Literatura, s¨ª. Poes¨ªa, casi

Juntamos en una mesa virtual a un poeta que ha escrito canciones para la Orquesta Mondrag¨®n o Loquillo, Luis Alberto de Cuenca; dos cantautoras, una catalana, Mar¨ªa Rod¨¦s, (el 25 de septiembre edita Lilith, un disco sobre las brujas), la otra mexicana, Julieta Venegas, ?conectada desde Buenos Aires, donde vive hace tres a?os¡ª; y?a un rapero metido a escritor, Tote King, que este a?o public¨® su primer libro, B¨²nker, para hablar de la relaci¨®n entre las letras de las canciones y la literatura. Estas fueron sus conclusiones.

PREGUNTA. Empecemos yendo al grano: ?son las letras de las canciones literatura?

LUIS ALBERTO DE CUENCA:?Yo pienso que s¨ª, rotundamente. Es un g¨¦nero.

JULIETA VENEGAS:?Estoy de acuerdo. Es un g¨¦nero, es algo que tiene que ver con la palabra, que se combina con la m¨²sica. Es palabra y tiene su peso.

L. A. C.: Es palabra art¨ªstica, por eso tiene su peso.

MAR?A ROD?S:?Yo dir¨ªa que es un g¨¦nero espec¨ªfico de la poes¨ªa. No es poes¨ªa, pero est¨¢ muy cerca.

TOTE KING:?Creo que lo es sin duda. La calidad va a depender de las personas, pero es literatura.

P. Ya hemos quedado en que es un g¨¦nero literario. Pero no es poes¨ªa, ?o s¨ª lo es?

M. R. Para m¨ª s¨ª podr¨ªa ser visto como un g¨¦nero espec¨ªfico dentro del campo de la poes¨ªa. Teniendo en cuenta que la poes¨ªa est¨¢ en todas partes.

L. A. C. Yo me oriento m¨¢s a la poes¨ªa que al letrismo. Y cuando me pongo a hacer un poema, llevo el mono de trabajar la poes¨ªa. Y cuando hago una letra, me pongo uno distinto. De modo que son cosas diferenciadas. Aunque nacieran juntas la m¨²sica y la poes¨ªa. La canci¨®n l¨ªrica era algo que se interpretaba siempre con un instrumento musical, con una lira. Pero luego se ha diferenciado lo suficiente como para que sea distinto trabajar como letrista que como poeta. Las letras tienen estribillos, obligaciones m¨¦tricas y ret¨®ricas, que las hacen muy diferentes del poema.

T. K. Estoy muy de acuerdo. Sobre todo con la parte m¨¦trica. Yo no escribo ni leo poes¨ªa. Soy un p¨¦simo lector de poes¨ªa. Leo novela, ensayo, relatos¡­ Pero es verdad que hay similitudes obvias entre el rap y la poes¨ªa. Y estoy de acuerdo en el mono de trabajo. Para encajar un rap en un ritmo, lo m¨¢s importante para m¨ª es la est¨¦tica. C¨®mo entra el rapeo, c¨®mo resuenan las palabras, los bombos y las cajas es mucho m¨¢s importante que lo que va a contarme y la profundidad que pueda tener un texto separado. Si quiero un texto separado, voy a un libro.

L. A. C. El ritmo es muy importante en el rap.

T. K. Para m¨ª, s¨ª. Yo he sido muy tachado en mi gremio de esteta. No me importa. Cuando quiero contar algo encuentro la instrumental en la que lo puedo contar. Pero intento que lo que suene sea un todo. Y que haya belleza. Lo que los americanos en el rap llaman el word play. El juego que hay entre el verso y el instrumental. La poes¨ªa no tiene instrumental. La letra de rap tiene que entrar en un sitio. Hay gente que no respeta eso y a m¨ª no me gusta.

J. V. Yo tambi¨¦n pienso que son muy diferentes. Antes pensaba que era lo mismo. Soy muy fan de la poes¨ªa. Y mi relaci¨®n con ella es diferente a mi relaci¨®n con las letras. La letra la construyo en relaci¨®n con la m¨²sica y el poema se sostiene por s¨ª mismo. En mis intentos de poes¨ªa queda claro que a m¨ª sin el elemento musical, me cuesta. Porque trato de escribir un poema y no s¨¦ reconocerlo. Siempre son letras de canciones en camino. No s¨¦ escribir poes¨ªa pero me gusta mucho leerla, la verdad.

