No me enterr¨¦is todav¨ªa

Messi. Todos los seguidores del Mundial deber¨ªamos leer El entierro prematuro de Poe para recordar que es muy importante no precipitarse.

Yo el primero.

Tras el partido Argentina-Croacia pens¨¦ que Messi se hab¨ªa ca¨ªdo definitivamente de la historia. Y no tanto por la derrota como por la inexplicable apat¨ªa que mostr¨® en su pasear depresivo, como de alma en pena, por el campo.

Al verle tan fr¨¢gil y vulnerable le apreci¨¦ humanamente m¨¢s. Pero el mito futbol¨ªstico se me cay¨®. Su actitud era impropia de un l¨ªder. Le consideraba el mejor del mundo y uno de los m¨¢s grandes de todos los tiempos, pero ese d¨ªa se me vino abajo. No me pod¨ªa imaginar a Di St¨¦fano o Pel¨¦, ni en su partido m¨¢s aciago, entregado de esa manera.

A mi edad deber¨ªa haber aprendido a contar hasta 100. Con su orgullo contra Nigeria, Messi demostr¨® que sigue en la historia. Y que ¨¦ste a¨²n puede ser su Mundial.

Se apag¨® la luz. Espa?a pareci¨® un buen equipo contra Portugal, un equipo malo contra Ir¨¢n y un equipo p¨¦simo contra Marruecos. En los tres partidos hubo algunos elementos comunes: positivos, Isco y Costa; negativos, la flojedad defensiva y una tremenda soser¨ªa general. Y rode¨¢ndolo todo, una sensaci¨®n de extrav¨ªo colectivo. Como si Lopetegui, al irse, hubiera apagado la luz.

La inseguridad de Hierro contagia al grupo. La inseguridad del grupo contagia a Hierro. Y la inseguridad de De Gea contagia a todos. Fiel a sus costumbres ciclot¨ªmicas, Espa?a ha emprendido un proceso de autoflagelaci¨®n, al que llama autocr¨ªtica, y que es una inmersi¨®n profunda en el pesimismo m¨¢s tenebroso.

Pero esperemos al partido con Rusia. El f¨²tbol es como la Bolsa, capaz de pasar del des¨¢nimo a la euforia a la velocidad del rayo por razones cogidas por los pelos.

Manual de instrucciones. Hay pocas cosas tan instructivas y enternecedoras como el manual de instrucciones que cada pa¨ªs se cree obligado a difundir para proteger a sus polluelos cuando van a encontrarse con los otros, esa sombra que nos acecha con multitud de riesgos. En su d¨ªa conocimos las instrucciones de la Asociaci¨®n de F¨²tbol Argentina dirigida a los hombres que quisieran ligar en Rusia, con un consejo sorprendente: la conveniencia de ir limpios, pues al parecer las mujeres rusas tienen gustos as¨ª de extravagantes. A?adimos ahora otra recomendaci¨®n sofisticada.

La se?ora Govorit Moskva, presidenta del comit¨¦ de familia del Parlamento ruso, ha hecho un llamamiento solemne a las mujeres de su pa¨ªs para que eviten las relaciones sexuales con los visitantes extranjeros, pues pueden conducir al nacimiento de ni?os en familias incompletas. As¨ª las califica, ¡°incompletas¡±. ?Y por qu¨¦?. Porque en cuanto acabe el Mundial se marchar¨¢n. ?No es adorable?