El legado de las medallas

¡°Convertirnos en referentes para las ni?as es otra medalla tan importante como las que hemos conseguido estos a?os. Ese es el gran legado del ¨¦xito¡±, cuenta la capitana Laia Palau. La selecci¨®n femenina de baloncesto aterriz¨® en Madrid con el oro continental al cuello y la sensaci¨®n de haber derribado definitivamente la barrera de la notoriedad a base de gloria. Las 11 medallas conquistadas en lo que va de siglo, las cinco ¨²ltimas de forma consecutiva (dos oros y un bronce europeos, y las platas en el Mundial y los Juegos), jalonan el sacrificado camino a la cima del grupo que ha liderado el crecimiento del deporte femenino en Espa?a. De las 389.933 licencias de 2001 a las 771.746 actuales, con el baloncesto siempre al frente. ¡°No fallamos nunca. Con toda la humildad del mundo, pero ahora s¨ª que podemos decir que somos el mejor equipo en la historia de Espa?a¡±, reclam¨® Palau ante la turba de micr¨®fonos que esperaban a las campeonas. ¡°Estamos logrando resultados espectaculares y esperamos que siga as¨ª porque el baloncesto femenino se lo merece¡±, remat¨®.

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¡°Cada generaci¨®n ha ido aportando su granito de arena. Las que nos precedieron hicieron un esfuerzo enorme por abrirse paso, nosotras dimos un paso m¨¢s, y las chicas de ahora nos est¨¢n superando a todas. Son la bomba, han crecido en el ¨¦xito, y merecen protagonismo. Lo de estos ¨²ltimos a?os es hist¨®rico¡±, explica Elisa Aguilar, capitana junto a Amaya Valdemoro en el anterior oro continental en 2013, ahora en el staff de la Federaci¨®n.

A la estela del Mundial conquistado por la selecci¨®n masculina en 2006, el baloncesto femenino cogi¨® carrerilla definitiva con un crecimiento de m¨¢s de 40.000 licencias en siete a?os mientras las selecciones femeninas lograban m¨¢s de una treintena de medallas en todas sus categor¨ªas. ¡°Estas jugadoras transmiten como nadie los valores de este deporte y el sentimiento de equipo. Son el impulso para que cada vez sean m¨¢s las ni?as que quieren jugar al baloncesto¡±, apunta el presidente de la Federaci¨®n Espa?ola, Jorge Garbajosa, con la vista puesta en el Mundial femenino de 2018 en Espa?a, cuya sede se anunciar¨¢ en estos d¨ªas.

La crisis de la liga femenina en 2012, tras la desaparici¨®n del megal¨®mano proyecto del Ros Casares, forz¨® la salida de las mejores jugadoras espa?olas. Pero la circunstancia retroaliment¨® la capacidad competitiva de las emigrantes y aceler¨® la formaci¨®n de las j¨®venes en meritorios reductos como el Perfumer¨ªas Avenida de Salamanca, por el que han pasado la mayor¨ªa de las piezas de la selecci¨®n campeona de Europa. ¡°Competimos en una desigualdad de 9 a 1 con respecto a los grandes equipos rusos y turcos, que pagan salarios equivalentes a todo nuestro presupuesto para fichajes. Pero, a cambio, hemos creado una afici¨®n y cantera muy s¨®lidas¡±, explica Jorge Recio, presidente del club salmantino. ¡°En Salamanca las fichas escolares de baloncesto han superado a las de f¨²tbol sala. El 80% de las 1.300 que hay son de ni?as¡±, completa.

¡°Los medios nos est¨¢n ayudando a dar el empuj¨®n definitivo. Hace unos a?os nadie se sab¨ªa nuestros nombres y ahora nos tienen como referentes. Ganar tanto nos ha permitido visibilizarnos. Esa ha sido la gran victoria y ojal¨¢ cada vez haya m¨¢s ni?as que quieran seguir nuestro camino¡±, repasa Silvia Dom¨ªnguez, que tras su periplo internacional en el Ekaterimburgo regres¨® al Perfumer¨ªas en 2015. ¡°Hemos convertido en normal lo que antes era extraordinario. Hemos luchado mucho para llegar aqu¨ª y lo vamos a seguir haciendo para poder seguir viviendo estas experiencias. Que el Mundial de 2018 sea en casa es una motivaci¨®n extra y una gran oportunidad para consolidar el camino¡±, cierra Dom¨ªnguez.