P. La pregunta m¨¢s t¨®pica de la historia. ?Qu¨¦ escrib¨ªs antes, la m¨²sica o la letra?

L. A. C.?Yo he trabajado mucho sobre maquetas. Me han dado un tar¨ª y he tenido que poner una frecuencia textual que se adaptara a la m¨²sica que me ven¨ªa dada. Y he tenido el contrario. Y textos m¨ªos han sido musicados sin que yo tuviera nada que ver con ello.

P. ?Prefieres que tus letras cuenten una historia o que sean m¨¢s po¨¦ticas, m¨¢s de im¨¢genes que de historias?

L. A. C.?A m¨ª la narraci¨®n me parece tambi¨¦n muy po¨¦tica. Mi poes¨ªa es muy narrativa. En el fondo, la primera poes¨ªa era narrativa. Homero y compa?¨ªa contaron una historia en verso.

J. V. Yo escribo la melod¨ªa junto con la letra. ?ltimamente me toc¨® trabajar en un par de musicales en los que me toc¨® ser letrista. Y me encant¨®, porque me parece igual de importante la letra que la m¨²sica. Una canci¨®n lo es cuando tiene los dos elementos. No hay que meterle cosas a la fuerza a la m¨²sica sino trabajarlo. Eso es lo m¨¢s divertido de escribir canciones, componer un tejido.

M. R. Yo al principio hac¨ªa letras basadas en mis sentimientos. Un poco lo que todos pensamos cuando hablamos de cantautores. Con el tiempo me cans¨¦ de hablar de m¨ª y mis neurosis y empec¨¦ a buscar motores creativos que estuvieran apartados. Empec¨¦ a inspirarme en historias que fueran ajenas a mi vida.

P. ?Os met¨¦is en personajes para hacer letras?

L. A. C.?Siempre hay un personaje detr¨¢s del escritor. Es la ficcionalizaci¨®n del yo. Nos inventamos un personaje que somos nosotros y a la vez no. Ese personaje nos ayuda a escribir sin la pulsi¨®n narcisista de tener que hablar de nosotros mismos en primer¨ªsima persona. Todos los personajes en nuestras canciones somos nosotros, pero a la vez hemos delegado en ellos, ficcionalizados al margen de nuestra biograf¨ªa.

P. ?Los raperos tienen que hablar siempre de s¨ª mismos?

T. K. No, para nada. El rap es una chispa de cualquier cosa. Para m¨ª es un segundo al que hay que agarrarse. Es igual a cuando est¨¢s escribiendo un relato y sabes que es el d¨ªa. El rap tiene esa fama de ego por la gente que est¨¢ fuera y no entiende ciertos c¨®digos del g¨¦nero. Una persona que nunca ha visto baloncesto ve a Michael Jordan mascando chicle mientras pega un mate¡­ ese rollo tan est¨¦tico, y cree que eso es baloncesto, pero el baloncesto no es eso, es mucho m¨¢s. La gente que no entiende los c¨®digos piensa que el rap es egoc¨¦ntrico. Que habla de lo larga que la tenemos, lo guay que somos. Pero eso es un ejercicio, un entrenamiento. Y hay grandes letristas del rap que han hablado de absolutamente de todo.

P. ?Cu¨¢les son vuestros letristas favoritos?

J. V. Charly Garc¨ªa. ?l pas¨® por un mont¨®n de cosas y desarroll¨® ese juego con la alegor¨ªa que ha hecho siempre: hablar de una cosa para hablar de otra, es algo superest¨¦tico. Y de ahora, Ana Tijoux, que es rapera, me parece una chava con mucho contenido, mucha expresividad, mucha pasi¨®n y una forma de expresarse con la que conectas mucho.

T. K. Anita es buen¨ªsima. A m¨ª me encanta. Pero de siempre me gusta Nas. Uno de los padres del rap noventero. Tiene un par de discos que son envidiables.

M. R. Por decir dos cercanos, me gustan mucho Christina Rosenvinge y Nacho Vegas. Son dos letristas de referencia que de vez en cuando me leo.

L. A. C. Leonard Cohen y tambi¨¦n Joaqu¨ªn Sabina. Me voy por los valores m¨¢s acrisolados.

P. Leonard Cohen era de los que recog¨ªa letras de canciones en libros. No es el ¨²nico, tambi¨¦n Dylan, que no encontr¨® p¨²blico y la edici¨®n en libro fue un fracaso. ?Qu¨¦ opin¨¢is de los libros de letras de canciones?

