Natos y Waor rapean la cr¨®nica de una juventud extraviada y llenan tres WiZink
El d¨²o madrile?o, el m¨¢s popular del hip hop actual, culmina dos a?os de gira: ¡°No hemos hecho otra cosa que cantar sobre lo que hemos visto a nuestro alrededor: paro, desmotivaci¨®n, vicios¡¡±


¡°Esto va para nuestra gente de Aluche. Nosotros venimos de la generaci¨®n perdida¡±. El que desga?ita estas palabras es Gonzalo Cidre (Natos, 32 a?os). A su lado, Fernando Hisado (Waor, 35) asiente con la cabeza y coge el relevo: ¡°Lo que empez¨® como una tonter¨ªa, ense?ando nuestras miserias, ha llegado hasta aqu¨ª¡±. 15.000 personas rugen para convertir el WiZink Center en el lugar donde hay que estar. Las entradas para este concierto de octubre pasado en el recinto madrile?o se agotaron en unos pocos d¨ªas.
Una semana despu¨¦s, el grupo m¨¢s importante del hip hop espa?ol en la actualidad, Natos y Waor, se cita con este peri¨®dico en su estudio de grabaci¨®n, construido en un peque?o s¨®tano del centro de Madrid. Gonzalo pide permiso para fumar, se enciende un cigarrillo y comienza a rememorar c¨®mo era su habitaci¨®n en ese periodo de la adolescencia donde se empieza a dise?ar la personalidad. ¡°Era un balc¨®n de la habitaci¨®n de mi padre, en la que cab¨ªa, encastrada, una cama de noventa. Quedaba un hueco de 50 cent¨ªmetros en el que ten¨ªa mi mesita para un ordenador port¨¢til. Era un zulillo. Ah¨ª se forjaron buenas canciones. Realmente no hace falta mucho m¨¢s para ser feliz. El ser humano se adapta a cualquier circunstancia¡±. Fernando apunta que las paredes de la suya estaban tapizadas de fotos con colegas, la entrada del primer concierto al que fue con amigos (Extremoduro) y p¨®steres de Evaristo (de La Polla Records) y Karlos Animal (de Non Servium). ¡°Teniendo en cuenta que mi adolescencia se guio por estos dos se?ores, s¨ª, se puede decir que fue conflictiva¡±.
La vida hoy de Natos y Waor ni tiene estrecheces ni es pendenciera. En a?o y medio el d¨²o madrile?o va a llenar tres WiZink Center: 45.000 entradas. Ya se han celebrado dos de esos conciertos y cumplen el tercero el 26 de octubre de 2024 despu¨¦s de dos a?os de gira. El d¨²o es el ejemplo m¨¢s claro de un fen¨®meno que se considera in¨¦dito en el pa¨ªs: nunca los raperos espa?oles hab¨ªan convocado a tanta gente. ¡°S¨ª, est¨¢ claro que ahora tenemos algo que perder. Cuando alguien no tiene nada que perder, no tiene expectativas, no tiene un gran p¨²blico esperando¡ no se piensan las cosas dos veces; y ahora, aunque confiamos mucho en nuestro instinto y hacemos lo que nos da la gana, nos pensamos las cosas un poco m¨¢s. Pero es tambi¨¦n porque somos conscientes de que no podemos defraudar a esa gente que consume nuestra m¨²sica, que paga las entradas por venir a los conciertos. Y hay que estar a la altura. Hay un poco m¨¢s de presi¨®n, pero una presi¨®n llevadera¡±, explican.

La historia de Natos y Waor camina amarrada al componente generacional. Su adolescencia transcurri¨® en la calle, bebiendo e imantada a los conflictos. ¡°No me sent¨ªa parte del mundo. Me rebel¨¦ contra todo tipo de autoridad y hac¨ªa todo lo que estaba prohibido¡±, asume Waor. El d¨²o se conoci¨® en las batallas de gallos de la primera d¨¦cada de los dos mil en lugares emblem¨¢ticos para el rap en la capital como los parques de la Bombilla y Tierno Galv¨¢n, la Plaza El¨ªptica o la calle de Barcel¨®. La crisis de 2008 sacud¨ªa Espa?a y ellos proven¨ªan de una de las zonas m¨¢s vulnerables: barrios obreros de una gran ciudad como Madrid. Fernando creci¨® en Aluche; Gonzalo vino de Argentina con 10 a?os y se instal¨® con su familia en Torrelodones. Los dos se mov¨ªan por las calles de la ciudad. Comenzaron a contar sus vivencias: cr¨®nicas de chicos que estaban creciendo en un pa¨ªs angustiado por el martillo del desempleo. En Septiembre, rapean: ¡°Sabes que sigo enamorado de la calle. / Porque me brind¨® el amor que no me daba nadie. / Volv¨ª con los nudillos llenos de sangre. / Para ver la cara de tristeza de mi madre. / Camino por el barrio y es la mierda de siempre. / Persianas bajadas y carteles de ¡®se vende¡±. En el tema Los 90, imploran: ¡°Crecimos en los 90, barrios olvidados fuera de la M-30. / No puedes comprar lo que no tiene precio, no puedes comprar lo que no est¨¢ a la venta¡±.
Casas okupas como La Traba, en Embajadores (Madrid), vieron sus primeras actuaciones, desorganizadas y fiesteras, tambi¨¦n perfectas para probarse. Se dieron cuenta de que formaban buen equipo. ¡°No habr¨ªamos triunfado si nos hubi¨¦semos puesto a hacer m¨²sica en la ¨¦poca en la que era indispensable fichar con una discogr¨¢fica. Porque no nos hubieran fichado por nuestro discurso. La primera maqueta que sacamos ni siquiera nos la aceptaron en un portal de hip hop de descargas. La calidad de sonido era regulera y nuestro vocabulario era bastante malhablado. Pero ten¨ªa alma y conectaba con la gente¡±. Asumen que les vino bien justo aparecer, sobre 2010, en el momento en el que YouTube se estaba empezando a utilizar como una plataforma para publicar canciones.

