El acueducto romano de la discordia en Valencia

El estudio del arque¨®logo y doctor en Arquitectura Miquel R. Mart¨ª Maties sobre el acueducto romano de Valencia ha provocado un terremoto en el mundo acad¨¦mico. Mart¨ª asegura que la obra de ingenier¨ªa, que viene estudiando desde 2001, se extend¨ªa 98,6 kil¨®metros entre el municipio de Tu¨¦jar y la capital. Pero el catedr¨¢tico de Arqueolog¨ªa de la Universidad de Valencia, Jos¨¦ Luis Jim¨¦nez, que investiga ese legado romano desde hace 20 a?os, sostiene que ¡°no hay base¡± para esta afirmaci¨®n y que las conclusiones deben adoptarse con mucha prudencia¡±. Otros compa?eros acad¨¦micos de Valencia y Castell¨®n se han expresado en el mismo sentido en las redes sociales. Y tambi¨¦n hay expertos consultados por este peri¨®dico que prefieren no pronunciarse hasta conocer el estudio, pero no rechazan la posibilidad de que Mart¨ª se encuentre en lo cierto. O no.

El estudio de Mart¨ª Maties, a grandes rasgos, sostiene que los diversos tramos de acueductos existentes en la provincia de Valencia (hasta 60 kil¨®metros) forman parte de un mismo canal. Afirma que las canalizaciones de la huerta valenciana, que siempre se hab¨ªan adjudicado a la mano de los ¨¢rabes, no son m¨¢s que adaptaciones de la obra hidr¨¢ulica de Roma. Pero Jim¨¦nez lo niega con vehemencia.

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¡°No hay una base suficiente para afirmar todo esto. Son conclusiones de un estudio que, tal y como est¨¢ redactado, no le encuentro justificaci¨®n. Es una visi¨®n sin ning¨²n tipo de base. Es muy habitual que haya un mismo tipo de piedra en un n¨²mero importante de conducciones talladas en la roca, pero eso no significa que tenga que sea todo de la misma obra¡±, opina el catedr¨¢tico.

Y a?ade: ¡°Hay un principio b¨¢sico: si no hay evidencias materiales, las conclusiones deben adoptarse con mucha prudencia. Tendr¨ªa que conocer el trabajo en profundidad, pero proponer esa hip¨®tesis de Valencia como final de la obra significa inventarse un trazado de decenas de kil¨®metros en el que no hay el m¨¢s m¨ªnimo resto conservado¡±, a?ade. ¡°Valencia ten¨ªa su acueducto y proced¨ªa de sus inmediaciones. En las inmediaciones hay acu¨ªferos y conducciones de Quart de Poblet, Manises, Ribarroja¡­ Claro que exist¨ªa una red de acueductos, pero eso de que luego los ¨¢rabes lo retomaron y que regaba la huerta es una opini¨®n gratuita¡±, concluye.

Por su parte, Albert Ribera, exarque¨®logo municipal de Valencia y experto en la el pasado romano en la ciudad, tampoco cree que se tomase el agua a 100 kil¨®metros de la capital. ¡°No tiene sentido, porque el Turia pasa por la ciudad y porque las captaciones se hac¨ªan a solo una decena de kil¨®metros¡±. El experto considera que el acueducto que proven¨ªa de Tu¨¦jar acaba en Villar del Arzobispo, a unos 25 kil¨®metros, y serv¨ªa para llevar el agua a esta llanura de secano. Otros historiadores de las universidades de Valencia y de Castell¨®n, como Vicent Baydal o Ferran Esquilache, experto en el sistema de regad¨ªos de la huerta valenciana, tambi¨¦n han sido cr¨ªticos con la tesis de Mart¨ª Mat¨ªes. El mundo acad¨¦mico coincide, adem¨¢s, en que una tesis de este tipo deber¨ªa ser publicada en revistas especializadas para ser debatida y contrastada por los expertos.?

Mart¨ª Maties replica que lleva desde 2001 estudiando la obra hidr¨¢ulica. ¡°Yo no me he inventado nada. Todo est¨¢ perfectamente documentado con localizaci¨®n en GPS de cada uno de los puntos por donde pasaba el acueducto. He bajado a los r¨ªos a ver los tajamares de la obra y he pedido a los Ayuntamientos que me limpien la maleza para hacer las comprobaciones, donde ninguno de los que me critican ha estado. He recorrido cada uno de sus metros. Otra cosa es que Jim¨¦nez haya publicado un libro financiado por la Generalitat diciendo que acaba mucho antes y esto no le guste. Por cierto, los romanos buscaban agua de manantial, como dec¨ªa Vitrubio, no de r¨ªo. No voy a discutir nada con descalificaciones personales hacia m¨ª. Si quieren un debate con argumentos, estoy dispuesto¡±, concluye.

Por su parte, Isaac Moreno Gallo, ingeniero t¨¦cnico de Obras P¨²blicas, ge¨®grafo, historiador y estudioso del acueducto de M¨¦rida, recuerda que ¡°no se puede valorar una afirmaci¨®n sin conocer en profundidad el estudio¡±. ¡°Desconozco si lo que dice Mart¨ª es cierto o no, pero s¨ª puedo decir que cuando alguien plantea una nueva hip¨®tesis algunos se sienten heridos. En el mundo de la arqueolog¨ªa hay muchas pu?aladas. El experto recuerda que cuando ¨¦l plante¨®, por ejemplo, que la obra del acueducto de M¨¦rida ten¨ªa su origen un par de siglos despu¨¦s de la versi¨®n oficial, recibi¨® numerosas cr¨ªticas.

La arque¨®loga y acad¨¦mica de la Historia Alicia M. Canto, investigadora de los acueductos de It¨¢lica, que suman unos 40 kil¨®metros ¡ªy la primera en estudiar, en 1975, este tipo de obras hidr¨¢ulicas con una visi¨®n de conjunto y no por tramos¡ª, tampoco quiere pronunciarse sobre el estudio de Mart¨ª Mat¨ªes hasta no haberlo le¨ªdo. "Es una hip¨®tesis que une diversos tramos hasta ahora inconexos. Me parece algo largo pero, si se cumple en todo el recorrido la importante cuesti¨®n t¨¦cnica del mantenimiento del gradiente, ?por qu¨¦ no?".