La muy digna y curiosa historia del torero colombiano Juan de Castilla
Viaj¨® a Espa?a con el apoyo econ¨®mico del artista Fernando Botero, trabaja en una empresa de paqueter¨ªa de Coslada, y el 19 de mayo lidia por la ma?ana en Francia, y por la tarde, los ¡®miuras¡¯ en Las Ventas
Dice que se levanta a las 3 de la madrugada en Guadalajara, donde vive con su esposa, viaja en su coche hasta el barrio madrile?o de Coslada, y entra a trabajar a las 5 en una empresa de reparto de paqueter¨ªa. Finaliza su jornada a la 1 del mediod¨ªa, y, hoy, media hora m¨¢s tarde, ha acudido puntual a su cita con EL PA?S; finalizada la entrevista corre al gimnasio, almuerza despu¨¦s algo ligero, y dos horas m¨¢s tarde comienza el entrenamiento de toreo de sal¨®n. Llega a su casa sobre las 9 de las noche, con el tiempo justo de darse una ducha, cenar y meterse en la cama.
Y as¨ª un d¨ªa y otro, y no tiene queja; asegura por el contrario, que se siente afortunado porque tiene un trabajo que le permite ¡°vivir en torero¡± en Espa?a, aunque todav¨ªa no pueda vivir del toro.
Se llama Juan Pablo Correa S¨¢nchez, naci¨® en septiembre de 1994 en la localidad colombiana de Medell¨ªn, es torero y se anuncia en los carteles como Juan de Castilla, como homenaje a sus padres, originarios como ¨¦l de ese barrio donde naci¨®. ¡°Y tambi¨¦n como un gesto de rebeld¨ªa¡±, explica, ¡°porque la primera vez que tore¨¦, tendr¨ªa 14 a?os, not¨¦ malas caras entre los asistentes cuando dije que hab¨ªa nacido en Castilla, que es verdad que ha sido un barrio dif¨ªcil, de donde salieron muchos sicarios del narcotr¨¢fico, pero yo procedo de una familia muy buena, humilde y trabajadora, de la que me siento muy orgulloso¡±.
Gracias a Botero, el torero y su maestro vivieron durante un a?o y siete meses en Sevilla, ¡°y me preocup¨¦ de mantenerlo informado de mis progresos en Espa?a¡±
Juan de Castilla est¨¢ anunciado el pr¨®ximo 19 de mayo en la Feria de San Isidro en el cartel de la corrida de Miura, un puesto que se gan¨® en Las Ventas el pasado 19 de septiembre ante un complicado toro de la ganader¨ªa de Sobral. La oferta le lleg¨® cuando ya se hab¨ªa comprometido para torear ese mismo d¨ªa por la ma?ana en la localidad francesa de Vic Fezensac. Una casualidad dificultosa, sin duda, pero que ha debido aceptarla. ¡°En mis circunstancias no puedo decir que no¡±, afirma, ¡°por lo que una corrida en Madrid pueda representar para mi vida¡±.
Una vida, la de Juan de Castilla, nada f¨¢cil. Se hizo un nombre como novillero en Colombia, pero, a su juicio, los triunfos carec¨ªan de trascendencia. Junto a su maestro, el matador de toros Fernando Arango, pens¨® en la posibilidad de salir del pa¨ªs para que su carrera no quedara estancada. ¡°Pero no ten¨ªamos medios para ello, porque mis padres no pod¨ªan costearme el viaje y la estancia en Espa?a, que era nuestra ilusi¨®n¡±, afirma.
Entonces, Arango tuvo una idea: escribir una carta al afamado pintor y escultor colombiano Fernando Botero, que hab¨ªa sido mecenas de j¨®venes artistas. Y el maestro les contest¨®; nunca hab¨ªa apoyado a un torero, pero decidi¨® apostar por Juan de Castilla, y le concedi¨® una beca para que durante un a?o pudiera abrirse camino en Espa?a.
