Kit de supervivencia cultural para el encierro (d¨ªa 17)

UN LIBRO: La l¨ªnea del frente, de Aixa de la Cruz

La hora dif¨ªcil del encierro, dice la narradora de esta novela, es esa en la que ya has acabado de trabajar, te duelen los ojos y todav¨ªa no ha empezado el telediario. La narradora se llama Sof¨ªa, acaba de separarse y ha decidido recluirse durante el invierno en el piso que su familia tiene en Laredo para acabar su tesis. ?Tema? La obra de un escritor que milit¨® en ETA y termin¨® suicid¨¢ndose en Argentina. En la urbanizaci¨®n no hay nadie m¨¢s que ella, el portero, un vecino al que esp¨ªa y la telepresencia desde Bilbao de su madre, una de esas personas que tiene la ¡°habilidad de pedir lo que quiere como si te hiciera un favor¡±. El confinamiento de Sof¨ªa ¨Ccada d¨ªa m¨¢s radical¨C contrasta con el de Jokin, un exnovio del instituto al que visita en la c¨¢rcel de El Dueso, no lejos de all¨ª.

Publicada en 2017, La l¨ªnea del frente es una vuelta de tuerca a la narrativa sobre el terrorismo porque da voz a alguien que no fue ni v¨ªctima ni verdugo. ¡°Durante 27 a?os¡±, leemos, ¡°no hice nada heroico ni ruin salvo contagiarme por aquellos vivas a ETA que se coreaban al final de los conciertos, mirar para otro lado¡±. En otras palabras: ¡°Mientras a mi alrededor la gente eleg¨ªa un bando u otro yo eleg¨ªa universidades y montaba a caballo en el club de h¨ªpica¡±. Muchas de las virtudes que dos a?os m¨¢s tarde Aixa de la Cruz (Bilbao, 1988) desplegar¨ªa en Cambiar de idea estaban ya en esta novela que consigue sortear casi todos los peligros: el manique¨ªsmo, la metaliteratura y la autocompasi¨®n. Sin dejar de ser una historia de intriga es el retrato inmisericorde de una generaci¨®n ¨Cy de una clase¨C cuyo emblema es la prematura nostalgia: ¡°Reverenciamos con ese rigor in¨²til, de arque¨®logo, nuestro primer videojuego, nuestra primera colilla, el ¨¢rbol en el que grabamos con faltas de ortograf¨ªa ¡®been here¡¯, las melod¨ªas robotizadas de los tel¨¦fonos m¨®viles viejos¡­ Parecemos supervivientes de un cataclismo que borra y reescribe el mundo a cada minuto y que, por tanto, idealiza cuando recuerda¡±. Una ¡°raza de coleccionistas¡± que se exhibe en una burbuja. Javier Rodr¨ªguez Marcos

La l¨ªnea del frente. Aixa de la Cruz. Salto de P¨¢gina. Disponible en Todos tus libros, Amazon y Fnac.

?

UN DISCO: Carrie & Lowell, de Sufjan Stevens

En ¨¦pocas dif¨ªciles, la m¨²sica nos ayuda a recordar los buenos tiempos. La m¨²sica de Sufjan Stevens siempre tiene algo de buc¨®lica, como si fuera una enso?aci¨®n. Es f¨¢cil dejarse llevar a territorios placenteros con ella. En 2015, el cantautor estadounidense sac¨® un disco que era todo un viaje al pasado para volver a recrear sus mejores a?os familiares. El ¨¢lbum se llam¨® Carrie & Lowell y era un homenaje a su madre Carrie y a su padrastro Lowell. A trav¨¦s de un conjunto de canciones melanc¨®licas, Stevens capta en este ¨¢lbum de folk minimalista recuerdos y pasajes emocionales, algunos bellos, otros dolorosos, pero todos ellos redentores, de su infancia y adolescencia con su madre, una mujer con problemas mentales y alcoh¨®lica que falleci¨® en 2012, y su padrastro. Son los mismos que aparecen en la fotograf¨ªa casera de la portada del disco.

Para este viaje al pasado llamado Carrie & Lowell, su autor abandona las orquestaciones o las incursiones electr¨®nicas de trabajos anteriores, como en Greetings from Michigan: The Great Lake State, Illinois o The Age of Adz, y se centra exclusivamente en instrumentos ac¨²sticos y su hipn¨®tico susurro, aut¨¦ntico eje vertebrador del disco, como si fuera la voz de un cuenta cuentos que nos lleva a conocer a los personajes de otra ¨¦poca. Con esa sencillez a conciencia, su folk tangible y desnudo se recrea en una atm¨®sfera nost¨¢lgica que termina por ser terap¨¦utica. Death with Dignity, Should Have Known Better, Eugene o Fourth of July deslumbran por su emotividad. Son canciones fr¨¢giles, que nos recuerdan los irregulares trazos de humanidad del que se componen las personas. Una obra que de principio a fin guarda algo que ni los mejores estudios de producci¨®n, ni las voces m¨¢s potentes de conservatorio, ni la m¨¢s avanzada tecnolog¨ªa, ni incluso algunos de los m¨²sicos m¨¢s curtidos en el negocio saben mostrar como lo muestra Sufjan Stevens en este ¨¢lbum: guarda esp¨ªritu. El esp¨ªritu de un ser reviviendo detalles mundanos y sencillos que, en tiempos dif¨ªciles, cobran una importancia inmensa. Fernando Navarro

