Premios Princesa de Asturias 2023: la empat¨ªa de Meryl Streep y el silencio de Murakami, en una ceremonia marcada por las ausencias

En el d¨ªa de los Premios Princesa de Asturias abundan en Oviedo varias tipolog¨ªas de humanos: la gente con traje, los polic¨ªas nacionales, los periodistas acreditados y los gaiteros. Alg¨²n helic¨®ptero sobrevuela el centro de la ciudad, dedicado esta tarde al monocultivo de los premios. Tambi¨¦n abunda eso que se empieza a llamar princesers: los curiosos que se apostan durante la semana delante del hotel de la Reconquista tratando de vivir la magia de encontrar en persona a alguien que han visto por la tele. Aunque en Asturias no llueve tanto como se piensa fuera, resulta que el d¨ªa de la ceremonia fue una jornada de grisura y rachas de orbayu con la suerte de que, por poco, la lluvia respet¨® la entrada al teatro Campoamor de la Familia Real y los galardonados por la alfombra a?il. Acudieron el rey Felipe VI, la reina Letizia, la princesa Leonor, la infanta Sof¨ªa y la reina em¨¦rita Sof¨ªa, que presenci¨® el acto desde el tradicional palco a la derecha del escenario, mientras el resto lo presid¨ªa.

Ya en la ceremonia, Meryl Streep, premio de las Artes, dijo que ¡°la empat¨ªa es el coraz¨®n palpitante del don del actor¡±, en una alocuci¨®n llena de sentimiento, magn¨¦tica, muy teatral, que mantuvo al p¨²blico, repleto de personalidades y autoridades, con el aliento contenido. La actriz derroch¨® simpat¨ªa durante su estancia esta semana en Oviedo, bailando al ritmo de las bandas de gaitas, tumb¨¢ndose en el sof¨¢ durante su encuentro con Antonio Banderas o asistiendo a una representaci¨®n de estudiantes de arte dram¨¢tico en Gij¨®n. En la ceremonia hizo un alegato de la interpretaci¨®n como un acto de empat¨ªa. Seg¨²n relat¨®, desde que somos beb¨¦s y lloramos solo con ver llorar a otra persona, vamos perdiendo nuestra capacidad de ponernos en el lugar de los dem¨¢s. Llega el inter¨¦s propio, la ideolog¨ªa o la desconfianza.

¡°As¨ª llegamos a este triste momento de la historia¡±, a?adi¨® la estadounidense, haciendo tambi¨¦n referencia al asesinato de Federico Garc¨ªa Lorca y a c¨®mo el personaje de Martirio, en La casa de Bernarda Alba (cuando estaba en la universidad, Streep particip¨® en un montaje de este texto), se lamenta por la repetici¨®n de las tragedias. ¡°La empat¨ªa puede ser una forma radical de acercamiento y diplomacia, igualmente crucial en otros ¨¢mbitos de actividad. En este nuestro mundo cada vez m¨¢s hostil y vol¨¢til, espero que podamos hacer nuestra otra regla que se ense?a a todos los actores: lo importante es escuchar¡±, remat¨® la actriz. Si la guerra de Ucrania fue central en la gala del a?o pasado, este a?o, de forma quiz¨¢s menos intensa y m¨¢s velada, la situaci¨®n en Gaza ha sobrevolado algunas intervenciones. En la tradicional concentraci¨®n republicana y de protesta que se congrega en la aleda?a plaza de la Escandalera, y cuyo pitidos y abucheos se ven opacados por el pasacalles de bandas de gaitas de toda la regi¨®n, ondeaban numerosas banderas y pancartas en solidaridad con el pueblo palestino.

Una gala con notorias ausencias

Aunque la ceremonia se celebra anualmente siguiendo un patr¨®n similar, este a?o tuvo varias particularidades. La m¨¢s notoria: dos de los premiados fallecieron en el periodo entre el anuncio de su galard¨®n y la entrega de premios. Es el caso del ensayista italiano Nuccio Ordine, premio de Comunicaci¨®n y Humanidades: su hermana y su pareja se han desplazado a Oviedo para asistir a la ceremonia. Tambi¨¦n la acad¨¦mica francesa y eurodiputada H¨¦l¨¨ne Carr¨¨re d¡¯Encausse, premio de Ciencias Sociales, cuyo hijo, el escritor Emmanuel Carr¨¨re, vino a recogerlo. Curiosamente, el escritor hab¨ªa recibido el galard¨®n de las Letras en 2021, por lo que todo esto le resultar¨¢ familiar. Uno de los premiados en Investigaci¨®n Cient¨ªfica y T¨¦cnica, Jeffrey Gordon, no pudo acudir por el repentino fallecimiento de su esposa.

