Cannes, el festival de la fiesta perpetua

Hay muchos Cannes en Cannes. Est¨¢ el festival de cine, el m¨¢s grande del mundo, que se celebra hasta el s¨¢bado, con otros tres que se desarrollan en paralelo: la Quincena de Cineastas, la Semana de la Cr¨ªtica y Acid. Est¨¢ el mercado de cine, que se expande desde los s¨®tanos del Palais por los apartamentos de La Croisette. Est¨¢n las alfombras rojas de las galas, eventos que ya funcionan casi de forma independiente, con modelos e influencers devorando el espacio de las estrellas, en una promoci¨®n sin fin que este a?o ha incluido hasta el paso de la antorcha ol¨ªmpica. Est¨¢n las reuniones y los encuentros vespertinos en las distintas playas acotadas en que se divide la arena de La Croisette: cada hotel, marca e incluso restaurante posee un pedazo de ese tesoro. Y finalmente est¨¢ el Cannes m¨¢s exclusivo y llamativo: el de las fiestas nocturnas, el de la gente agolp¨¢ndose en puertas cerradas a los mortales, con m¨²sica e invitados VIP, de cuyas conversaciones solo quedan las pistas que publica diariamente la revista Gala-Croisette en su secci¨®n, nunca mejor bautizada, Gimme The Night.

En Cannes las fiestas nocturnas superan cualquier adjetivo en cantidad y calidad: las marcas de moda, joyer¨ªa o bebidas se lanzan a celebrar la noche desaforadamente. Muchas estrellas viajan a Cannes solo para atravesar la alfombra roja y a deslumbrar en la velada posterior. Y mientras que en los Oscar los ¨¢gapes se realizan en un pu?ado de d¨ªas previos a la ceremonia y en la noche de la gala, en Cannes hay 12 d¨ªas de festival con una decena de banquetes, cenas y celebraciones diarias. Y para entrar en ellas ni siquiera estar en la lista o tener una invitaci¨®n f¨ªsica te abre las puertas: como en los aviones, el overbooking triunfa y en cambio hay un control estricto de los aforos.

Los cannoises de toda la vida conocen perfectamente el listado de las principales fiestas: amfAR (la m¨¢s espectacular, m¨ªtica y selecta), Choppard, la cena Women in Motion de Kering y, en los ¨²ltimos a?os, Campari y Magnum. Pero cada edici¨®n se suma alguna marca de moda o de bebidas alcoh¨®licas, o cualquier iniciativa ben¨¦fica: un a?o el vodka Belvedere, como ejemplo, llev¨® a Cannes a Cyndi Lauper para que diera un concierto ben¨¦fico para la fundaci¨®n que apadrina Bono contra el sida infantil. Es decir, relacionaron una marca con un lucha social a trav¨¦s de alguien carism¨¢tico. En este terreno, la mejor fiesta, la m¨¢s ansiada, la que re¨²ne m¨¢s famosos, y por tanto la m¨¢s conocida, es la gala amfAR ¡ªsiglas de American Foundation for AIDS Research¡ª, surgida de la fundaci¨®n que cre¨® en 1985 Elizabeth Taylor para luchar contra el sida, y que este mi¨¦rcoles por la noche celebr¨® su 30? gala en Cannes. Se desarrolla en una villa a las afueras, y en ella se recaudan fondos mientras varias estrellas act¨²an durante una cena: anoche la anfitriona fue Demi Moore y cantaron Jess Glynne, Nick Jonas y, en un momento especial, Cher. ¡°De mis mejores recuerdos de fiestas en Cannes est¨¢ la de amfAR en 2018, fue incre¨ªble por el nivel de los invitados¡±, rememora Orson Salazar, y ¨¦l sabe de lo habla.

Salazar organiza la fiesta m¨¢s exclusiva de los Goya a trav¨¦s de su empresa Bulul¨², creada en 2018. Desde el a?o pasado tambi¨¦n desarrolla un encuentro nocturno del cine espa?ol en colaboraci¨®n con Campari como patrocinador. ¡°Y en 2025 estaremos tambi¨¦n en el festival de Berl¨ªn¡±, cuenta tras seis d¨ªas de trabajo en la Costa Azul. Campari ha apostado fuerte por Cannes en los ¨²ltimos a?os: a su playa privada le ha sumado un espacio en la cuarta planta del Palais. En la fachada blanca y acristalada resalta el rojo de su sala, as¨ª que desde la calle los espectadores an¨®nimos pueden otear que all¨ª hay jarana y famosos. ¡°Para una gran fiesta debes cuidar el espacio y el patrocinador. Y a partir de ah¨ª mimar la convocatoria, que vaya la gente adecuada. Siento que he tenido suerte con todos los elementos¡±, apunta Salazar. ¡°Me parece importante que cada fiesta sirva para aunar una comunidad y obtener algo m¨¢s: en Cannes no hab¨ªa un evento espec¨ªfico del cine espa?ol, y eso ten¨ªamos que cambiarlo. Por ello me he coaligado con instituciones y creadores, y estoy abierto a quien se quiera sumar¡±. Salazar ha vivido muchos a?os en Los ?ngeles con su pareja, la actriz Paz Vega, y all¨ª descubri¨® que tras ¡°cada evento hab¨ªa una celebraci¨®n perfectamente organizada, algo que en Espa?a ni se planteaba¡±.

