Asensio hereda el Real Madrid
La venta de Cristiano Ronaldo y las bajas de Ramos, Marcelo, Isco y Bale examinan el car¨¢cter del mallorqu¨ªn para asumir responsabilidades en el equipo de transici¨®n que visita (21.00) al CSKA
El Madrid ha conservado su grandeza regener¨¢ndose. La aparici¨®n de Ra¨²l puso fin en 1994 a la crisis que sucedi¨® al declive de la Quinta y Cristiano disip¨® en 2009 la incertidumbre que provoc¨® la marcha de Ra¨²l. La venta de Cristiano a la Juventus el pasado verano ha abierto un periodo de predecible inestabilidad. Que el equipo se mantenga o no en la excelencia depende de que surja un l¨ªder con impacto en el ¨¢rea contraria. No hay m¨¢s candidatos a la vista que Marco Asensio, probablemente el m¨¢s dotado t¨¦cnica y f¨ªsicamente de los futbolistas que ha alumbrado la selecci¨®n espa?ola en los ¨²ltimos a?os. Un atacante extraordinario sobre el que pesa una inc¨®gnita grav¨ªsima en relaci¨®n a un car¨¢cter que le induce a discurrir por muchos partidos con menos aire participativo que contemplativo. Lo expresa un analista muy pr¨®ximo al Madrid de forma gr¨¢fica: ¡°Asensio padece el s¨ªndrome del ¨¢rbitro de tenis¡±.
Las bajas de Bale, Isco, Marcelo y Ramos colocan a Asensio, a sus 22 a?os, en el centro de la escena. Justo cuando se acumulan las ausencias de algunos de los hombres m¨¢s resolutivos de la plantilla, el Madrid con menos pegada de la ¨²ltima d¨¦cada (solo 12 goles en siete jornadas de Liga) exige una reacci¨®n. Por casualidad, la responsabilidad llama a Asensio en la segunda jornada de la Champions, en Mosc¨², en el estadio Luzhniki, donde espera el CSKA (21.00 horas, Movistar Liga de Campeones). Exactamente all¨ª donde el pasado 1 de julio disput¨® su primer partido completo con Espa?a, en uno de los d¨ªas m¨¢s funestos de la historia de la selecci¨®n. La eliminaci¨®n contra Rusia en octavos coincidi¨® con la primera titularidad del madridista en el Mundial. Muy a su pesar. La molienda descubri¨® la clase de problema que le impide despegar a la altura de su clase.
Armado de virtudes que le facultan para destrozar a Croacia ¡ªactual subcampe¨®n del mundo¡ª con dos goles y tres asistencias en su ¨²ltimo partido internacional, el mallorqu¨ªn suele incurrir en dispersiones que le alejan de su mejor versi¨®n competitiva. De pronto, su mente se desconecta y comienza a contemplar las jugadas como si ¨¦l ya no formara parte del destino del partido.
Dominio abosluto del juego... y discontinuidad
M¨¢s de un t¨¦cnico del club ha advertido que la agresividad mental es el componente ps¨ªquico decisivo para triunfar en el f¨²tbol moderno, en donde los t¨ªtulos no se ganan haciendo exhibiciones una vez cada mes sino ayudando al equipo cada d¨ªa. La producci¨®n de un atacante no solo se cuenta en regates, goles y asistencias, sino en actividad durante los partidos: colocaci¨®n defensiva, desmarques, ayudas, movimientos de apoyo y todo un g¨¦nero de decisiones y maniobras oscuras que no son f¨¢cilmente detectables para el aficionado de ojo perezoso ni aparecen en los libros de estad¨ªstica. Asensio domina todas estas facetas pero las pone en pr¨¢ctica de modo discontinuo y esta alternancia lo lleva en ocasiones a desengancharse de los partidos.
Los entrenadores han debatido largamente sobre qu¨¦ cualidades mejoran con el adiestramiento y qu¨¦ cualidades permanecen invariables hasta la tumba. Las cuestiones que constituyen el car¨¢cter son dif¨ªcilmente modificables con ejercicios. El reto de Asensio pasa por librar una batalla interior.