Carrie and Lowell. Sufjan Stevens. Ashmatic Kitty, 2015. El disco se puede escuchar en Spotify y Apple Music.

UNA PEL?CULA: La trinchera infinita, de Aitor Arregi, Jose Mari Goenaga y Jon Gara?o

Si hablamos de supervivientes, de estar encerrados en casa, ah¨ª est¨¢ el Higinio de La trinchera infinita: 33 a?os oculto en s¨®tanos y habitaciones secretas. Tres d¨¦cadas de dolor sordo, de sufrimiento, de angustia ante la posibilidad de que sea descubierto y ejecutado. Si hablamos de supervivientes, Rosa, su esposa, que sacrifica su vida por alguien a quien ama, pero de quien no est¨¢ muy segura si es completamente inocente de lo que le acusan. El mundo de los topos es retratado por Arregi, Goenaga y Gara?o como nunca antes en la pantalla. El tr¨ªo de?Loreak y?Handia crece cinematogr¨¢ficamente y gana en sutileza, matices, a?ade multitud de detalles que hacen de?La trinchera infinita una obra maestra. Por su fotograf¨ªa, por su banda sonora, por c¨®mo avanza en el mismo tono todo el reparto¡­ La c¨¢mara obliga al espectador a convivir con Higinio, a sentirse con ¨¦l agazapado y en tensi¨®n.

Rodada en dos partes, de forma cronol¨®gica, para que el cuerpo de Antonio de la Torre cambiara y retratara fielmente el paso del tiempo, La trinchera infinita, escrita por Luiso Berdejo y Goenaga, demuestra que el tr¨ªo de directores vascos est¨¢ entre lo m¨¢s potente y fecundo del cine europeo, y que De la Torre y Bel¨¦n Cuesta (ganadora del Goya por su Rosa) son, igualmente, acorazados de la interpretaci¨®n mundial. En su estreno en el pasado festival de San Sebasti¨¢n, Arregi comentaba: ¡°Durante la posproducci¨®n, viv¨ªamos con un ojo puesto en nuestro trabajo y otro en la realidad. Y pens¨¢bamos si coincidir¨ªamos con la exhumaci¨®n de Franco. No puedes dejar de plantearte c¨®mo otras noticias pueden marcar el estreno de un filme. Cuando haces una pel¨ªcula hist¨®rica el objetivo es obtener un eco en el espectador, que sienta el paralelismo. En La trinchera infinita el sentimiento que atenaza a Higinio es el miedo, un miedo universal y eterno a la incertidumbre, a lo que hay fuera y a lo que pueda ocurrir¡±. Es decir, sin ni siquiera intuirlo, la cuarentena del coronavirus, pero sin aplausos reconfortantes a las ocho. Gregorio Belinch¨®n

La trinchera infinita. Aitor Arregi, Jose Mari Goenaga y Jon Gara?o. 2019. La pel¨ªcula est¨¢ disponible en Filmin.

UNA SERIE: Better Things?

En estas recomendaciones est¨¢n apareciendo muchos personajes que son supervivientes en muy diferentes sentidos. Sam Fox, la protagonista de esta comedia, lo es sin duda. Actriz y madre soltera con tres hijas adolescentes, convive con el caos diariamente. Tambi¨¦n la propia serie es una superviviente que parece mentira que ahora est¨¦ emitiendo su cuarta temporada. Pamela Adlon y Louis C.K. crearon esta serie cuya andadura arranc¨® en 2016. Hab¨ªa pasado un a?o desde la quinta temporada de Louie, anterior proyecto televisivo del c¨®mico y en el que su amiga Pamela tambi¨¦n participaba de forma ocasional. La cr¨ªtica recibi¨® con entusiasmo Better Things y su mezcla de humor bestia e incluso escatol¨®gico con una mirada tierna y emocionante a la maternidad, a las relaciones familiares y amorosas y a la lucha de ser mujer en el siglo XXI. Pero en noviembre de 2017, The New York Times public¨® un reportaje en el que varias mujeres denunciaban comportamientos sexuales inapropiados de C.K., algo que era un secreto a voces en el mundillo y que el humorista reconoci¨®. La brillante segunda temporada de Better Things, de la que era coguionista, se cay¨® de todos los premios y su futuro peligr¨®. Por suerte, Adlon logr¨® mantener la serie en solitario con un enfoque m¨¢s personal y feminista. Better Things es pura honestidad. A veces, incluso cruda. Capaz de sacar una carcajada y una l¨¢grima en cuesti¨®n de segundos. Tambi¨¦n es la genuina expresividad de Pamela Adlon y la sinceridad que transmite a trav¨¦s de sus ojos, sus resoplidos y sus risas. La vida es una lucha, y Sam y Better Things lo saben bien. Natalia Marcos

