Guardado impulsa al Betis ante un d¨¦bil Celta

Quique Seti¨¦n estren¨® su casillero de victorias como entrenador del Betis. Lo hizo gracias a dos espectaculares centros de Guardado muy bien rematados por Sergio Le¨®n y Feddal. Los tres fichajes de este nuevo Betis, m¨¢s Joaqu¨ªn, auparon a su equipo y acabaron con las aspiraciones de un Celta muy pobre en defensa. Por segunda semana consecutiva, los de Unzu¨¦ se adelantaron en el marcador y vieron c¨®mo sus rivales le remontaban. El Celta desaprovech¨® su ventaja y toc¨® demasiado en horizontal y muy poco en vertical. En realidad, los dos equipos intentaron un f¨²tbol que todav¨ªa les queda lejos. Una cosa es la filosof¨ªa y otra la pr¨¢ctica. Al Betis, curiosamente, le salv¨® m¨¢s el empuje y dos fant¨¢sticos remates de cabeza que el juego que Seti¨¦n quiere implantar, que requiere su tiempo. Mientras la filosof¨ªa del c¨¢ntabro se implanta, los triunfos saben a gloria y permiten ganar tiempo. Una victoria surgida del talento de Guardado, que rindi¨® mejor escoltado por Javi Garc¨ªa, y el coraz¨®n del eterno Joaqu¨ªn. El Celta fue un equipo ins¨ªpido, sin mordiente, superado por el empuje de un Betis que se sinti¨® muy arropado en su estadio y supo morder a un rival lento, sin chispa. Seti¨¦n y sus muchachos, mientras encuentran el m¨¦todo, disfrutaron de una victoria m¨¢s que merecida. Esencialmente porque, m¨¢s all¨¢ del estilo, tuvieron fe, ganas y hambre.

Fue una noche especial en el remozado Benito Villamar¨ªn. Un estadio con capacidad ahora para 60.000 espectadores que volvi¨® a reproducir un rito habitual, el de la lealtad cada temporada de una afici¨®n que roza los 50.000 socios. Un p¨²blico fiel y entusiasta, entregado a este proyecto de Quique Seti¨¦n que se estrenaba en su estadio. Una fiesta cortada, como casi siempre, muy pronto, a los 10 minutos, cuando un saque de esquina desnud¨® las carencias del Betis en defensa. El remate de Maxi G¨®mez fue desviado por Camarasa y cierta tristeza inund¨® el coliseo b¨¦tico. Enfrente, un Celta que, como el Betis, apuesta tambi¨¦n por el buen trato del bal¨®n. Tambi¨¦n, como el propio equipo b¨¦tico, presenta profundas grietas en defensa.

Fue, en definitiva, el choque de dos equipos muy irregulares y en pleno proceso de construcci¨®n. El Betis fue superando su gris inicio gracias al coraz¨®n de su emblema, Joaqu¨ªn, que tir¨® de los suyos bien secundado, en esta ocasi¨®n, por Guardado. Un Betis lleno de jugadores nuevos, al que se le antoja complicada la transici¨®n, pero un Betis con alma. No obstante, la debilidad del Celta, especialmente de Jozabed, tambi¨¦n le ayud¨® para igualar el marcador. Guardado se sac¨® un centro imponente y Sergio Le¨®n marc¨® de buen remate de cabeza. El primer remate a puerta de la Liga de los verdiblancos acab¨® en gol. El espectacular Benito Villamar¨ªn estall¨®.

El Betis fue mucho mejor que el Celta en la segunda mitad. Ofreci¨® una visi¨®n m¨¢s pr¨¢ctica, ayudado por un buen repliegue, impulsado por una presi¨®n al rival que le permiti¨® robar y salir con mucha velocidad al contragolpe. Javi Garc¨ªa se enton¨® en el centro del campo y Guardado y Joaqu¨ªn dibujaron excelentes pases al ¨¢rea. Siempre por arriba, los defensores del Celta se vieron incapaces de bloquear un gran remate de Guardado que salv¨® como pudo Sergio, muy inseguro en los balones a¨¦reos. En el minuto 77, fue Feddal el que se impuso por arriba tras otro buen centro de Guardado. El Celta, incapaz, lento y herido de muerte, apenas tuvo determinaci¨®n para lograr el empate. El Betis se defendi¨® bien, ayudado por su incre¨ªble afici¨®n, y se llev¨® tres puntos de forma merecida y justa. Una victoria que le da tiempo y aire en la b¨²squeda de su nueva personalidad. Y primera alegr¨ªa del curso para su fiel afici¨®n.