Luces (Victoriano, Ortega, Garz¨®n...) y sombras (Madrid y Sevilla) del 2020 taurino
Ni la Comunidad de Madrid ni la Real Maestranza han permitido espect¨¢culos taurinos
S¨ª, s¨ª, ese ganadero que el 24 de agosto de 2018 dijo en el Club Cocherito de Bilbao que ¡°he tenido que quitar vacas por exceso de bravura; no me han servido para el tipo de toro que busco por su exceso de bravura¡±¡; ese afamado criador llamado Victoriano del R¨ªo, referente del toro moderno y comercial, exigido por las figuras, lidi¨® un corrid¨®n de toros el pasado 18 de septiembre en Nimes y dej¨® a los toreros del cartel con dos palmos de narices, y a todo el mundo boquiabierto, ante la avalancha de casta y movilidad de los seis oponentes.
Lo que son las cosas¡ No se sabe si don Victoriano fue uno de los sorprendidos aquella tarde; pero, una de dos, o tuvo un despiste y se le colaron unas vacas ¡®bravas¡¯ en el tentadero, o alg¨²n guapo semental vecino salt¨® la valla en noche de luna llena, congeni¨® con j¨®venes juguetonas y el fruto de aquel amor fugaz fue un regalito para Enrique Ponce, Emilio de de Justo y Curro D¨ªaz, que eran los que vest¨ªan de luces aquella tarde francesa.
Juan Ortega (Sevilla, 1990), un torero que tom¨® la alternativa en septiembre de 2014, ha tratado de no perder el rumbo ni el ¨¢nimo en la traves¨ªa de un largo desierto, y ha alcanzado un oasis que le puede proporcionar la gloria so?ada. Precedido de destellos luminosos de su buen toreo, el 30 de agosto, en Linares, ante un nobil¨ªsimo toro de Parlad¨¦, dibuj¨® su particular visi¨®n de la belleza del toreo, y se erigi¨® en la sorpresa del a?o, que corroborar¨ªa m¨¢s tarde en la feria de Ja¨¦n y en C¨®rdoba.
Ortega ha sido la revelaci¨®n y afronta el 2021 con todas las garant¨ªas si le acompa?a la suerte y se lo permiten los que mandan en las cloacas del toreo.
Juan Ortega, uno de los protagonistas de 2021, si le acompa?a la suerte y se lo permiten
Jos¨¦ Mar¨ªa Garz¨®n (Sevilla, 1972) es un empresario taurino atrevido, avezado, valiente e innovador. No es el ¨²nico, pero ha sido el m¨¢s destacado en la temporada ya pasada. Merece respeto y reconocimiento porque ha demostrado que lo imposible es aquello que no se intenta.
El 6 de agosto organiz¨® una interesante corrida en la plaza de El Puerto (Ponce, Morante y Aguado, con toros de Juan Pedro Domecq). El festejo result¨® pol¨¦mico, le llovieron las cr¨ªticas (las m¨¢s duras de sus propios compa?eros, esos que estaban escondidos, acobardados, y con sus plazas cerradas), se defendi¨® con argumentos razonables, y no se dio por vencido.
Dos meses despu¨¦s, celebr¨® un mano a mano entre Morante y Juan Ortega en la plaza de C¨®rdoba, y la afici¨®n lo acogi¨® como un grande.
Victoriano del R¨ªo, Juan Ortega y Jos¨¦ Mar¨ªa Garz¨®n han destacado en este an¨®malo a?o taurino. Pero no han sido los ¨²nicos.
Otros que merecen gozar del podio de los mejores son los ganaderos Santiago Domecq, Zalduendo, La Quinta y Miura; los empresarios Alberto Garc¨ªa, los onubenses Carlos Pereda y Oscar Polo, Manuel Mart¨ªnez Erice, Jorge Arellano y Carlos Z¨²?iga, entre otros; y toreros como Morante de la Puebla, Daniel Luque, Finito de C¨®rdoba, Morenito de Aranda, G¨®mez del Pilar, Octavio Chac¨®n, Rub¨¦n Pinar y, especialmente, Antonio Ferrera, que protagoniz¨® una gloriosa jornada el 24 de octubre en Badajoz, cuando se encerr¨® con seis toros de Zalduendo, muy serios y ¨¢speros, con los que ofreci¨® una magistral lecci¨®n de heterodoxia taurina.
?Qu¨¦ pena que este torero genial sea persona tan peculiar y se resista a contar su tauromaquia fuera de los ruedos¡!