Better Things. Pamela Adlon y Louis C.K.. FX, 2016. La serie est¨¢ disponible en HBO.

UN C?MIC: El bus

El noveno arte siempre ha demostrado una querencia especial por el surrealismo. Quiz¨¢s porque una de las primeras expresiones modernas de esta corriente naci¨® en las p¨¢ginas de la prensa estadounidense de principios de siglo: una d¨¦cada antes de que Breton firmara el Manifiesto del surrealismo, George Herriman ya lo practicaba avant la lettre en su serie Krazy Kat. El condado de Coconino subvert¨ªa las leyes de la f¨ªsica y de la realidad con la misma intensidad que los ladrillos volaban en las vi?etas. Con ese ejemplo magistral, es f¨¢cil entender que el delirio surrealista contagiara con facilidad a muchos autores y autoras como Fred, cuya imaginaci¨®n desbordante en Phil¨¦mon convierte lo imposible en acerada cr¨ªtica de lo posible (apunten ambas para pedirlas a su librer¨ªa cuando esto acabe: exquisitamente editadas por Taschen, la primera, y por ECC Ediciones, la segunda). Un comez¨®n surrealista que en los Estados Unidos se propag¨® por el underground hasta llegar a Paul Kirchner.

Disc¨ªpulo de Wally Wood, su est¨¦tica clasicista contrasta con la explosi¨®n cerebral que supone Dope Rider, publicado en la revista marginal High Times. Una parodia del personaje del Ghost Rider de Marvel que supone una inyecci¨®n de LSD directa al nervio ¨®ptico. A finales de los 70, comenz¨® a publicar en la famosa Heavy Metal una tira que manten¨ªa inc¨®lume su rabioso surrealismo, a?adiendo unas cuantas de toneladas de vitriolo hacia la sociedad moderna. El bus repite un esquema fijo: un hombre com¨²n y corriente espera o coge el autob¨²s. A partir de ah¨ª, todo es posible: geometr¨ªas imposibles, monstruos, dimensiones paralelas, paradojas temporales¡­ La sociedad moderna desmonta y pervierte sus reglas en estas tiras mudas absolutamente hipn¨®ticas. La editorial francesa Tanibis ha publicado en internet una edici¨®n en PDF (en Espa?a fue editada hace a?os por la desaparecida 9thC¨®mics). No lo duden, el idioma en esta caso no es una barrera. ?lvaro Pons

El bus. Paul Kirchner. 1987. El c¨®mic se puede descargar la p¨¢gina de la editorial francesa Tanibis. Las planchas de Dope Rider pueden ser le¨ªdas, en ingl¨¦s, en el blog del autor.

UN VIDEOJUEGO: The Witcher 3

Antes de hacerlo en Netflix, el brujo Geralt de Rivia vivi¨® sus aventuras en los videojuegos. Y aunque, en puridad, antes incluso lo hizo en los libros del polaco Andrzej Sapkowski, lo cierto es que fue el medio interactivo, y gracias a los juegos de la compa?¨ªa CD Projekt, tambi¨¦n polaca, que el brujo dio un salto y lleg¨® a millones de hogares. Y de entre todos los juegos de De Rivia, sin duda alguna The Witcher 3 se lleva la palma. Hablamos de una regi¨®n centroeuropea anegada de pantanos y criaturas feroces, y de un hombre adusto, de pelo blanco y el cuerpo surcado por cicatrices, que les da caza en una misi¨®n casi monacal. En 2015 sal¨ªa al mercado The Witcher 3: Wild Hunt, un juego que hac¨ªa m¨¢s accesibles las mec¨¢nicas de combate, pociones y hechizos de sus predecesores, a la vez que profundizaba en una historia soberbiamente escrita y luc¨ªa m¨²sculo t¨¦cnico con unas localizaciones y paisajes realmente hermosos. Dos expansiones profundas como un juego entero completaron el contenido de un juego magistral. Jorge Morla

The Witcher 3. CD Projekt. 2015. El juego est¨¢ disponible para Windows, PS4, Xbox One y Switch.