Carlos G¨®mez, director de Gala-Croisette, apunta una tendencia: ¡°Ya no hay fiestas tan salvajes y exc¨¦ntricas como las de antes. Ni la gente se vuelve tan loca en los yates. Las celebraciones son ahora de tama?o mediano. Para el festival le van bien, pero se centra m¨¢s en las alfombras rojas¡±. En el acceso period¨ªstico a los festejos ¡°importan, y mucho, las redes sociales. Gala tiene m¨¢s de 11 millones de seguidores en TikTok. Hay famosos que antes no se hac¨ªan una foto y ahora se apuntan a un v¨ªdeo¡±. Y asegura que esos eventos se apoyan cada vez m¨¢s ¡°en el intercambio de servicios, entre el patrocinador que pone el dinero y el patrocinado que suma su imagen¡±. El win-win neoliberal ¡°ha devorado al cine¡±.

En ese ejemplo de combinaci¨®n evento-artistas-ir m¨¢s all¨¢, destacan los tres d¨ªas de Women in Motion que organiza Kering, grupo de empresas comerciales francesas de lujo creadas por el empresario Fran?ois Pinault. Como cierre a esas jornadas de debates, el 19 de mayo premiaron en una cena a Donna Langley, presidenta del imperio NBCUniversal, y a ese ¨¢gape asisti¨® el m¨¢s selecto qui¨¦n es qui¨¦n de este Cannes: todos los miembros del jurado de la competici¨®n, con su presidenta Greta Gerwig a la cabeza, y a su lado Omar Sy (que este a?o no se ha perdido ni una), y con Julianne Moore, Justine Triet, Uma Thurman, Charlotte Gainsbourg, Catherine Deneuve, Isabelle Huppert, Salma Hayek, Michelle Yeoh, Zoe Salda?a, Karla Sof¨ªa Gasc¨®n, Jacques Audiard, Rossy de Palma, Diane Kruger, Judith Godr¨¨che y la ministra francesa de Cultura, Rachida Dati.

Otro de los cl¨¢sicos es Choppard, la empresa joyera patrocinadora del evento y realizadora de las palmas que se entregan como premios. Es un encuentro m¨¢s cl¨¢sico, m¨¢s reposado, que el martes 21 se desarroll¨® en el hotel Cap-Eden-Roc, en Cap d¡¯Antibes, a poco m¨¢s de una decena de kil¨®metros de Cannes, y en el que, tras un desfile de 77 joyas en homenaje al n¨²mero de ediciones del certamen, la cena fue amenizada por las actuaciones de Jos¨¦ Carreras y Gloria Gaynor. M¨¢s alocada es la fiesta de Magnum en su playa. En la de este 2024, desarrollada el pasado jueves, el c¨®digo de vestimenta deb¨ªa atenerse a los conceptos Euphoria, Wonder y Chill, nombres de los nuevos tres helados que lanzan este verano. Hubo invitados tan ecl¨¦cticos como Iggy Pop, Dulceida, la cantante Charli XCX o la modelo alemana Toni Gaarn, y actuaciones tan variadas como Mika, Justice, la drag francesa Nicky Doll y el dj Mura Masa. Como no pod¨ªa ser menos, se qued¨® m¨¢s gente en la acera del paseo mar¨ªtimo intentando entrar que la accedi¨® al evento: las masas en la puerta dan imagen de exclusividad.

En cambio, el tardeo que conmemoraba el pasado domingo el 30? cumplea?os de Searchlight fue algo deslucido en comparaci¨®n con la cena de punta en blanco con la que Sony festej¨® los 100 a?os de existencia de Columbia el s¨¢bado 18: se juntaron la omnipresente Greta Gerwig, directores como J. C. Chandor, Phil Lord, Chris Miller, Jason Reitman, Chlo¨¦ Zhao o Will Gluck, y actores como Laurence Fishburne, Woody Harrelson, Isabelle Huppert. A la cena le hab¨ªa precedido ¡ªen la t¨ªpica combinaci¨®n de Cannes de negocios y cinefilia¨D la proyecci¨®n en Cannes Classics de la versi¨®n restaurada de Gilda, uno de los t¨ªtulos emblem¨¢ticos de Columbia.

Cada pel¨ªcula, cada acontecimiento, casi cada gran productora organiza su propio encuentro. Todas las noches la terraza Albane, en la azotea del hotel Marriott, congrega a los integrantes de una de las pel¨ªculas a concurso. Todo se puede lucir con orgullo: BMW apost¨® por la presentaci¨®n de primer veh¨ªculo el¨¦ctrico de la casa dise?ado con materiales de alta costura (al coche le rodearon, por ejemplo, Naomi Campbell, el compositor Hans Zimmer y la actriz Nathalie Emmanuel). Todas las noches locales como el restaurante cabaret Medusa revientan de alegr¨ªa y baile, y a las puertas de La Villa, una mansi¨®n donde se juntan los equipos de las pel¨ªculas que ese d¨ªa se han visto en la Quincena, se hacina la gente empujando por alcanzar su interior. La cuesti¨®n es entrar, y que te vean.