¡°Hay que dejar tranquilo a Asensio, meterle menos piedras en la mochila¡±, dijo Sergio Ramos, hace un a?o, cuando le preguntaron por las formidables posibilidades de su compa?ero en el club y en la selecci¨®n. Entonces la pol¨ªtica mandaba reservar al muchacho hasta que madurase.
¡°Ya es hora de meterle alguna piedra en la mochila¡±, dijo Ramos hace dos semanas, en v¨ªsperas del partido contra la Roma. ¡°Empieza a tener un rol importante y es el principio para marcar una ¨¦poca. Ojal¨¢ ¨¦l siga en esa l¨ªnea¡±.
El mismo molde que Bale
Lopetegui le dej¨® en el banquillo esa noche para poner a Isco en su lugar. Contra la Roma se qued¨® fuera de la alineaci¨®n por primera vez en la temporada. Jug¨® media hora y sali¨® de buen humor. ¡°Ponerme las piedras en la mochila que quer¨¢is, que para eso estoy aqu¨ª¡±, declar¨® luego el futbolista balear.
Suma tres asistencias y un gol (el tanto de la victoria ante el Espanyol) en siete partidos de Liga, donde remat¨® 17 veces, recuper¨® 22 balones y dio 361 pases. Su perfil de actuaci¨®n le desplaza a una posici¨®n m¨¢s retrasada que Bale, que suma tres goles (Girona, Getafe y Legan¨¦s), dos asistencias, 26 remates, 205 pases y cinco recuperaciones. El contraste con Bale determinar¨¢ su evoluci¨®n pues ambos encajan en un molde parecido. Tanto ¨¦l como los entrenadores que le conocen insisten en que su posici¨®n ideal es la de extremo por la derecha a pierna cambiada. El puesto que prefiere ocupar Bale.
Su posici¨®n ideal es la de extremo por la derecha a pierna cambiada. La que tambi¨¦n prefiere el gal¨¦s
¡°Tenemos buenas sensaciones¡±, dijo Julen Lopetegui ayer en Mosc¨²; ¡°venimos de un partido dur¨ªsimo en el que fuimos netamente superiores a un gran equipo como es el Atl¨¦tico. Demostramos que tenemos recursos para superarnos en situaciones adversas. Lo que tenemos que hacer es generar el m¨¢ximo n¨²mero de ocasiones posibles a lo largo de la temporada. As¨ª el gol llegar¨¢¡±.
Lopetegui se expres¨® con su habitual optimismo tecnocr¨¢tico respecto a la falta de pegada y a las bajas. ¡°Las dificultades que nos encontraremos las solucionaremos con los recursos que tenemos. Para eso son los recursos de los equipos¡±, dijo.
La naturaleza ha dotado a Marco Asensio de mucho m¨¢s que ¡°recursos¡±. El chico tiene todo para ser el pilar del Madrid del futuro siempre y cuando sepa superar el s¨ªndrome del ¨¢rbitro de tenis.
Lopetegui, en sentido contrario
Cuentan sus amigos que Julen Lopetegui permaneci¨® en estado de shock despu¨¦s de que Luis Rubiales le destituyera del cargo de seleccionador nacional el 13 de junio, en v¨ªsperas del inicio del Mundial.
Reci¨¦n contratado por el Madrid, hizo las maletas sumido en aparente inmutabilidad y se desplaz¨® desde Krasnodar a Mosc¨² para regresar a Espa?a. Iba entero al aterrizar en el aeropuerto moscovita de Sherm¨¦tievo. Entonces se cruz¨® con una comitiva de hinchas mexicanos tocados de sombreros con lentejuelas. La visi¨®n le record¨® que iba en sentido contrario. El Mundial quedaba atr¨¢s y la impresi¨®n le hizo llorar desconsolado.
¡°No he pensado en esto en estos d¨ªas¡±, dijo, ojeroso, cuando ayer le preguntaron qu¨¦ sent¨ªa al regresar a Mosc¨². ¡°Estamos centrados cien por cien en lo que nos ocupa¡±.
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