Incierto futuro del Bar?a, como el de Bartomeu
A pesar de sus limitaciones, el conjunto azulgrana aspira a recuperar el cartel perdido desde que gan¨® la Champions en Berl¨ªn 2015 ante la Juve
Josep Maria Bartomeu, el presidente del Bar?a, ha sido el ¨²ltimo en renegar del tridente, la f¨®rmula que precisamente le permiti¨® ganar las elecciones en 2015, el a?o en el que los azulgrana conquistaron su ¨²ltima Champions en Berl¨ªn. La delantera que formaron Messi, Luis Su¨¢rez y Neymar tuvo sentido mientras en el banquillo se sentaba Luis Enrique. A Lucho le preocupaban los goles y las victorias, expresadas sucesivamente en un triplete, un doblete y una Copa, se?al de que el equipo perd¨ªa fuego y tambi¨¦n aura, circunstancia agravada por la salida de Neymar por el PSG. Ahora se trata de recuperar el juego, ¡°volver al f¨²tbol colectivo e invertir en la cantera¡±, para continuar con la declaraci¨®n de intenciones que ha hecho Bartomeu.
As¨ª que Demb¨¦l¨¦ no sustituye propiamente a Neymar ni tampoco se apelar¨¢ necesariamente a la pareja Messi-Luis Su¨¢rez despu¨¦s de que el d¨²o del argentino con Neymar acusara ciertas deficiencias hasta la llegada del ariete de Uruguay. Acaso Messi se convertir¨¢ en m¨¢s imprescindible que nunca en ausencia de Neymar, el jugador que hab¨ªa asumido el liderazgo en ausencia del argentino, como se advirti¨® en partidos tan serios como el ganado por 0-4 en el Bernab¨¦u cuando mandaba Rafa Ben¨ªtez. Al 10 se le aguarda en el Bar?a como el futbolista que debe culminar el juego coral de un equipo que a¨²n no ha corregido las disfunciones advertidas en el ¨²ltimo a?o de Luis Enrique.
El Barcelona necesitaba un lateral derecho y a d¨ªa de hoy no se sabe si Semedo ser¨¢ mejor que Sergi Roberto, dispuesto a recuperar su puesto natural de centrocampista y a mezclar con Messi. La directiva descart¨® la contrataci¨®n de Beller¨ªn, el candidato n¨²mero uno a sustituir al a?orado Alves, de la misma manera que tampoco ha incorporado a un central, como pretend¨ªa Ernesto Valverde con ??igo Mart¨ªnez. Aparentemente falta un tercer defensa que pueda competir con Umtiti y Piqu¨¦. Hay serias dudas sobre las alternativas de Mascherano y Vermaelen, inicialmente descartado y, al final, repescado mientras Marlon era cedido al Niza.
A pesar de que la n¨®mina de centrocampistas es de nueve, tambi¨¦n se contin¨²a sin cubrir la vacante dejada por Xavi. El equipo precisa de un interior con pausa y control de juego y en cambio ha preferido apostar por un volante f¨ªsico y con llegada como Paulinho. La incorporaci¨®n del brasile?o, dispuesto a dar consistencia y equilibrio al equipo, contrasta con las ausencias de Verratti o Seri: uno no pudo ser y al otro se le descart¨® de mala manera despu¨¦s que ya se hubiera anunciado un acuerdo con el Niza. Igualmente fracasaron las negociaciones para traspasar o ceder a Arda Turan y Andr¨¦ Gomes mientras se mantiene la inc¨®gnita sobre el futuro del hoy lesionado Rafinha.
Un largo y veterano plantel
La coyuntura favorece a la vieja guardia, y tambi¨¦n a futbolistas como Deulofeu y Denis Su¨¢rez, y exime a Valverde de jugar por decreto con el 4-3-3. Ni siquiera los m¨¢s ortodoxos se quejan cuando el equipo se despliega o recoge a partir de un doble pivote (4-2-3-1). Ha menguado la calidad y aumentado la versatilidad como se ha visto en la Liga. Valverde ha intervenido a cada partido y el equipo ha salido ganador en sus partidos contra el Betis, Alav¨¦s y Espanyol.
Fuerte con los d¨¦biles, queda por saber ahora su comportamiento con los grandes despu¨¦s de su desmoralizante derrota contra el Madrid en la Supercopa. El partido de ma?ana contra la Juve calibrar¨¢ el potencial del equipo azulgrana, que las dos ¨²ltimas temporadas no ha pasado de los cuartos de final de la Champions, la ¨²ltima eliminado curiosamente por el campe¨®n de Italia. El Barcelona nunca falt¨® a su cita con Europa y sus ¨²ltimos cuatro t¨ªtulos ¡ªel quinto se sit¨²a en 1992¡ª se conquistaron a partir de 2006.
La competitividad barcelonista ya fue cuestionada el curso pasado despu¨¦s de salir goleado del Parque de los Pr¨ªncipes (4-0) y Tur¨ªn (3-0) y su hist¨®rica remontada ante el PSG (6-1) qued¨® empa?ada por la derrota con la Juve. El mercado de fichajes no ha ayudado a mejorar su imagen porque los refuerzos de Semedo, Paulinho, Deulofeu y Demb¨¦l¨¦ han tenido menos impacto que la salida de Neymar y los candidatos al t¨ªtulo han aumentado desde que el Madrid ganara a la Juve en Cardiff. Valverde dispone de m¨¢s futbolistas que nunca (24) y, sin embargo, la plantilla, m¨¢s internacional y menos canterana de los ¨²ltimos tiempos envejece y sus dos futbolistas bandera no han renovado: Messi (30) e Iniesta (33). Los azulgrana no han fichado a los jugadores que quer¨ªan y tampoco han podido prescindir de los que ten¨ªa pensado una estructura t¨¦cnica confundida desde la destituci¨®n de Zubizarreta en 2015.
El Bar?a se ha ido empeque?eciendo desde Berl¨ªn, tiene menos impacto en Europa, y es inestable por el distanciamiento del plantel con la directiva y la moci¨®n de censura cursada contra Bartomeu. No conviene apostar, sin embargo, contra Messi, pichichi de la Liga (cinco goles y 19 regates) y l¨ªder de un equipo que en tres partidos ha sumado nueve puntos, marcado nueve goles y no encajado ninguno. La pregunta es si alcanzar¨¢ con la bandera de Messi y la sensatez de Valverde para optimizar los recursos y competir en Europa. El equipo parece evolucionar m¨¢s que involucionar desde la llegada al Camp Nou del ext¨¦cnico del Athletic. El futuro, sin embargo, se presenta tan incierto como el de Demb¨¦l¨¦ o el de Bartomeu. Nadie sabe que hay despu¨¦s del tridente salvo Messi.
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