Mientras fueron editando m¨²sica, en 2012 se al¨ªan con otro rapero madrile?o, Recycled J, para impulsar el grupo Hijos de la Ruina. El tr¨ªo logra llegar a esa juventud espa?ola abollada de la ¨¦poca con canciones como Sudores fr¨ªos o Medias tintas. Rupturas sentimentales narradas con crudeza e historias de trapicheos junto a bloques de hormig¨®n. Comenzaron a organizar giras por Espa?a en salas de 200 personas, luego para 500, para 700, para 1.500... En 2018 editan el disco Cicatrices y entran en la Primera Divisi¨®n. El d¨²o cuenta ya cuatro discos largos.
Natos y Waor declaran su devoci¨®n por la primera generaci¨®n del hip hop espa?ol (Violadores del Verso, SFDK, El Club de los Poetas Violentos) que surgi¨® en los noventa, pero tambi¨¦n por rockeros como Rosendo, Extremoduro o Marea, cuyo l¨ªder, Kutxi Romero, participa en el ¨²ltimo disco del d¨²o, Luna llena (2022). Ambos se?alan varias razones por las que por primera vez los raperos espa?oles llenan pabellones: la difusi¨®n que les dan las plataformas digitales, abrirse a otros estilos fuera del hip hop y la no dependencia de grandes corporaciones discogr¨¢ficas. ¡°Los raperos antiguamente ten¨ªan una mentalidad cerrada. Actualmente poca gente te dice: ¡®Yo solo escucho rap¡¯. Si a los conciertos solo van raperos, no hay raperos suficientes para llenar un WiZink. Viene a vernos gente de cualquier clase social a los que les une nuestra m¨²sica¡±.
La gama estil¨ªstica del d¨²o puede alcanzar el rock, la electr¨®nica o los ritmos latinos. Siempre con la base del rap a la hora de expresarse. En el recital del pasado octubre se ve¨ªan muchas chicas, otra de las novedades con respecto a antiguas costumbres de las concentraciones hiphoperas. ¡°Pr¨¢cticamente desde el principio en nuestros conciertos se vio un equilibrio, y eso no era lo habitual. Era raro ver a chicas en un recital de rap. De hecho, al principio nos dec¨ªan, como si fuera malo: ¡®Os escuchan chicas¡¯. Hemos sido de los primeros en el hip hop donde en los conciertos se ve paridad, y es un orgullo¡±.

Las tres tem¨¢ticas que priman en sus letras son: cr¨®nica social, relaciones sentimentales y la juerga. ¡°No hemos hecho otra cosa que cantar sobre lo que hemos visto a nuestro alrededor: paro, gente con estudios que no encontraba empleo, gente sin estudios que tampoco, pocas motivaciones, vicios¡ Todo eso te lleva a que lo ¨²nico que te apetezca sea salir y reventarme un poco m¨¢s. Y al final hemos hecho, hablando de nuestro entorno y del barrio, una cr¨®nica, sin pretenderlo, en la que muchos chavales se han visto reflejados¡±.
Rechazan totalmente cualquier implicaci¨®n pol¨ªtica: ¡°Estamos bastante en contra del adoctrinamiento pol¨ªtico a trav¨¦s del arte. Y creemos que es imposible no estar desencantado con la pol¨ªtica hoy. No nos casamos con nadie. Aunque no hace falta escuchar muchas canciones nuestras para saber lo que pensamos, tampoco tenemos la intenci¨®n de que nuestra m¨²sica sea un mitin pol¨ªtico¡±. Sobre alguna referencia a sus letras apuntar¨¢n luego: ¡°No creo que alguien que tenga coraz¨®n pueda ser fascista o quiera tener a uno al lado¡±.
Nunca han necesitado una discogr¨¢fica (se editan ellos mismos), no suenan en la radio y no aparecen en las listas de las plataformas digitales. Pero conectan con miles de personas. Son Natos y Waor, chicos de barrio que han elevado el list¨®n.
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