, B¨¦lgica, por ejemplo, ha decidido no hacer otro regalo a Amazon y ha dejado las librer¨ªas abiertas pese al confinamiento, al considerarlas una actividad esencial para la salud mental de sus ciudadanos.
La Comisi¨®n Europea ve con recelo la actividad de la compa?¨ªa en Europa por posibles pr¨¢cticas que atentan contra la competencia. Ya en 2015 el departamento dedicado a ese ¨¢mbito, que lidera la comisaria danesa Margrethe Vestager, se enfrent¨® a la empresa por las cl¨¢usulas que ten¨ªan sus contratos con los vendedores de e-books. Amazon se aseguraba en esos acuerdos que se beneficiar¨ªa de cualquier condici¨®n ventajosa que esas empresas pudieran llegar a pactar con otra plataforma. Bruselas, que entend¨ªa que eso cerraba el paso a otros competidores, dio carpetazo al caso con un acuerdo con la corporaci¨®n de Seattle.
Esta semana la UE ha abierto otro frente con la tecnol¨®gica. Tras una investigaci¨®n de un a?o, los servicios de competencia han concluido de forma preliminar que Amazon aprovecha los datos confidenciales de las empresas que venden a trav¨¦s de su plataforma para elaborar su estrategia comercial. Seg¨²n Bruselas, estos datos pasan sistem¨¢ticamente a configurar el algoritmo que emplea Amazon para competir con esos mismos clientes. Bruselas, adem¨¢s, ha abierto una nueva investigaci¨®n contra la compa?¨ªa para esclarecer qu¨¦ criterios emplea para dar a las empresas acceso a los clientes premium, puesto que la Comisi¨®n ha detectado que ah¨ª est¨¢ la bolsa de clientes que m¨¢s compran. ¡°Estamos en desacuerdo y continuaremos haciendo todo lo posible para asegurarnos de que la Comisi¨®n cuente con la informaci¨®n necesaria para una comprensi¨®n precisa de los hechos. Amazon representa menos del 1% del mercado minorista mundial; en todos los pa¨ªses en los que operamos encontramos minoristas de mayor tama?o que nosotros. Hay m¨¢s de 150.000 empresas europeas vendiendo a trav¨¦s de nuestras tiendas¡±, responde el portavoz de la compa?¨ªa estadounidense.
Pese al boom de estos meses de Amazon, en todo caso, el sector de las librer¨ªas ha sobrevivido tambi¨¦n en Francia mejor que otros a esta crisis: incluso ha registrado un aumento de la venta de libros del 20% respecto al a?o anterior despu¨¦s del primer confinamiento. En el segundo cierre, que empez¨® el 30 de octubre y debe prolongarse como m¨ªnimo hasta el 1 de diciembre, las librer¨ªas han podido poner en marcha el sistema click and collect que permite reservar un libro por Internet y recogerlo en el establecimiento. Y el Gobierno ha anunciado una reducci¨®n de las tasas postales para el env¨ªo de libros, lo que deber¨ªa atenuar el coste de la compra online a los comercios independientes y resistir a la competencia de Amazon.
Sin embargo, adem¨¢s de una oportunidad, la Red sigue siendo un problema, al menos para las librer¨ªas espa?olas: la pandemia ha puesto de manifiesto la brecha digital, que impide al sector ser competitivo en las ya imprescindibles ventas online. ¡°Hay librer¨ªas que a¨²n no tienen ni p¨¢gina web por ser peque?as y tener miedo a la inversi¨®n, pero si no lo haces te deja fuera de todo¡±, lamenta Manso, que constata que ¡°las librer¨ªas independientes espa?olas no ocupan proporcionalmente en la Red el peso de las ventas que tienen en el mundo f¨ªsico¡±. Si bien ¡°las ayudas p¨²blicas para tecnolog¨ªa han tenido hasta ahora dotaciones cortas¡±, el sector tampoco se ha volcado en ello. El Observatorio de las Librer¨ªas de 2019 estimaba que tan solo un 25,8% de estas tiendas usa Internet como veh¨ªculo de venta. De ah¨ª la iniciativa de Cegal de ampliar la web Todostuslibros.com como plataforma de comercio online: adem¨¢s de las b¨²squedas sobre m¨¢s de un mill¨®n y medio de referencias, ahora permite adquirir las obras en toda Espa?a.
Aunque, mientras avanza Internet, la ¨²ltima d¨¦cada ha dejado en toda Europa una red menos tupida. ¡°La jubilaci¨®n de los due?os deja muchas librer¨ªas perdidas en un sector donde el plan de negocio no te da beneficios claros en un plazo inferior a cinco a?os¡±, fija Manso. La falta de formaci¨®n reglada del oficio, salvo puntualmente en Madrid y Barcelona, que podr¨ªa paliar esas p¨¦rdidas de librer¨ªas, es un tema que ¡°se ha planteado reiteradamente, pero no lo hemos acometido¡±, admite como uno de los talones de Aquiles del sector.
La expulsi¨®n de muchas librer¨ªas del centro de las grandes ciudades, por los altos alquileres, lejos de ser un contratiempo definitivo, refuerza el modelo hacia d¨®nde debe tender el futuro, seg¨²n Manso. ¡°Esto camina hacia las librer¨ªas de librero, negocios personalizados, teniendo muy claro qu¨¦ quiere tu cliente m¨¢s pr¨®ximo y adecuar tu fondo a ello, y, a la vez, siendo hiperactivo con asociaciones, entidades y editores realizando actividades, ser un agitador cultural de tu entorno... Todo ello permite arraigarte a tu barrio¡±, se?ala. Pasaron, pues, los tiempos de las teor¨ªas de librer¨ªas de monocultivo tem¨¢tico, la necesidad de un servicio de restauraci¨®n y de la venta de productos de papeler¨ªa y complementos de calidad como v¨ªas inevitables para sobrevivir. ¡°El merchandising de tazas y bolsitas de tela no te va a salvar, del mismo modo que muchos metros cuadrados con much¨ªsimos libros tampoco te garantiza ser una referencia; la pandemia lo ha demostrado¡±.
Lo dice, en el fondo, el propio lema del d¨ªa de las librer¨ªas. Y tambi¨¦n los n¨²meros: el observatorio de 2019 calcula que el 66,5% de estas tiendas en Espa?a factura menos de 150.000 euros al a?o. Y Manso subraya que el 90% tiene perfil independiente y da trabajo ¡°a un par de personas¡±. El estudio muestra, adem¨¢s, que la mitad de las librer¨ªas se encuentra en municipios de menos de 100.000 habitantes y una de cada cuatro en localidades con menos de 25.000 vecinos. Tiendas de barrio, peque?as. Pero dispuestas a resistir.
Babelia
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