¡°Al final, don Fernando nos pag¨® a mi maestro y a m¨ª durante un a?o y siete meses un piso en la localidad sevillana de Espartinas, la comida, el transporte, la ropa, y a¨²n nos quedaba un poco de dinero para ahorrar¡±. ¡°Fue muy generoso conmigo¡±, a?ade el torero, ¡°y yo me preocup¨¦ de mantenerlo informado de mis progresos en Espa?a gracias a su apoyo¡±.
Juan de Castilla solo ten¨ªa 17 a?os cuando cruz¨® el Atl¨¢ntico en 2012. Tiempo atr¨¢s hab¨ªa conocido en su pa¨ªs a Iv¨¢n Fandi?o, quien se comprometi¨® a ayudarlo y lo invit¨® a ingresar en el CITAR (Centro Internacional de Tauromaquia y Alto Rendimiento), situado en Guadalajara, y hasta all¨ª viaj¨® el aspirante tras su etapa sevillana.
¡°Entr¨¦ como alumno y comenc¨¦ a trabajar, y entonces fui ¡®todero¡¯ m¨¢s que torero; es decir, que hice de todo: alba?il, mayordomo en una finca, camarero, pegador del carteles, obrero del campo, ayudante de cacer¨ªa¡¡±.
Hasta que el 1 de febrero de 2022 fue contratado por la empresa Sending, dedicada a la paqueter¨ªa urgente y log¨ªstica, donde Juan de Castilla gestiona las incidencias de los repartos de Madrid. Dice que est¨¢ muy agradecido al empresario, que le ofrece facilidades para torear, asistir a tentaderos y le permite disfrutar sus vacaciones en Navidad, que es cuando se celebran festejos taurinos en su pa¨ªs.
Tom¨® la alternativa en 2017 en su localidad natal, y desde entonces solo ha participado en unas 30 corridas, y solo 7 de ellas en Espa?a.
¡°He sido ¡®todero¡¯ (he trabajado de todo) antes que torero, y a¨²n no vivo del toro, pero me mantiene una fe ciega¡±
¡°Ha habido a?os en los que no he tenido ni un tentadero¡±, cuenta el torero; ¡°por eso el comienzo de este 2024 es tan ilusionante, el pasado enero he triunfado en Manizales, vuelo a Per¨² el 12 de mayo y estoy anunciado en Francia y en San Isidro. No tengo m¨¢s, pero me siento muy afortunado, y estoy encantado¡±.
Juan de Castilla es consciente de que los toros que tendr¨¢ que lidiar no son, en principio, los m¨¢s aptos para el lucimiento, ¡°pero prefiero sufrir con la muleta en la mano que estar c¨®modamente sentado en el sof¨¢ de mi casa¡±, asegura; ¡°y para ello me preparo cada d¨ªa, para asumir estos retos con la mayor dignidad posible¡±.
¡°Lamentablemente, todav¨ªa no vivo del toro¡±, a?ade, ¡°y ello me impulsa a que cada vez que me visto de torero lo haga por convicci¨®n, y animado por una gran fuerza interior¡±. ¡°Me siento agraciado porque puedo vivir de mi trabajo, pero lo que hago es m¨¢s duro que pasar fatigas en el ruedo con la muleta entre las manos¡±, concluye.
Est¨¢ convencido de que solo ha podido mostrar hasta ahora una peque?a parte de su concepto torero: ¡°Me considero combativo, aguerrido, dispuesto siempre a no dar la espalda a las complicaciones y a disfrutar cuando las supero¡±. Y califica su trayectoria como ¡°una carrera de lucha y sacrificio constantes, que no ha sido explosiva, pero cada pelda?o que he subido no lo he bajado¡±.
Pregunta. ?Alguna vez ha pensado en afianzarse en la empresa y abandonar los toros?
Respuesta. ¡°Nunca. A veces, lo paso mal viendo que los dem¨¢s torean y yo no, pero me mantiene una fe ciega. Me asaltan, es verdad, momentos de debilidad, pero tirar la toalla, nunca¡±.
P. Pero la vida que lleva¡
R. ¡°Este plan de vida no lo podr¨ªa mantener dentro de cinco a?os. Duermo poco y me esfuerzo mucho. Por eso, mi meta es triunfar antes de ese plazo de tiempo. Y a ello dedico mi vida¡±.
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