T. K. A m¨ª me parece bien que fuera un fracaso. Quiz¨¢s sea un poco bestia, pero voy a decir la verdad: yo no soporto un libro de letras de nadie. No comprar¨ªa nunca un libro de canciones de nadie. Ni de Dylan, que me las s¨¦ de pe a pa y que las escuchaba en casa de peque?ito con mis padres. No tiene sentido. Hay gente que piensa que el libro es un formato, yo no pienso eso. Yo no opino que un libro de cocina tenga el mismo valor que Los detectives salvajes de Roberto Bola?o. No puede tenerlo. Yo jam¨¢s apoyar¨ªa la venta de un libro con letras de canciones de nadie. Si quiero escuchar una canci¨®n de Dylan, escucho a Dylan. Y si quiero meterme m¨¢s y m¨¢s, la paro, me voy a Metro Lyrics y la disfruto. Pero un libro es otra cosa.

L. A. C.?Puedo estar de acuerdo con eso, pero yo creo que hay letristas que trascienden su condici¨®n. Por ejemplo, Leonard Cohen.

J. V. Cohen es otra cosa. Yo tengo libros suyos que no s¨¦ si son poes¨ªa o letras. No conozco tanto su m¨²sica, pero sus poemas me parecen preciosos. A m¨ª tampoco me gustan los libros de letras. Pensando en Dylan, me gust¨® mucho su libro de memorias aunque no me guste su m¨²sica. Tambi¨¦n me gust¨® mucho el de Christina Rosenvinge, porque combina las letras con ponerte en el contexto de lo que estaba pasando. Eso es diferente. Tiene m¨¢s que ver con la memoria. Porque yo estoy de acuerdo con Tote, nunca he le¨ªdo un libro de canciones. Solo lo he hecho con Caetano Veloso porque me cuesta mucho entenderlo y amo lo que hace. Y s¨ª, tengo un libro suyo. Y s¨ª, lo leo.

M. R. Yo no los compro. Tengo el de Christina que creo que es cierto que tiene ese valor a?adido de que te pone en contexto c¨®mo nacieron esas letras y eso me parece muy bonito. Pero leerme un libro solo con las letras¡­ no es que tenga nada en contra, pero es verdad que estando en Internet, nunca lo he hecho.

P. ?Y qu¨¦ opin¨¢is del Nobel a Dylan? En teor¨ªa eso es dar a las letras de las canciones una categor¨ªa de alta literatura que hasta entonces no ten¨ªan.

L. A. C. Creo que Dylan se merece cualquier cosa, pero un Nobel de Literatura es algo a lo que no estaba llamado. Era una operaci¨®n de rescate de un premio bastante oscurecido. Quiz¨¢s porque vengo de la literatura pienso que son maravillosas sus letras, pero no como para Nobel.

J. V. No me entusiasm¨®, porque a mi el Nobel me parece una linda oportunidad de cruzarte con autores que quiz¨¢s no hubieras conocido nunca. Hay muchos escritores que ahora me son muy queridos y que no conoc¨ªa antes del Nobel y pienso que es una oportunidad perdida. No fui a comprar un libro de letras de Dylan porque se lo dieron ni me gust¨® m¨¢s ni menos.

T. K. A mi me hubiera encantado que alguien me hubiera dicho: ¡°Dylan ha escrito un libro impresionante¡±. Pero, por sus letras...

M. R. Yo tambi¨¦n lo vi un poco como una estrategia. Pero tampoco me indign¨¦. Fue un recordatorio para leerle y escucharle un poco m¨¢s. Yo, como Julieta, tampoco hab¨ªa entrado mucho nunca en el mundo Dylan y fue un aviso para descubrirlo.

P. Quer¨ªa comentar el caso Valt¨°nyc. El hecho de que se condene a alguien a penas de c¨¢rcel por el contenido de una letra ?Qu¨¦ opin¨¢is?

L. A. C. Yo creo en la libertad de expresi¨®n por encima de todo.

J. V. Yo opino lo mismo. En este momento tenemos tantos rollos en el mundo, que no tener libertad de expresi¨®n¡­ Aunque no conozco muy bien el caso

P. Se hablaba de incitaci¨®n al odio. ?Las letras pueden ser peligrosas?

J. V. Odio es lo que generan algunos presidentes en sus discursos, no una canci¨®n. Pero no conozco el contenido de la canci¨®n as¨ª que no puedo opinar

L. A. C. Yo tampoco.

T. K. Si quer¨¦is os lo resumo. Valt¨°nyc rapeaba muy mal. Eso es lo ¨²nico por lo que a ese hombre deber¨ªan haberle hecho algo. Por lo mal¨ªsimo que es. Pero fue una verg¨¹enza. Una m¨¢s de las verg¨¹enzas de nuestro pa¨ªs, intentar meterlo en la c¨¢rcel por el contenido de sus canciones.

