Pasi¨®n ¡®Puma¡¯ para la mel¨¦ australiana

¡°Dr. Scrum¡±, ¡°Super Mario¡±, ¡°workaholic¡±, estos son algunos de los calificativos que ha recibido en los ¨²ltimos a?os Mario Ledesma (Buenos Aires, 42 a?os), hist¨®rico talonador de la selecci¨®n argentina de rugby, con la que disput¨® cuatro Mundiales (1999, 2003, 2007 y 2011), pero que ahora transmite la pasi¨®n de un Puma a la mel¨¦ australiana, a la que ha cambiado la cara desde el banquillo en el ¨²ltimo a?o.

La semana de antes a enfrentarse a muchos de sus excompa?eros pidi¨® no hablar con nadie, centrarse en ayudar a sus nuevos chicos a superar a un rival que ¨¦l ayud¨® a construir en el centro de la mel¨¦. Conseguido el objetivo, el s¨¢bado, por segunda vez en cuatro a?os un exjugador argentino estar¨¢ en el banquillo de uno de los equipos aspirantes al triunfo final.

En 2011, el exapertura Gonzalo Quesada fue uno de los art¨ªfices de la precisi¨®n con el pie del apertura-mediomel¨¦ franc¨¦s Morgan Parra, que fue clave durante todo el torneo para el equipo subcampe¨®n. En Inglaterra, la mel¨¦ Wallabie est¨¢ siendo una de las mejores del torneo y, aunque sufri¨® contra los argentinos, ser¨¢ uno de los principales argumentos de los de oro frente a su eterno rival, Nueva Zelanda.

La confianza de su superior, Michael Cheika, en ¨¦l es total. ¡°Ser¨¢ una semana muy emocional para ¨¦l. Sigue estando muy orgulloso de ser argentino, no esperar¨ªa menos de ¨¦l. Pero sabe lo que tenemos que hacer¡±, aclar¨® el seleccionador australiano antes de las semifinales.

Esa emotividad y el cari?o que siente Ledesma por sus compa?eros se vio en el calentamiento de las semifinales, cuando se acerc¨® un momento al terreno albiceleste para abrazarse con Juan Manuel Leguizam¨®n, con el que hab¨ªa disputado la semifinal contra Sud¨¢frica en 2007. Ah¨ª se acab¨® el sentimentalismo, el jugador sigui¨® con su calentamiento y el ahora entrenador se volvi¨® hac¨ªa sus nuevos chicos para seguir poniendo a punto las mel¨¦s y las touchs.

La relaci¨®n entre Cheika y Ledesma viene de lejos, de cuando el argentino abandon¨® los campos y el australiano se lo llev¨® como ayudante para la delantera en el Stade Fran?ais parisino. Despu¨¦s, tras dos a?os en Montpellier, le volvi¨® a llamar como consultor en los Warathas australianos, a donde lleg¨® con un visado de turista que tuvo que renovar dos veces. En 2014, Cheika se puso al frente de la selecci¨®n nacional y se encontr¨® con que la delantera hac¨ªa aguas y no dud¨® en qui¨¦n ser¨ªa el mejor galeno: Ledesma.

En el Mundial 2011, cuando ten¨ªa 38 a?os, el diario brit¨¢nico The Daily Telegraph calific¨® al argentino como uno de los mejores 2, no solo del campeonato, sino de la historia del torneo. Destacaba por su agresividad en la mel¨¦ y su liderazgo dentro del campo. Algo que mantiene a la hora de preparar a los dem¨¢s.

Todo el mundo apunta hacia ¨¦l para explicar el enorme cambio del pack australiano, que en dos a?os ha pasado de ser para muchos la ra¨ªz de los problemas de una selecci¨®n decadente a estar considerada una de las mejores del torneo y una de las razones por las que el equipo aspira a levantar su tercer Mundial.

El scrum de los Wallabies ha cometido muy pocos golpes de castigo en esa fase est¨¢tica en todo el Mundial y, pese a los tres cometidos contra Escocia, solo se ha visto superada por los argentinos, aunque les dominaron en los agrupamientos en juego abierto, sobre todo en la primera parte.

Ledesma ya ha asegurado que quiere seguir con Cheika, con el que prima la palabra. ¡°Estoy disfrutando mucho. Es donde quiero estar ahora mismo¡±, confesaba antes del torno cuando le preguntaron por su futuro.

Parte de esa felicidad y emoci¨®n por su trabajo se lo traslada a sus pupilos, a los que ya no les disgustan las sesiones de entrenamiento de mel¨¦. Algunos de los motivos los ha desvelado Stephen Moore, capit¨¢n de Australia: ¡°Te inspira pasi¨®n por la mel¨¦, conocimiento de veterano y aire positivo¡±. Palabras mayores procedentes de un jugador que ha jugado 100 partidos en una las delanteras m¨¢s exigentes del mundo.