El premio de las Letras de este a?o, el japon¨¦s Haruki Murakami, no pronunci¨® discurso en este acto, tal vez debido a su conocida timidez y aversi¨®n a los actos p¨²blicos. Aunque no se dirigi¨® a las ¨¦lites aqu¨ª reunidas, s¨ª que se encontr¨® con las bases de la literatura el mi¨¦rcoles en Gij¨®n, en un acto con los clubes de lectura de las bibliotecas p¨²blicas. Y no se le vio demasiado inc¨®modo. Curiosamente, Murakami es un c¨¦lebre corredor de marat¨®n, como, en otro nivel de exigencia, Eliud Kipchoge, premio de los Deportes. Probablemente, al japon¨¦s le interes¨® especialmente el discurso del keniano.

¡°?Saben? Correr no es solo movimiento f¨ªsico. Correr es un veh¨ªculo que tiene el poder de unirnos¡±, dijo Kipchoge, que despleg¨® no poco pensamiento positivo. Un marat¨®n es una celebraci¨®n colectiva en la que no importa el origen o el color de piel de cada uno. Una persona que consigue acabar un marat¨®n, seg¨²n el keniano, es capaz de hacer cualquier cosa. Sus victorias no las celebra con fiesta y champ¨¢n. ¡°Me gusta volver a mi campo de entrenamiento en Kenia y plantar un ¨¢rbol¡±, dijo, ¡°ya que, una vez alcanzada la meta, el momento de gloria es fugaz. Pero la alegr¨ªa que produce el crecimiento de un ¨¢rbol dura muchas vidas¡±. La mala suerte quiso que el corredor viese batido su r¨¦cord por su compatriota Kelvin Kiptum poco antes de acudir a Asturias.

La princesa de Asturias, casi mayor de edad

Y otra particularidad: la princesa de Asturias, Leonor de Borb¨®n, que dio su primer discurso p¨²blico en 2019 sobre este mismo escenario, compareci¨® esta vez a punto de alcanzar la mayor¨ªa de edad (cumplir¨¢ 18 a?os el d¨ªa 31 y, como ha explicado, firmar¨¢ la Constituci¨®n) y poco despu¨¦s de jurar bandera en la Academia General Militar de Zaragoza. ¡°Puedo decirles que soy muy consciente de cu¨¢l es mi deber y de lo que implican mis responsabilidades¡±, dijo en su alocuci¨®n. Su padre, el rey Felipe VI, denunci¨® el ¡°sufrimiento desgarrador¡± que causa la guerra en Oriente Pr¨®ximo y llam¨® a defender una paz basada en ¡°garant¨ªas mutuas de respeto y seguridad¡±. Record¨® que el premio a la Cooperaci¨®n Internacional en 1994 fue otorgado, de manera conjunta, al primer ministro de Israel, Isaac Rabin, y al presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yasir Arafat, por sus esfuerzos por conseguir la paz en la regi¨®n. En cuanto a la pol¨ªtica nacional, el Rey apel¨® a la ¡°responsabilidad¡± de los pol¨ªticos y advirti¨® de que la soluci¨®n de los problemas de Espa?a debe llegar ¡°de la unidad, nunca de la divisi¨®n¡±, idea que arranc¨® la mayor ovaci¨®n de toda la ceremonia. El Rey luci¨® un vendaje negro en su mano izquierda por una leve lesi¨®n de mu?eca.

Luis Pizarro, director ejecutivo de la Iniciativa Medicamentos para Enfermedades Desatendidas (DNDi), organizaci¨®n premiada en el ¨¢mbito de la Cooperaci¨®n Internacional, habl¨® de millones de enfermos invisibles y olvidados, muchas veces con enfermedades para las que no existe cura. ¡°Son demasiado pobres para que sus enfermedades interesen en este lado del mundo¡±, denunci¨®. La investigaci¨®n farmac¨¦utica tradicional no ve en ellos un mercado lucrativo del que sacar rentabilidad. La enfermedad de Chagas, el micetoma, la leishmaniasis, la enfermedad del sue?o¡­ La cifra es abrumadora: 1.600 millones cada a?o, seg¨²n la Organizaci¨®n Mundial de la Salud. Otra iniciativa premiada, esta vez con el Premio de la Concordia, es Mary¡¯s Meals, una organizaci¨®n sin ¨¢nimo de lucro con sede en la localidad escocesa de Dalmally, cuyo objetivo es suministrar una comida diaria a ni?os en los colegios. En cuanto al Premio de Investigaci¨®n Cient¨ªfica y T¨¦cnica, fue recogido por los bi¨®logos E. Peter Greenberg y Bonnie L. Bassler (faltaba Gordon, por el motivo antes mencionado), por estudios sobre el microbioma humano y la comunicaci¨®n entre bacterias.

Despu¨¦s de escuchar el himno de Asturias interpretado por la Real Banda de Gaitas Ciudad de Oviedo, los galardonados bajaron del escenario y abandonado el teatro por el pasillo central acompa?ados del pasacalle El Xarreru. Se prev¨¦ que el s¨¢bado, la Familia Real ponga punto y final a su periplo anual por el Principado visitando el Pueblo Ejemplar de Asturias de este a?o, las parroquias de Arroes, Pion y Candanal, en el concejo de Villaviciosa.