P. Est¨¢ el tema de los pr¨¦stamos. Hace unos meses un libro dec¨ªa que Bunbury hab¨ªa cogido m¨¢s de 500 versos sin acreditar. ?l defend¨ªa que no es tan distinto a usar un titular de peri¨®dico. Que una vez que entra en tu obra pasa a ser parte de ella.

M. R. A m¨ª muy bien no me parece.

L. A. C. Lo mejor es citar. Ahora bien, lo que es cierto es que lo que no es tradici¨®n es plagio en cierto modo. Lo que los eruditos llaman intertextualidad, que es mucho m¨¢s elegante, pero yo creo que si te apropias de un texto para urdir uno tuyo, lo mejor es que lo cites.

P. ?T¨² has cogido cosas prestadas de otros en alg¨²n momento, Tote?

T. K. S¨ª. A m¨ª me gusta mucho una cita que le¨ª en un libro de Vila Matas: ¡°No me juzgues por lo que copio, sino por c¨®mo lo copio y qu¨¦ hago con eso¡±. ?C¨®mo copio yo? Estoy leyendo el diario de Jules Renard y encuentro que tiene una parte que son solo frases que se le ocurren y apunta. A lo mejor dice que ¨¦l hasta en las mejores sonrisas ve dientes can¨ªbales. Bueno, pues esa frase ya es m¨ªa. Me ha encantado y en una rima m¨ªa la meto. Hago puzzles a mi manera.

L. V. Yo leo una historia sobre una mujer a la que le pasa tal y me acuerdo de algo que me pas¨®. Todo te alimenta, no s¨¦ si de una forma directa tomo frases. Y he musicalizado poemas que no s¨¦ si voy a publicar porque hay todo un tr¨¢mite que hay que hacer. Coger un poema y hacer una canci¨®n sin cambiar una palabra es un ejercicio que me divierte. Pero todo lo que lees te influye, a veces de forma inconsciente. Escribes algo y dices: ¡°?Esto ha salido de alg¨²n lado o es m¨ªo?¡±. Tendr¨ªa que hurgar mucho para saberlo.

P. ?Qu¨¦ opin¨¢is de las letras del trap que tienden a escandalizar tanto?

J. V. A m¨ª Tangana me gusta. La primera canci¨®n que escuch¨¦ fue Mala mujer, porque a mi hija le encantaba y luego vi que la gente le criticaba por decirle a una mujer ¡°mala¡±.

L. A. C. Sin conocerlo digo lo mismo que con respecto a Valt¨°nyc, que todo lo que sea censura es malo, venga de donde venga.

T. K. Hace como 10 a?os hab¨ªa un programa de talentos que se llamaba Factor X y salieron dos latinos a cantar reguet¨®n y una de las chicas que estaba en el jurado les ech¨® escandalizada: ¡°Estas letras son machistas, qu¨¦ verg¨¹enza, c¨®mo ven¨ªs aqu¨ª a cantar eso¡±. Yo por supuesto me met¨ª con esa mujer en una letra. No soy muy fan de ese g¨¦nero, es m¨²sica bailable y yo bailo poco, pero lo que no voy a permitir es que nadie diga nada de eso. Entre otras cosas porque trap y reguet¨®n hay de todos los tipos. El reguet¨®n no es m¨¢s mis¨®gino que Cesare Pavese y El oficio de vivir que lleva siendo reivindicado 40 a?os. Cualquier persona en cualquier g¨¦nero puede ser machista. Lo que s¨ª es verdad es que, bajo mi punto de vista, el trap y el reguet¨®n son g¨¦neros infantiles. Est¨¢n hechos para un p¨²blico m¨¢s chiquit¨ªn.

P. Eso tambien se dec¨ªa del rap.

T. K. Es que lo era, hasta que llegaron generaciones de gente algo m¨¢s mayor. Yo creo que todo se resume en que cuando te haces m¨¢s mayor y te das cuenta de que te vas a morir empiezas a hablar de otras cosas. Cuando tienes 20 a?os todo lo que te importa es perseguir a una mujer.

