El Villarreal se exhibe ante el Celta

Dominador de varios registros, con orden y cadencia, con precisi¨®n y velocidad si lo requiere, en est¨¢tico y a la carrera, el Villarreal se divirti¨® ante el Celta, ninguneado y humillado en El Madrigal, sin respuesta alguna los celestes ante el buen hacer amarillo, allanada su clara victoria en una primera parte perfecta consiguiendo tres goles con distintos patrones. El primero lleg¨® tras un pase profundo de Trigueros a Roberto Soriano; el segundo tras provocar el error celeste con la presi¨®n alta; y el tercero tras un contragolpe letal. Exhibi¨® el Villarreal ante el Celta su potencial, el que se le presupon¨ªa con una gran plantilla casi al completo a la espera de Soldado y a la que Fran Escrib¨¢, con naturalidad, est¨¢ sacando su jugo.

Villarreal y Celta ennoblecen el f¨²tbol espa?ol y la Liga, con el esf¨¦rico de protagonista, conjugando ¨¦tica y est¨¦tica en el juego, dulce el conjunto vigu¨¦s, m¨¢s ecl¨¦ctico y pragm¨¢tico los amarillos, gratos de ver ambos equipos para los aficionados. Disfrut¨® como pocas veces El Madrigal de su equipo, tanto como Fran Escrib¨¢ que le gan¨® la partida a Berizzo, dej¨¢ndose querer el conjunto amarillo para matar al Celta con menos poso competitivo que el Villarreal.

Quiso el esf¨¦rico el Celta desde el inicio, catalizando el juego ofensivo Orellana, de regreso el chileno al equipo superada su lesi¨®n. Nada que incomode al Villarreal que se maneja en cualquier situaci¨®n, paciente cuando le toca replegarse, peligroso con espacios y sin ellos. Tocaba y tocaba el Celta y, sin llegar al cuarto de hora de partido, ya hab¨ªa recibido dos goles, por m¨¦rito del Villarreal y dem¨¦rito propio, con Roberto Soriano feliz protagonista en los dos tantos amarillos. La precisi¨®n de Manu Trigueros en un pase profundo, atendiendo el desmarque en diagonal de izquierda hacia el centro de Roberto Soriano, desmont¨® a la est¨¢tica defensa celeste que no adivin¨® la presencia del italiano, preciso en el disparo cruzado el exjugador de la Sampdoria para batir a Sergio ?lvarez.

No vari¨® la propuesta el Celta y tres minutos despu¨¦s sufri¨® un nuevo rev¨¦s, esta vez provocando el Villarreal con su presi¨®n alta el error de Sergio ?lvarez. El portero vigu¨¦s, sintiendo el acoso de Bakambu, despej¨® de mala manera el esf¨¦rico, cayendo ¨¦ste a los pies de Roberto Soriano, enviando el bal¨®n a la red el italiano tras dibujar una perfecta comba, fuera de sitio Sergio ?lvarez.

C¨®modo con la ventaja, pleg¨® velas el Villarreal a la espera de una contra mortal, mientras el Celta disfrutaba de una posesi¨®n inocua, con m¨¢s maneras que picante, sin encontrar caminos hacia el ¨¢rea de Asenjo, bien escoltado por la organizaci¨®n y sincron¨ªa de su defensa, con cuatro goles recibidos, la segunda menos goleada de la Liga tras el Atl¨¦tico de Madrid. Alcanz¨® el conjunto de Berizzo el descanso sin contar con una clara ocasi¨®n de gol con que dar p¨¢bulo a sus esperanzas en El Madrigal, deprimido por un contragolpe perfecto del Villarreal lanzado por Sansone y culminado por Bakambu, estren¨¢ndose como goleador el delantero franco-congole?o de vuelta al equipo de Escrib¨¢.

Hasta la fortuna sonr¨ªo al Villarreal que se encontr¨® con un nuevo gol nada m¨¢s regresar del vestuario, con Was de aliado al rematar sin `pretenderlo hacia su porter¨ªa. Al Celta le quedaba un tiempo por delante y un calvario, sin saber si adecentar el marcador o que el equipo de Escrib¨¢ no hiciese m¨¢s sangre. La hizo con un gol final de Trigueros. Solo la entrada del querido Giuseppe Rossi mereci¨® el largo aplauso de El Madrigal entusiasmado con la fiesta que le brind¨® el Villarreal.