Largo y brillante es el apartado de los toreros de plata que han triunfado este a?o. A riesgo de alg¨²n olvido ah¨ª van los nombres de los banderilleros Juan Jos¨¦ Trujillo, Lipi, Jes¨²s Arruga, Juan Contreras, Jos¨¦ N¨²?ez Pilo, Antonio Chac¨®n, Perico, V¨ªctor Saugar Pirri, Candelas, Agust¨ªn de Espartinas, Curro Javier, Fernando S¨¢nchez, Javier Ambel, Ra¨²l Caricol, Jos¨¦ Chac¨®n, Miguel Murillo, Montoli¨², Ra¨²l Ruiz, Alberto Carrero, Vicente Herrera, Javier Valdeoro¡
Estas fueron algunas de las luces de la sombr¨ªa primera temporada de la pandemia.
?Y las sombras?
No han sido pocas, ciertamente. Pero entre el acoso y constante hostilidad del Gobierno, y la desesperante pasividad del sector (con la excepci¨®n del trabajo eficaz y te?ido de ingenuidad de la Fundaci¨®n Toro del Lidia y el intento mejorable de la Gira de Reconstrucci¨®n) destacan, por encima de todo, la actitud de dos importantes empresas taurinas: Plaza1 y Pag¨¦s, dirigidas por Rafael Garc¨ªa Garrido y Sim¨®n Casas, la primera, y Ram¨®n Valencia, la otra, que est¨¢n al frente de Las Ventas y La Maestranza, respectivamente.
Mal a?o ha elegido Cultura para premiar a la Real Maestranza de Caballer¨ªa de Sevilla
Las dos plazas han permanecido cerradas durante todo el a?o 2020. Los responsables de la madrile?a han ofrecido argumentos de todo tipo para justificar su decisi¨®n; Valencia se ha acogido a las limitaciones impuestas por la Junta de Andaluc¨ªa.
Ni unos ni otro han estado a la altura de las circunstancias ni de la responsabilidad que contrajeron como empresarios de los dos cosos m¨¢s importantes del pa¨ªs.
Tampoco lo han estado la Comunidad de Madrid ni la Real Maestranza de Caballer¨ªa, propietarias de las plazas.
?Cu¨¢l era el problema? ?El canon de 2.800.000 euros que Plaza1 debe abonar a la Comunidad por temporada y que, se supone, entra en vigor en cuanto se abran las puertas? ?El canon del 22 por ciento de la facturaci¨®n por taquilla que cobra la Real Maestranza por cada festejo?
No se sabe porque ni empresarios ni propietarios han abierto la boca, pero algo de ello debe haber. ?Tan dif¨ªcil era contar a la sociedad lo sucedido?
En fin, que Las Ventas y La Maestranza han podido celebrar festejos y no lo han hecho. Hubo momentos en que se permit¨ªan aforos del 75 por ciento en la Comunidad de Madrid, y del 50 en Andaluc¨ªa. Es posible que los n¨²meros no salieran si todas las partes no se aven¨ªan a un sacrificio en beneficio de la fiesta. Y no se han avenido, claro est¨¢. Ni el Gobierno madrile?o ni la Real Maestranza movieron un dedo para que as¨ª fuera.
Y los empresarios han pecado de cobard¨ªa y de falta de transparencia, una vez m¨¢s.
No se sabe, pues, por qu¨¦ no han abierto Madrid y Sevilla en alg¨²n momento del a?o, cuando era imprescindible que as¨ª sucediera porque una y otra son la bandera de la tauromaquia y referentes para el mundo taurino.
Otra vez, el oscurantismo de todos en perjuicio de la fiesta. Otra vez, la cobard¨ªa.
Por cierto, mal a?o ha elegido el Ministerio de Cultura para conceder la Medalla al M¨¦rito en las Bellas Artes a la Real Maestranza sevillana. Re¨²ne m¨¦ritos m¨¢s que suficientes para ese galard¨®n y otros, pero no cuando no ha dado un paso al frente (que se sepa, al menos) para aportar ox¨ªgeno a la fiesta en una temporada tan dram¨¢tica.
?Y Madrid? Muchos golpes de la presidenta Isabel D¨ªaz Ayuso, pero pan, poquito, como todos los dirigentes (taurinos) auton¨®micos.
Algunas luces honorables y fulgurantes para el orgullo de todos, y otras, trist¨ªsimas, para el rechazo y la condena.
Con amigos como los de Madrid y Sevilla (empresarios e instituciones), ?para qu¨¦ quiere la tauromaquia enemigos?
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