J. V. Yo tengo una hija de 10 a?os y a veces por ella estoy escuchando trap y hay cosas que se salen de la media. Hay algunas muy gen¨¦ricas, eso es lo que me aburre. Ya s¨¦ cu¨¢l es el final de esta historia y eso no me interesa. No es una cuesti¨®n del g¨¦nero es que me desespera escuchar una canci¨®n que ya s¨¦ lo que va a decir.

P. Todo el pop y el rock eran m¨²sica juvenil.

T. K. Madura cuando los artistas se hacen mayores y siguen en el g¨¦nero y entonces te puede interesar un tipo de 40 a?os que obviamente te va a hablar de otras cosas.

P. ?Y no crees que quiz¨¢s el problema de que no lo entendamos es el salto generacional?

T. K. Creo que lo importante es que hay reguetoneros como Tego Calderon que no es un ni?o de 20 a?os y canta de otras cosas.

M. R. Cumplir a?os tampoco es madurar. Puede haber gente de 50 con una madurez de alguien de 20.

P. ?Escrib¨ªais distinto cuando erais j¨®venes? ?Not¨¢is el momento en que empezasteis a cambiar en vuestras letras?

L. A. C. Absolutamente, se nota totalmente el paso del tiempo en todo. Se escribe de una manera a los 17 otra a los 20 a los 30, los 40, los 50¡­ Nos marca la biograf¨ªa de una manera indeleble.

J. V. Y si no cambiaras ser¨ªa muy deprimente. ?En serio tu discurso no cambia? ?En la vida no cambias? Cuando la gente me habla de canciones que hice hace 20 a?os, les digo que esa canci¨®n ah¨ª la tienes. No la voy repetir, no existe m¨¢s, yo no me voy a sentar a buscarla. Estoy a otras cosas. No creo que pudiera volver ni me interesa. Ya lo hice, ya est¨¢.

M. R. Quiz¨¢s no es tanto la edad sino la experiencia. Al haberlo hecho vas evolucionando como escritora y cantante. Si una persona hiciera su primera canci¨®n con 50 a?os no ser¨ªa tan distinta a la de alguien de 20. La experiencia juega un papel m¨¢s importante que la biograf¨ªa, que tambi¨¦n.

P. Ten¨¦is una letra favorita.

J. V. En este momento en el mundo la letra que m¨¢s me ha acompa?ado es Divino maravilloso de Caetano Veloso, que dice: ¡°Es preciso estar atentos y fuertes. No tenemos tiempo de temer a la muerte¡±. Tiene una cosa de mucha vitalidad que a m¨ª me emociona un mont¨®n. Hay una versi¨®n de Gal Costa que es preciosa: ¡°?Mi letra! Vamos a salir y hay que estar vivas!¡±-

M. R. Hay una canci¨®n que me emociona mucho, que es muy melanc¨®lica, la verdad. Le facteur, de Moustaki. Y tambi¨¦n la m¨²sica me parece preciosa, no lo puedo separar.

T. K. Yo, por deciros algo, lo que m¨¢s he escuchado en los ¨²ltimos a?os es un chico que ya lleva siete u ocho a?os, y que dej¨® a todo el mundo emocionado desde que sali¨®. Lo que pasa es que es una persona extra?a que cuelga canciones en Internet y despu¨¦s desaparece. Pero es un¨¢nime, es una pasada. Es un tipo de Cadiz que se llama Dheformer Galinier y tiene un tema que se llama Cadiz state of mind, en la que hace una descripci¨®n de C¨¢diz que no s¨¦, hay que escucharlo, es espectacular. Te transporta a la pobreza de C¨¢diz. Es ingenioso, pero tiene la capacidad que solo tienen los grandes del rap, de tener tantas l¨ªneas buenas que no te da tiempo a descubrirlo todo en la primera escucha.

P. Una ¨²ltima curiosidad, ?a alguno de vosotros le pasa que hay un artista que le gusta, pero que sus letras le abominan tanto que no puede escucharlo?

J. V. Si la letra no me gusta, no puedo con la canci¨®n. Siempre me atrae primero la m¨²sica, pero si la letra no tiene algo que me atrapa no puedo escucharla. Me desespero.

L. A. C. Yo puedo abstraerme del horror de la letra.

M. R. Hay autores a los que se lo permites. Que te gustan tanto o te caen tan bien que se lo perdonas.