Rudi Garc¨ªa, un motivador de sangre caliente
El t¨¦cnico franc¨¦s, hijo y nieto de espa?oles, personaliza la transformaci¨®n del Olympique de Marsella a partir de su car¨¢cter competitivo y de su gusto por el juego de ataque
¡°Llegar hasta la final no es un logro, ya que no nos da la clasificaci¨®n directa para la Champions, ni tampoco el trofeo. As¨ª que con todo respeto hacia nuestros futuros adversarios, no llegamos a la final como favoritos, pero iremos igualmente con la ilusi¨®n de ganar¡±. Despu¨¦s de aclararles esto a sus jugadores en el vestuario (y evidenciar cuales son las verdaderas aspiraciones de su equipo), Rudi Garc¨ªa (Nemours, 54 a?os) acab¨® empapado.
El preparador del Olympique de Marsella, elegido mejor entrenador de Francia en 2011 despu¨¦s de proclamarse campe¨®n de liga y Copa con el Lille -no ocurr¨ªa desde 1946 y la ¨²ltima Ligue 1 de Les Dogues se conquist¨® en 1954-, es un hombre de sangre caliente. Se advierte en sus discursos, incentivadores, en su manera de dirigirse a los jugadores, directa y a los ojos, a la prensa -le arrebat¨® la c¨¢mara a un fot¨®grafo en una comparecencia porque le molestaban los disparos continuos-, y de dirigir los partidos (ha acabado haciendo la croqueta en el c¨¦sped en alguna ocasi¨®n).
Rudi, nacido en 1964, dos a?os despu¨¦s de que el ciclista alem¨¢n Rudi Altig -del que hered¨® su nombre-, ganase la Vuelta del 62 para regocijo de su padre Jose -Pepe Garc¨ªa, futbolista almeriense emigrado a Francia por culpa de la Guerra Civil y que lleg¨® a jugar en el Sedan-, vivi¨® siempre a caballo entre dos culturas. Garruchero de ra¨ªz, el pueblo almeriense en el que nacieron sus abuelos, regresa all¨ª siempre que puede. El acento de la zona ha neutralizado el franc¨¦s, de ah¨ª que se maneje con soltura aborigen en ambos idiomas.
Tras una discreta carrera como futbolista -la rodilla y la espalda nunca le acompa?aron-, con 30 a?os debut¨® en el Corbeil-Essones, aunque su confirmaci¨®n no lleg¨® hasta que se hizo cargo del Lille en 2008 y tres a?os m¨¢s tarde logr¨® un doblete inesperado. En aquel equipo jugaba Hazard, elegido mejor del campeonato con 20 a?os, y Rami, con el que ha vuelto a coincidir ahora en el Marsella.
Amante del f¨²tbol ofensivo, seguidor de la liga espa?ola y tanteado para entrenar al Barcelona tras la marcha del Tata Martino en 2014, su ¨²nica experiencia fuera de Francia la vivi¨® en la Roma. All¨ª sum¨® diez victorias consecutivas en sus primeros partidos de liga en el banquillo en 2013, el mejor comienzo en la historia del club giallorossi. Tres a?os despues ces¨® en su cargo y desembarc¨® en el Marsella.
¡°Ganar, ese es el objetivo de nuestro trabajo. Pero ganar sin jugar bien, a largo plazo no es posible. Si haces jugar bien a tu equipo, tienes m¨¢s posibilidades de ganar¡±, ha asegurado repetidamente. ¡°No puedes pedir a tu equipo defender permanentemente y adaptarse constantemente al adversario. Psicol¨®gicamente desgasta. Sin embargo, al priorizar convicciones de juego m¨¢s positivas, les ofreces la posibilidad de disfrutar¡±.
Contratado por el presidente Jacques-Henri Eyraud, el hombre colocado por el multimillonario estadounidense propietario del Marsella desde hace un a?o y medio, Frank McCourt, y con el respaldo del director deportivo, Andoni Zubizarreta, Garc¨ªa ha llevado a su equipo hasta la final de Lyon con el objetivo de ganar un trofeo europeo tras 25 a?os de sequ¨ªa. ¡°Para hacer de esta temporada algo memorable, tenemos que ganar la Europa League. Seremos outsiders ante el Atl¨¦tico¡±, asegur¨® tras lograr el pase a la final. Ser recordado, ganar un t¨ªtulo y jugar la Champions, son los tres objetivos de Garc¨ªa para devolver al Marsella, ¨²nico equipo franc¨¦s con una orejona (1993) a la ¨¦lite europea.
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